Club Siglo XXI

Maraña: “Zapatero no repartió de forma justa los sacrificios de la crisis”

Jesús Maraña en el Club Siglo XXI

INFOLIBRE

Elaborar un balance del último tiempo de José Luis Rodríguez Zapatero en el poder, sintetizar la IX Legislatura (2008-2011), significa enjuiciar la gestión que de la crisis económica hizo el Gobierno socialista. Y, sobre todo, de la distribución de las cargas de la recesión. Para Jesús Maraña, responsable editorial de infoLibre, el principal error fue ese, no repartir de modo equitativo las cargas de la crisis, pese a que sí disponía de mayor margen de maniobra. 

Esta conclusión coronó la intervención, en la tarde del martes, del periodista ante el auditorio del Club Siglo XXI. Maraña fue invitado por el presidente del prestigioso foro de debate, el exministro Eduardo Zaplana, a analizar la IX Legislatura, dentro del ciclo Un balance de 35 años de democracia. ¿Continuidad o reforma?, una serie de conferencias por la que pasaron ya periodistas como Pedro J. Ramírez, Francisco Marhuenda o Ernesto Sáenz de Buruaga. La de este martes, con el repaso de una legislatura "apasionante", como dijo Zaplana, cerró el ciclo.

"Zapatero renunció a parte de sus ideales creyendo que hacía lo mejor para España al someterse a las imposiciones de Bruselas, Fráncfort y Berlín. 'Cueste lo que me cueste', dijo. Y no supo, no pudo o no quiso utilizar el margen que tenía para al menos elegir una forma más justa de repartir los sacrificios impuestos. Eso es lo que, a mi modesto entender, ensombrece una legislatura en la que se evitó un posible cataclismo financiero, pero también se aceptó un camino que está desmontando los mejores logros de décadas de progreso social en Europa y en España", resumió Maraña, que fue director de Público desde marzo de 2010 hasta el cierre de la edición en papel, en febrero de 2012. Público

Antes de llegar a esa conclusión, el periodista recorrió los principales hitos del segundo mandato de Zapatero, una legislatura "absolutamente marcada por la crisis económica", en la que el Ejecutivo "perdió la iniciativa" y en la que además "se llevó por delante parte de los proyectos de calado social" iniciados en el periodo 2004-2008. Tres errores son achacables al expresidente, según su análisis: negar la crisis primero, luego hacer predicciones "optimistas" tumbadas por la realidad y, por último, "doblarse ante las presiones externas (Comisión Europea, BCE y Alemania) para adoptar un programa de recortes presupuestarios que contradecía la visión socialdemócrata" del líder del PSOE y generó "la decepción y la incomprensión de una buena parte" de su electorado. 

"La crisis se merendó a Zapatero", un "zombi"

Maraña fue desplegando su reflexión de forma cronológica. Recordó cómo en la dura campaña de 2008, Zapatero prometió pleno empleo. Era su primera "irresponsabilidad política" de la segunda legislatura, ya que en los meses anteriores el paro había ido aumentando y ya había estallado la crisis de las subprime en Estados Unidos. El responsable editorial de infoLibre no cree que el expresidente intentara "engañar" a los españoles, como lo prueban el hecho de que las previsiones del PP tampoco eran tan negras y el que los organismos internacionales no avizoraran la magnitud de la depresión. "Simplemente no creía que se avecinara la mayor recesión de las últimas décadas", apuntó. Es decir, "la crisis se merendó a Zapatero y casi todo su programa electoral. Desde el otoño de 2008, con la caída de Lehman Brothers, el estallido de la burbuja inmobiliaria y la sequía absoluta del crédito, Zapatero fue una especie de zombi que iba reaccionando a los desastres que se iban produciendo con mayor o menor acierto, pero en cualquier caso a la defensiva" y con un "perfil político no tan alejado" del que actualmente muestra Mariano Rajoy.

El periodista pasó a desgranar después la acusación de que Zapatero tardó demasiado tiempo en reaccionar a la crisis, afirmación con "trampa", porque el Gobierno socialista sí tomó "medidas". Cosa distinta, puntualizó, es que no gustaran a todo el mundo o tuvieran unos "raquíticos" resultados. Eran medidas contracíclicas, keynesianas, de estímulo a la economía, en los días en los que "no se había impuesto el discurso único de la auteridad". Además, Zapatero "frenó el primer riesgo de cataclismo financiero", aunque lo hizo "regando de dinero público a la banca". 

Llegó 2010, el rescate de Grecia y la imposición "del discurso único de la austeridad"discurso único. En mayo, el expresidente anunció su primer gran tijeretazo con el que, a juicio de Maraña, "se hizo el haraquiri". "Asumió como propia la tesis de que el principal factor de inestabilidad de los mercados o de ataques especulativos sobre la deuda era el abultado déficit público español, cuando por esas mismas fechas nadie atacaba la libra". Y asumió, siguió, la prioridad de unas cuentas equilibradas, "en contradicción con la política expansiva" de los años anteriores. 

Reforma de la Constitución con el apoyo de Rajoy

El periodista reconoció que cabe argumentar que Zapatero "hizo lo que tenía que hacer" para que España no acabara como Grecia, una justificación "más o menos" semejante a la que emplea hoy el Ejecutivo de Rajoy. Sin embargo, el "descrédito" del expresidente entre su propio electorado "vino no tanto por el recorte que decretó como por la parcialidad del mismo". "Desde la óptica de un votante de izquierdas, no se podía entender que se ajustara en pensiones o en salarios públicos y no se tocara la fiscalidad a grandes empresas o al sector financiero", o no se hablara de quitar "privilegios" a la Iglesia o no se luchara de modo "decidido" contra el fraude. Maraña apuntó que hasta el ajuste que más tarde aplicó el tecnócrata Mario Monti en Italia parecía más "equilibrado" que el español. 

Después, añadió el máximo responsable de infoLibre, Zapatero impulsó la reforma laboral –que no consiguió reducir "la dualización del mercado de trabajo"–, la de las entidades bancarias y la de pensiones, esta última más como un "intento más de calmar a los mercados". Ninguna de las tres, analizó, sirvió para "frenar el acoso de la deuda". Al final, el jefe del Ejecutivo propició una modificación urgente de la Constitución para poner un correaje al déficit y la deuda, "sin debate público previo de ningún tipo y sin consultarlo con su propio partido". 

Maraña censuró que esa reforma de la Carta Magna suponía “renunciar a una política económica propia”. Y puntualizó a continuación: “Lo hizo Zapatero con el apoyo de Rajoy, que ya había hecho esa propuesta anteriormente.

Pese a lo censurables que pudieran ser algunas políticas del expresidente, el periodista reconoció un resultado “importante”: si los Gobiernos griego e italiano fueron sustituidos sin pasar por las urnas, en España Zapatero “se quemó políticamente a lo bonzo garantizando, eso sí, unas elecciones generales limpias y un traspaso de poderes perfectamente democrático”. Además, mantuvo algo que “Rajoy perdió muy pronto”: que la prima de riesgo española se mantuviera por debajo de la italiana.

Los logros del último mandato

El responsable de infoLibre dejó para la última parte de su intervención los otros temas que recorrieron la legislatura, en los que el Ejecutivo socialista sí cosechó mayores logros. Caso del fin de ETA –“Es una actitud muy cicatera no reconocerle que sufrió un tremendo desgaste político para contribuir al objetivo de la paz”–. Caso también de la financiación autonómica, la Ley Antitabaco o la “vuelta de tuerca” al Código Penal para castigar más los delitos de terrorismo, pederastia y corrupción. En política exterior, el segundo mandato del PSOE se centró en la “promoción” de la paz “frente a la inseguridad y el terrorismo” y en el desarrollo de relaciones con África y Asia. Más dudas suscitó, dijo, la presidencia de España de la UE en el primer semestre de 2010, ya que no puso “el foco” en una dirección que no fuera el discurso del eje franco-alemán.

Maraña elogió la capacidad de Zapatero para “romper moldes” en política como el nombramiento de una mujer, Carme Chacón, como ministra de Defensa, designación que se sumó a otras decisiones “de calado” de la primera legislatura, como los matrimonios homosexuales, la Ley de Igualdad, la Ley de Dependencia o, ya en el segundo mandato, la reforma de la Ley del Aborto. Añadió que cabe computar al expresidente su “respeto a la libertad de información”. En el haber, señaló, la “independencia” que procuró a RTVE.

No impuso “reglas del juego” en el PSOE

El último capítulo de la intervención se destinó a la vida interna del PSOE. Zapatero decidió apartarse de la carrera por la candidatura a la Presidencia en abril de 2010. Entonces se dio por hecho que habría dos rivales en primarias, Alfredo Pérez Rubalcaba y Carme Chacón. Pero el movimiento de Patxi López para impedir la consulta interna hizo que Chacón “se retirara”. Aquella estratagema, valoró Maraña, “desautorizó al propio Zapatero como referencia por no haber impuesto el cumplimiento de las reglas de juego, pero sobre todo hizo trizas la credibilidad de la democracia interna del PSOE”. Resultado: el descalabro del PSOE en las generales de 2011.

Entretanto, surgió el magma social que dio lugar al movimiento del 15-M, el “alejamiento radical” de la ciudadanía respecto a la clase política, que considera “súbdita del poder financiero”. Los indignados o la lucha, más actual, de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, agregó el periodista, “obligan a replantear muchas cosas en el sistema” si se quiere frenar el debilitamiento de la democracia.

“Así es como termina la IX Legislatura, nada menos que con la puesta en solfa de una arquitectura institucional que necesita nuevos modos, lenguajes, mensajes y compromisos”, remachó el director editorial de infoLibre. Eslabón que engarzó con su reflexión final: cómo Zapatero se equivocó al no elegir “una forma más justa de repartir los sacrificios impuestos”.

“Habría sido deseable que hubiera ido por libre”

La comisión de la crisis y el rescate descarta llamar al Congreso a los grandes bancos y constructoras

La comisión de la crisis y el rescate descarta llamar al Congreso a los grandes bancos y constructoras

¿Fue demasiado por libre?, se le preguntó a Maraña ya en el coloquio. “Desde luego, si hubiera querido ir por libre, no lo consiguió”, respondió, para añadir: “Habría sido deseable que hubiera ido más por libre”, que hubiera contestado al discurso único de la austeridad.

La última reflexión del acto la suscitó Fernando Moraleda, secretario de Estado de Comunicación de 2005 a 2008, que planteó la siguiente cuestión: ¿Fue Zapatero injustamente “castigado” por los medios? En su respuesta, Maraña dstacó que “Zapatero ha sido el presidente que mejor ha encajado las críticas, sin ninguna duda. Su reacción, hasta donde yo sé, siempre fue de un respeto absoluto. De hecho, trató mejor a los medios que le criticaron que a aquellos que coincidían más con él. Ha seguido dando entrevistas a los medios que peor le trataron. Y el intento de que el presidente de RTVE fuera elegido por consenso fue honesto y limpio. Y no ha ido por buen camino lo que se ha hecho posteriormente”. O sea, la modificación introducida por el Gobierno del PP para que el jefe de la Corporación sea elegido sin necesidad de acuerdos.

Acabado el ciclo de repaso a las legislaturas democráticas, pasarán por el Club Siglo XXI tres expresidentes del Gobierno: Felipe González, José María Aznar y el propio Zapatero, que disertarán sobre la vigencia de la Constitución.

Más sobre este tema
stats