Comunidad de Madrid
El PSOE se aferra a Gabilondo para una moción de censura con Robles en la recámara para unas elecciones
Prácticamente desde que la pandemia abriera una gran brecha entre los socios de gobierno en la Comunidad de Madrid, dos eran los rumores que se comentaban con frecuencia dentro de los círculos políticos madrileños. El primero, la posibilidad de una moción de censura contra la presidenta regional respaldada por Ciudadanos. Y el segundo, que Isabel Díaz Ayuso se adelantase a ese movimiento convocando elecciones anticipadas. Una continua calma tensa a la que el terremoto murciano ha puesto punto y final este martes. Al final, la líder del Ejecutivo madrileño ha pulsado el botón del adelanto. Es cierto que hay un embrollo jurídico importante tras las mociones registradas por PSOE y Más Madrid, iniciativas que han sido admitidas a trámite por la Mesa de la Cámara regional en reunión extraordinaria con el voto a favor de la formación naranja. Sin embargo, la decisión de Ayuso ha abierto el debate sobre las posibles candidaturas con las que la izquierda regional podría acudir a la cita con las urnas, en caso de que finalmente se llevase a cabo, en apenas siete semanas.
Vaya por delante que las tres formaciones del espectro progresista insisten por activa y por pasiva en que todavía no se está en esa pantalla. Al fin y al cabo, todas ellas dan por hecho que no habrá comicios. "Es algo que está totalmente descartado. La Asamblea de Madrid no está disuelta", asevera al otro lado del teléfono una fuente de Unidas Podemos-Izquierda Unida-Madrid en Pie. Existe un debate notable al respecto. El Estatuto de Autonomía establece que el presidente no puede acordar la disolución de la Cámara "cuando se encuentre en tramitación una moción de censura". En este caso, desde Presidencia defienden que la firma del decreto se produjo a mediodía y que, por tanto, se adelantaron al registro de las mociones de censura, que llevó a cabo una hora después. Sin embargo, dicho decreto no ha entrado todavía en vigor, y la Mesa de la Cámara regional ya ha admitido a trámite las iniciativas planteadas por socialistas y Más Madrid. "En el momento en el que la Mesa las admite, la Asamblea no está disuelta", defienden desde la oposición, convencidos de que Ayuso se ha pegado "un tiro en el pie".
Pero lo cierto es que el movimiento de la presidenta regional ha terminado por abrir el debate sobre las posibles papeletas de la izquierda. En el Grupo Socialista Madrileño se agarran, de momento, a su actual portavoz. "Va a ser Gabilondo, es de cajón", se aventura a decir uno de los parlamentarios de la formación en la Cámara madrileña. Coincide con él un miembro de la Comisión Ejecutiva de los socialistas madrileños. "Es la mejor salida", asegura al otro lado del teléfono, al tiempo que recuerda que con el profesor los socialistas madrileños se impusieron en los últimos comicios con más de cien mil votos de diferencia respecto a Ayuso. De hecho, considera que su perfil tranquilo y su tono conciliador podría ser clave ante una candidata conservadora que se juega todo a un acuerdo con la extrema derecha: "O el PP y Vox o Gabilondo", dice. Una forma de oposición que, sin embargo, le ha granjeado numerosas críticas en los últimos meses. De hecho, el nombramiento de José Cepeda como portavoz adjunto se interpretó como una estrategia del partido para endurecer la forma de hacer oposición.
Robles en las quinielas
Desde Ferraz cuentan con que no habrá elecciones. Por eso, dicen fuentes del ámbito nacional, "no hay reconsideración de la candidatura de Gabilondo". "La vía de la moción de censura exige que el candidato sea un diputado", sentencian. Sin embargo, en las últimas horas han empezado a sonar con fuerza otros nombres ante una posible nueva cita con las urnas. Uno de ellos es el de la actual ministra de Defensa, Margarita Robles. "Ya se habló de ella de cara al Ayuntamiento de Madrid", recuerda una de las fuentes de la Ejecutiva del PSOE madrileño. En este sentido, otras fuentes explican que podría ser una buena opción para hacer frente a una Ayuso que tendrá la vista puesta en la más que previsible subida de la extrema derecha. Es un perfil fuerte que podría ayudar a pescar votos de Ciudadanos y que bloquearía en parte el discurso de la candidata conservadora. En todos estos meses, la ministra ha sido uno de los contrapuntos de Unidas Podemos en el Consejo de Ministros. Y, además, goza de buena prensa entre la derecha mediática. Por eso, es una opción que no puede descartarse.
Robles, de momento, ha preferido zanjar el debate durante un receso de la Comisión de Defensa del Congreso: "Me veo como ministra de Defensa y, por el respeto que tengo al Ministerio y a los diputados, sólo voy a hablar del tema de la comparecencia". El suyo no es el único nombre que se ha agitado en las últimas horas. También han saltado a las quinielas tanto el de la actual ministra de Indrustria, Reyes Maroto, como el de la presidenta del Senado, Pilar Llop. Los dos son perfiles muy vinculados a la Comunidad de Madrid. De hecho, durante la pasada legislatura fueron diputadas en la Asamblea regional. Sin embargo, un miembro de la Comisión Ejecutiva de los socialistas madrileños no lo ve nada claro. Principalmente, por la escasa proyección pública y el reducido margen que habría de cara a la cita con las urnas. "No hay tiempo para ello. Nos quedarían dos meses. No se puede construir un candidato o candidata en siete semanas".
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De los tres partidos de la izquierda regional, el que afirma con mayor rotundidad quién sería su cabeza de cartel si se fuera a elecciones anticipadas es Más Madrid. No hay ninguna duda. Todas las fuentes pulsadas señalan a la misma persona: Mónica García. "Estamos ahora mismo en otro momento procesal. Pero en caso de elecciones, ella debería ser la candidata", sostiene con rotundidad un parlamentario del partido. "No hay bronca en este sentido", coincide otra fuente de Más Madrid. Actualmente, el grupo en la Cámara regional funciona con una bicefalía "bien engrasada". Una de las cabezas está encarnada en Pablo Gómez Perpinyà, quien concurriera a las elecciones de 2019 en el noveno puesto de la lista. La otra es la de García, que ocupó el décimo puesto de una papeleta electoral que en su momento se encargó de liderar Íñigo Errejón y cuyos primeros puestos los ocuparon otros perfiles que terminarían formando parte de la candidatura de Más País al Congreso de los Diputados.
En este sentido, las fuentes consultadas recuerdan, además, que la parlamentaria es quien lidera en la actualidad el partido. Y que la lista que ella misma encabezó, acompañada por el propio Perpinyà y Manuela Bergerot, obtuvo un respaldo mayoritario en el proceso interno. En los últimos meses, la proyección de García ha ido en aumento. Al fin y al cabo, su perfil sanitario –compatibiliza su cargo de diputada con el de anestesista en el Hospital Doce de Octubre– le ha permitido moverse como pez en el agua en un momento extremadamente complicado, con una pandemia marcando todo el debate político. De hecho, en los últimos meses los encontronazos de la diputada con el Ejecutivo regional por su política poco restrictiva en relación con la crisis sanitaria han sido permanentes. "Ayuso ha elegido ir contra la ciencia, contra los epidemiólogos, contra las evidencias, contra Sánchez, contra los barones de su partido y, sobre todo, en contra de las necesidades de los madrileños y madrileñas", decía hace unas semanas sobre la decisión del Gobierno madrileños de ampliar el número de comensales en la hostelería.
En el caso de Podemos, prefieren no hacer conjeturas al respecto. Principalmente, porque insisten y defienden a capa y espada que no habrá elecciones tras las mociones de censura. ¿Y en el caso de que hubiera? "Entonces tendríamos que discutirlo. Yo estoy muy contento con el trabajo de Isa Serra", dice una fuente parlamentaria del grupo, quien recuerda que fue ella la que en un momento complicado se comprometió con el partido a ser la cabeza de lista de una candidatura formada a contrarreloj. "Consiguió salvar la papeleta", apunta. En la cita con las urnas, logró 7 diputados con el 5,5% de los votos.