Cataluña ante el 1-O

El PSOE confía en que el PSC mantenga la disciplina entre sus alcaldes para hacer frente al 1-O

El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, y el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez.

Ibon Uría

La dirección federal del PSOE confía en que el PSC mantenga la disciplinaentre sus alcaldes y en que ninguno se salte la ley el próximo 1 de octubre, para cuando los grupos independentistas han anunciado la convocatoria de un referéndum de independencia en Cataluña. Los socialistas gobiernan en aproximadamente 120 municipios catalanes, y en Ferraz esperan que todos los primeros ediles cumplan con la línea del partido y se abstengan de colaborar con el 1-O.

Fuentes de la dirección de Pedro Sánchez consultadas por infoLibre aseguran que el PSC tiene el tema "controlado" y subrayan que "no se espera" que ningún alcalde socialista se salte la ley. En todo caso, si algún miembro del PSC incumpliera las normas y, por ejemplo, cediera locales para la celeberación del referéndum, sería algo "muy singular", insisten en Ferraz, y en ningún caso un comportamiento generalizado.

El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, afirmó en una entrevista en El País hace diez días que su partido "no va a apoyar nada que se sitúe fuera de la ley" y que así se les ha trasladado a "alcaldes, concejales y afiliados". "Estoy convencido de que ningún cargo electo socialista va a actuar fuera de la ley", insistió el líder de los socialistas catalanes.

Esa es la línea oficial del partido y la que este jueves volvió a trasladar el teniente de alcalde de Barcelona y presidente del grupo socialista en la capital catalana, Jaume Collboni, que se mostró convencido de que tiene "todas las garantías" de que ningún edil o alcalde socialista "se va a saltar las leyes".

En Ferraz insisten en que por ahora no hay "identificado" ningún posible alcalde díscolo y prefieren no responder a la pregunta de cuáles serían las consecuencias llegado el caso. La relación entre PSOE y PSC pasa ahora por un buen momento y los colaboradores más próximos a Pedro Sánchez reiteran que confían plenamente en la dirección de los socialistas catalanes para mantener la disciplina entre todos sus alcaldes.

El caso de Barcelona

Collboni también afirmó este jueves que el Ayuntamiento de Barcelona estará "atento" y no incumplirá la ley. El socialista gobierna la ciudad junto a Ada Colau, y admitió que la alcaldesa y él mantienen "diferentes posiciones políticamente" en torno a esa consulta: el PSC está en contra y Barcelona en Comú apuesta por un referéndum legal.

Preguntado por qué ocurriría si Colau acudiera a votar el 1-O, Collboni replicó que "cada uno es libre de expresar políticamente su punto de vista, pero en la medida en la que se cumplan los márgenes que da el Estado de derecho". "En el Ayuntamiento se va a cumplir la ley", reiteró.

Fuentes del municipales socialistas recuerdan que Colau "ha dicho que cumplirá la ley y no pondrá en peligro a los funcionarios" y aseguran que "no hay motivos para desconfiar de ella". La situación del pacto entre BComú y PSC es buena, agregan, y mientras la alcaldesa no incumpla la ley no hay ningún motivos para que esa situación cambie.

Restar importancia al 1-O

Además de mantener controlados a todos sus alcaldes, la otra pata de la estrategia de los socialistas de cara al 1-O pasa por restar importancia al futuro referéndum, al que ni siquiera quieren que se denomine así. "Si no hay una convocatoria legal no va a haber un referéndum", argumentó Collboni.

En esa misma línea, la presidenta del PSOE, Cristina Narbona, afirmó este miércoles que el 1-O habrá como mucho un "simulacro" de referéndum que tendrá "valor nulo" y que creará "frustración" en la sociedad catalana, porque se tratará de "un simple recuento sin valor legal".

"No es una consulta con garantías democráticas. Hay una ausencia total de garantías mínimas", insistió Narbona en una entrevista en la Cadena SER, donde agregó que el Gobierno de Mariano Rajoy debe tomar "iniciativas políticas" para crear un clima de diálogo con Cataluña.

El Parlamento catalán pospone la tramitación de la ley del referéndum independentista

El Parlamento catalán pospone la tramitación de la ley del referéndum independentista

La presidenta del partido también reclamó a Podemos que no "legitime" una iniciativa como el 1-O. Fuentes de Ferraz señalan que el llamamiento a alejarse del posible referéndum va a continuar, pero niegan que se trate de algo "específicamente dirigido" al grupo morado, sino una cuestión "general" destinada a todos los que "promueven" o han mostrado intención de participar en el 1-O.

A la vuelta del parón político de verano, el PSOE pondrá en marcha "todos los mecanismos" para intentar abrir un espacio de debate entre las fuerzas parlamentarias sobre el encaje de Cataluña. El objetivo de los socialistas no es "convencer" a los independentistas, pero sí dirigirse a la población "catalanista", según explicó Narbona.

El pasado 14 de julio, las ejecutivas del PSOE y el PSC aprobaron en una reunión conjunta la llamada Declaración de Barcelona [ver en PDF], donde se comprometieron a "realizar una oferta política para que el choque de trenes del próximo 1 de octubre no se produzca", "implementar iniciativas" para remediar la "discriminación del Ejecutivo central a Cataluña" e iniciar los trabajos de la reforma constitucional.

Más sobre este tema
stats