Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar la experiencia de navegación, y mostrarle publicidad relacionada con sus preferencias. Si continúa navegando, entendemos que acepta su uso. Consulta nuestra Política de cookies para más información.
La película de la cineasta catalana se centra en la relación entre madre e hija, el "retorno a los orígenes" y la "necesidad a volver a estar cerca de la familia para reconciliarse con uno mismo".
La actriz y cineasta argentina presentó esta semana en Berlín su opera prima como realizadora de largometrajes, un drama de pareja marcado por el desamor y la separación, pero que huye de cualquier tragedia.
El filme es una mezcla de ficción, documental y misticismo en torno a la vida y la muerte, en el seno de una pequeña comunidad de la Galicia más profunda.
El festival cierra oficialmente sus puertas este sábado con el anuncio del palmarés por parte de un jurado que incluye al actor y director mexicano Diego Luna.
La otra cara de la esperanza, una de las inclasificables historias del finlandés, cargada de moralejas necesarias, compite por el Oso de Oro en la Berlinale.