Los hogares se escudan en la tarifa regulada del gas, que gana 1,5 millones de clientes en tres años
El encarecimiento drástico de la energía derivado de la invasión de Ucrania ha transformado el mercado gasista en España. Los hogares se han refugiado en el mercado regulado del gas para evitar sorpresas en la factura y en apenas tres años más de 1,5 millones de clientes se han pasado a la llamada tarifa de último recurso (TUR), cuyo precio se fija cada trimestre a partir de un cálculo establecido por el Gobierno que impide a las compañías inflar sus beneficios. En el mercado eléctrico hay una tarifa similar, la conocida como PVPC, pero en este caso se han perdido más de 1,6 millones de clientes en el mismo periodo.
Los últimos datos publicados este lunes por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) desvelan que a cierre del año pasado había en España 3,1 millones de puntos suscritos a una TUR, frente a los 1,52 millones que había en diciembre de 2021. Aunque haya habido este trasvase masivo, la TUR de gas sigue siendo la opción minoritaria, con el 39% de los clientes totales en España, que ascienden a 7,98 millones. El 61% restante tiene una tarifa libre.
El principal subidón de la contratación de TUR en España se produjo entre el otoño y el invierno de 2022, cuando más de un millón de clientes se movieron a esta tarifa después de que el gas natural disparase su precio a cotas nunca vistas en Europa. En 2024, dice la CNMC, el trasvase "se moderó respecto a 2023", pero continuó con un incremento de 93.500 nuevos usuarios.
La principal consecuencia es que los hogares y microempresas con la TUR han disfrutado de unos precios inferiores, especialmente entre enero de 2022 y julio de 2024, porque a sus habituales beneficios se sumó que estuvo subvencionada. La segunda consecuencia es que las grandes energéticas han perdido una enorme masa de clientes a los que venden tarifas libres porque solo hay cuatro compañías que pueden vender la TUR: Naturgy, Endesa, Iberdrola y TotalEnergies. Estas cuatro energéticas han perdido 1,7 millones de clientes libres en los últimos tres años. La mayoría se han pasado a la TUR —dentro de la misma compañía—, aunque también ha habido una pequeña fuga a la competencia, principalmente a Repsol.
Las comunidades de propietarios con una caldera común también pueden desde 2022 contratar una TUR vecinal, aunque el éxito ha sido limitado. Hay unas 6.000 comunidades que la tienen contratada, una cifra que sigue congelada desde 2023.
El comparador de precios de la CNMC continúa situando a la TUR como la tarifa más barata de gas del mercado, de lejos. Un hogar medio en España (7.500 kWh de gas al año) pagaría ahora 491,09 euros al año si está suscrito a la TUR, mientras que las ofertas libres de las compañías parten de los 625 euros para ese consumo, casi un 30% más, e incluso llegan a superar los 900 euros al año, en función de la gasista. La tarifa de último recurso ya no está subvencionada porque lo peor de la crisis ha pasado, pero sigue siendo más barata porque los parámetros para su cálculo están fijados por el Gobierno.
José Luis Sancha, profesor de Modelado de Sistemas de Energía en la Universidad Pontificia Comillas, subraya que ha habido una importante incorporación de clientes a la TUR de gas, pero que por desgracia todavía no la conoce todo el mundo. "Tiene el 40% de la cuota de mercado cuando tendría que tener el 100% porque la diferencia de precio es clarísima".
El responsable comercial de una gran compañía española lo resume así. "Nosotros solemos comercializar un buen precio, pero la TUR nos ha batido todos los meses desde que comenzó la guerra de Ucrania. Si durante más de dos años bate todas las ofertas, es que está por debajo de precio de mercado", afirma.
La PVPC lleva años en decadencia
Pese a que el precio de la luz ha sufrido las mismas subidas que el gas natural, la tarifa regulada de la luz (o PVPC) perdió más de 1,6 millones de clientes entre diciembre de 2021 y diciembre de 2024, hasta quedarse en los 8,32 millones de puntos de suministro sobre un total de 28,47 millones que hay en España con una potencia inferior a 15 kW. En este caso, el descenso no está relacionado con la crisis energética, sino que la cifra ha menguado año a año desde que fue creada en 2014. El 29% de los españoles tiene una tarifa PVPC, mientras que el 71% ha contratado una libre.
Sancha explica que, al contrario que ocurre con el gas natural, la PVPC eléctrica es más complicada de entender y genera confusión entre la población. Si en la TUR de gas el precio es fijo durante todo el trimestre (solo depende de si se consume más o menos), en la PVPC los precios de la electricidad varían cada hora en función de la subasta diaria, y hay que prestar además atención a las horas punta y valle de los peajes y la potencia.
"En la PVPC hay muchas variables y eso genera aversión entre los consumidores, y además hay algunas ofertas de comercializadoras que se acercan mucho al precio regulado, por lo que no es tan atractiva como la TUR de gas. Evidentemente, también entra en juego la publicidad. Ninguna compañía te va a llamar para ofrecerte una tarifa regulada de la luz, pero sí te fríen cada día con llamadas para que te pases a sus tarifas libres", señala Sancha.
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Según el comparador de la CNMC, en este momento la tarifa regulada de la luz también es más barata que todas las alternativas del mercado libre. En el último mes, para un hogar medio, marca un precio de 58,58 €/MWh, mientras que las ofertas libres parten de los 62 €/MWh, e incluso marcan 80 y 90 €/MWh, en función de la compañía.
El profesional que también ha participado en este artículo, y que prefiere omitir su nombre, también destaca que en la elaboración de la PVPC el margen de beneficio de las comercializadoras está topado para que el producto sea más atractivo que las alternativas libres. "Si el margen comercial en la PVPC es de 1 o 2 €/MWh, el de un producto similar para hogares en el mercado libre supera las dos cifras. La diferencia es muy importante", revela.
También recuerda que una parte de los clientes españoles que han abandonado en los últimos años la PVPC lo han hecho porque son empresas. Históricamente, cualquier consumidor con menos de 10 kW de potencia contratada y una tensión inferior a 1 kV podía contratar una PVPC, pero el Gobierno incluyó en 2024 la condición de que las empresas solo podrían acogerse si son micro, es decir, menos de 10 trabajadores. El sector estimó entonces que 40.000 compañías saldrían de la tarifa regulada de la luz.
