Iberdrola invierte 17.300 millones y eleva su beneficio en el primer semestre hasta los 3.562 millones de euros

Iberdrola ha presentado este martes sus resultados semestrales confirmando lo que ya apuntaban las previsiones: la eléctrica vasca atraviesa un momento de expansión histórica. Con una inversión sin precedentes de 17.300 millones de euros en los últimos doce meses, el grupo ha disparado su beneficio neto un 20%, hasta alcanzar los 3.562 millones de euros en el primer semestre de 2025.

Detrás de estas cifras se esconde una transformación estratégica centrada en las redes eléctricas y una expansión internacional que consolida a Iberdrola como la primera utility de Europa y una de las dos más grandes del mundo. Sus activos superan ya los 157.000 millones de euros, mientras que su capitalización bursátil ronda los 100.000 millones.

La era de las redes

Durante la primera mitad del año, Iberdrola ha invertido 5.662 millones de euros, un 7% más que en el mismo periodo de 2024. Más de la mitad ha ido dirigida a redes eléctricas: 3.082 millones, lo que supone un aumento del 14% interanual. El foco geográfico está claro: el 60% de las inversiones han ido a Estados Unidos y Reino Unido, donde la empresa aprovecha marcos regulatorios favorables y estabilidad institucional.

La distribución de electricidad ha superado los 124.200 GWh, con un crecimiento del 4,8% global, y destaca el salto de más del 30% en Reino Unido, tras la integración de Electricity North West (ENW). Esta estrategia ha permitido que los activos regulados del grupo se hayan disparado un 70% en cinco años, alcanzando ya los 50.000 millones de euros.

Renovables selectivas, pero ambiciosas

Aunque con menor peso, las renovables siguen siendo una palanca clave: 2.155 millones de euros invertidos en el semestre, de los cuales 850 millones se han destinado a eólica marina, impulsando proyectos clave como Baltic Eagle (Alemania), Vineyard Wind (EE.UU.) o East Anglia (Reino Unido). En los últimos 12 meses, Iberdrola ha instalado más de 2.000 MW renovables, elevando su capacidad instalada a más de 45.000 MW a nivel mundial.

La producción total renovable también ha crecido: 66.300 GWh, un 2,3% más que en el mismo periodo del año pasado, y la compañía prevé añadir otros 1.400 MW antes de final de año.

Crece el EBITDA, cae España

El beneficio bruto de explotación (EBITDA) se ha situado en 8.287 millones de euros, un 5% más que el año anterior, pese a la caída del 12% del negocio en España. El tirón internacional compensa la debilidad peninsular. Especial mención merece el negocio de redes, cuyo EBITDA sube un 31% hasta los 4.271 millones, beneficiado por la mayor base de activos y la integración de ENW.

En cambio, la división de generación y clientes ha sufrido un retroceso del 13% por la bajada de precios y el aumento de costes del sistema eléctrico en la Península Ibérica.

Deuda a la baja, dividendo al alza

Uno de los datos más destacados es la reducción de la deuda neta en 3.000 millones de euros, situándose en torno a los 52.000 millones. Esta mejora se explica por la política de rotación de activos, alianzas estratégicas y un flujo de caja récord, que ha crecido un 15% hasta los 6.800 millones.

Fruto de esta solidez, Iberdrola eleva la remuneración al accionista hasta los 0,645 euros por acción, y abonará el 24 de julio un dividendo complementario de 0,409 euros por título.

Ampliación de capital para afrontar un nuevo ciclo inversor

Como colofón a este semestre histórico, la compañía ha anunciado una ampliación de capital acelerada de 5.000 millones de euros, destinada a financiar nuevas inversiones en redes eléctricas en Estados Unidos y Reino Unido. La razón: marcos regulatorios recién aprobados en Nueva York, Maine y Reino Unido que abren la puerta a una oportunidad de inversión global de 55.000 millones de euros entre 2026 y 2031, un 75% más que en el periodo anterior.

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Iberdrola prevé que su base de activos en redes supere los 90.000 millones en 2031, y asegura que no serán necesarias más ampliaciones de capital al menos hasta 2030. El grupo confirma así su intención de crecer en países con rating A y regulaciones estables.

Previsiones al alza y cita en Londres

A la luz de estos resultados, Iberdrola mejora sus previsiones: espera un crecimiento de dos dígitos en el beneficio neto ajustado de 2025 respecto a 2024, impulsado por la expansión de redes reguladas en EE.UU., Reino Unido y Brasil.

Además, ha firmado contratos de compraventa de energía (PPAs) por 4,7 TWh en el último año y cuenta con reservas hidroeléctricas en máximos históricos (9 TWh). El próximo gran hito será la presentación de su Plan Estratégico, que tendrá lugar el 24 de septiembre en Londres, donde la compañía celebrará su Día del Inversor.