Paco Marti

Juan Carlos Peinado, magistrado titular del juzgado 41 de Plaza de Castilla y con vínculos estrechos con el PP, decidió en mala hora para el país abrir diligencias de investigación contra Begoña Gómez, esposa del aún presidente del Gobierno Pedro Sánchez. La denuncia, admitida a trámite este martes 23 del año de nuestro Señor, la presentó el pseudosindicato o lo que narices sea Manos Limpias, a la par que se lava las manos y apunta a los medios si la denuncia de sus noticias resultan ser falsas.

Un magistrado polémico que se peina con la raya a la derecha. Unos prendas que se autodenominan Manos Limpias y que son conocidos en plaza y una falsa denuncia sin recorrido jurídico alguno. No va más.

La fiscalía, visto lo visto y oliéndose la mala praxis, ha recurrido la admisión a trámite de la denuncia presentada por Manos Limpias contra Begoña Gómez y solicita que se archive la causa o lo que viene siendo el mal chiste.

En cualquier caso, el daño ya está hecho y sus autores, prensa y medios conocidos también en plaza, se irán de rositas sin recoger su mierda con una bolsita y depositarla en la basura.

Un magistrado polémico que se peina con la raya a la derecha. Unos prendas que se autodenominan Manos Limpias y que son conocidos en plaza y una falsa denuncia sin recorrido jurídico alguno. No va más.

Pedro Sánchez y sus socios en el ejecutivo son los que han creado un escudo social en este país, digno. Los resultados económicos están ahí y son irrefutables. Lástima que este país, bipolar, rancio y fascista con una judicatura tendenciosa y obsoleta no sepa apreciarlo.

Sánchez, probablemente, dimitirá el lunes 29 del año de nuestro Señor, y la derecha volverá a ganar las elecciones generales que se convoquen en breve. Esta es mi hipótesis. La cuestión es: ¿Cómo es posible que la mentira repetida hasta la saciedad obre el milagro de convertirse en verdad? No va más.

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Pako Martí es socio de infoLibre.

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