Madrid, Vitoria y Labastida son ya focos de "transmisión alta" donde se recomienda el teletrabajo y cierran los colegios

El avance aparentemente imparable del coronavirus obliga a las autoridades a mover ficha. A todas, tanto nacionales como autonómicas. Según explicó el ministro de Sanidad, Salvador Illa, a última hora de este lunes, la multiplicación de los casos de contagiados en nuestro país —que según el último balance ofrecido por el Ministerio de Sanidad alcanza la cifra de 1.204 personas y 28 fallecidos— ha conseguido que, después de semanas, cambiemos de escenario. Lo que hasta ahora era una fase "de contención" se convierte ahora en un escenario "de contención reforzada", según explicó el propio Illa en la rueda de prensa extraordinaria. ¿Y qué significa eso? Pues que hay zonas consideradas "de transmisión alta". Concretamente, tres: la Comunidad de Madrid y las ciudades de Vitoria y Labastida (Álava). Por eso todas ellas tendrán que adoptar la misma medida, según acordaron en la reunión interministerial extraordinaria celebrada este lunes: se suspende la actividad educativa en guarderías, colegios y universidades durante las próximas dos semanas. Y las empresas de esas zonas, por su parte, tendrán que fomentar el teletrabajo. Siempre que sea posible, según matizó el propio ministro. 

Los días pasan al mismo tiempo que los casos de coronavirus se siguen multiplicando. Este lunes por la tarde el número de contagiados ya alcanzaba las 1.204 personas, según los últimos datos de Sanidad. La cifra, aunque elevada, todavía se sitúa lejos de las que se manejan en otros países europeos como Italia, pero las instituciones han comenzado ya a mover sus fichas más rápido para evitar que la expansión de las infecciones continúe el ritmo actual. Sobre todo en los dos focos que, según dijo horas antes de conocerse las nuevas medidas el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio, Fernando Simón, más preocupan: la Comunidad de Madrid (donde en tan sólo 24 horas los casos se duplicaron hasta alcanzar a 578 personas) y Álava (donde hay 122 infectados). Por eso, tanto el Gobierno autonómico madrileño como el vasco adoptaron la misma decisión: en Madrid la actividad educativa se paralizará este miércoles hasta el próximo día 23 de marzo, el mismo día que se retomarán las clases en Vitoria y Labastida, que cerrarán los centros educativos, por su parte, desde este martes. 

Las decisiones se produjeron en cascada. Primero se conocía la de Labastida, que anunciaba que cerraba sus dos escuelas. Horas más tarde, el Gobierno vasco anunciaba que Vitoria paralizaba su actividad educativa. Y ya a última hora de la tarde, tras la reunión de su Consejo de Gobierno, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se sumaba a esas decisiones. Según aseguró en su comparencia, la adopción de las restricciones anunciadas "no ha sido fácil", pero "la salud está por encima de todo". Por eso, y tras agradecer el apoyo a todos los grupos parlamentarios de la Asamblea de Madrid, pasó a relatar las medidas adoptadas. Y es que además de la suspensión de la actividad educativa, y en línea con lo recomendado por el Ministerio de Sanidad, el Ejecutivo madrileño decidió aconsejar que las empresas faciliten el teletrabajo a sus empleados. 

En estos momentos hay dos grandes epicentros de contagio: el centro de mayores de Valdemoro (en Madrid) y el entierro que tuvo lugar en Vitoria hace dos semanas, al que acudieron varios vecinos de la localidad riojana de Haro, un municipio fantasma desde este domingo, cuando se decretó la cuarentena para los vecinos, que deben permanecer en sus viviendas para "contener la situación epidemiológica", tal y como dijo la delegada del Gobierno en La Rioja, María Marrodán. "Más allá de las cifras, debemos ser conscientes de que nos enfrentamos al mayor reto sanitario de salud pública de la historia de La Rioja", aseguró la consejera de Salud, Sara Alba. 

Cuidadados domiciliarios y evitar viajes "innecesarios"

Las medidas tomadas en los tres territorios coinciden porque han sido puestas en marcha con la coordinación del Ministerio de Sanidad, que anunciará este martes nuevas medidas relacionadas con la nueva fase de "contención reforzada". Por ahora, y más allá del cierre de los centros educativos a todos los niveles y de la recomendación del teletrabajo en las zonas consideradas de riesgo, Illa ha animado a todo el territorio español a tomar medidas destinadas a paliar la situación. Por ejemplo, tal y como describió en la rueda de prensa, aconsejó a los ciudadanos a que fomenten el cuidado en su domicilio de los mayores, a que eviten los viajes que no sean necesarios o a que, en caso de tener algún síntoma, permanezcan en casa. Es mejor esa opción que acudir al centro de salud o al de trabajo. 

Por otro lado, también recomendó a las personas mayores que padecen enfermedades crónicas o pluripatológicas que limiten las salidas de su hogar o residencia. Y que eviten, en todo caso, lugares concurridos en los que no es posible mantener la distancia de seguridad interpersonal de al menos un metro. 

En este mismo contexto, y en la línea de aumento de las restricciones, se decretó que el partido de fútbol entre el Sevilla CF y Roma, que se tiene que celebrar en la ciudad andaluza, sea a puerta cerrada, tal y como ocurrió con el Valencia CF frente al Atalanta de Bérgamo y otros eventos deportivos similares. 

El Gobierno anuncia "un plan de choque" y la oposición pide "coordinación"

Hasta este lunes, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha dejado todo el protagonismo a Simón y a su ministro de Sanidad, Salvador Illa. Sin embargo, y con motivo de su intervención en la Asamblea General de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), en Madrid, el líder del Ejecutivo habló por primera vez del avance del coronavirus y anunció, además, medidas a nivel global. No dio mucha información, pero sí adelantó que, en "unos días", se conocerá un "plan de choque" coordinado con los agentes sociales para hacer frente al impacto del coronavirus sobre la economía"plan de choque". Según especificó, se hará público tan pronto se precise el diagnóstico sobre el impacto del virus en la economía real. Y la tarea de averiguarlo la comenzará el Gobierno este mismo martes. 

Así lo aseguró la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, que afirmó que el Consejo de Ministros de este martes valorará un informe en el que trabajan los ministerios de Economía y Hacienda para, precisamente, minimizar ese impacto. "Es una situación que estamos manejando yo creo que francamente bien, no solamente por nuestras autoridades sanitarias sino porque tenemos una población que está respondiendo de manera muy madura, eso nos hace estar trabajando en otras direcciones posibles. Las ministras están trabajando, la vicepresidenta Calviño también está hablando con los agentes económicos y sociales, porque somos un Gobierno responsable, ejecutivo y rápido en cualquier situación que corresponda", dijo. 

Sin embargo, el presidente del PP y líder de la oposición, Pablo Casado, ofreció también este lunes una rueda de prensa para criticar esa gestión de la que presumía Calvo. Según dijo, el Ejecutivo "empieza a ir por detrás de los acontecimientos" en la gestión de la crisis, por lo que pidió "más coordinación entre los partidos y miembros del Gobierno". Y también solicitó lo que el Gobierno anunció: la adopción de un "plan de choque" con diez puntos destinados a paliar los efectos del brote sobre la situación económica.

Para el líder de los conservadores, ese objetivo podría conseguirse reduciendo "a la mitad el Impuesto de Sociedades a los sectores afectados" y suprimiendo este impuesto "temporalmente en la empresa en zona de cuarentena". Además, pidió "aplazar el cobro del IVA a las empresas afectadas y suprimir las subidas fiscales afectadas". 

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Casado anunció, además, que el PP pedirá la comparecencia de Sánchez en el Congreso de los Diputados para explicar la crisis. 

Según informó Moncloa a última hora de este lunes, Sánchez y Casado ya mantuvieron una conversación telefónica a lo largo del día, cuando también contactó con el líder de Vox, Santiago Abascal, con la de Ciudadanos, Inés Arrimadas, y con el resto de portavoces. En las próximas horas, aseguraron las fuentes del Gobierno, el presidente del Gobierno también hablará con los presidentes de las comunidades autónomas "para compartir con ellos un mensaje de unidad, serenidad y rigor frente a este desafío de salud pública".

Además, Moncloa también aseguró que Sánchez se puso en contacto con algunos de sus socios europeos "para abordar de manera conjunta la coordinación de estrategias frente al coronavirus". Así, este martes a las 17.00 horas se celebrará un Consejo Europeo monográfico para coordinar una respuesta europea frente al avance del coronavirus.