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Pizzero por un día

El programa El jefe infiltrado, en el que directivos de grandes empresas se hacen pasar por trabajadores de las mismas, se estrenó en la noche del jueves en La Sexta logrando una cuota de pantalla récord –16,5% de share– en la historia de la cadena. Más de tres millones de espectadores vieron como un jefe de Domino's Pizza agasajaba con un curso de inglés a una encargada de tienda –aunque buena falta parecía hacerle al directivo en cuestión también dicha formación– y cómo reprochaba a dos repartidores que circularan en moto a una velocidad excesiva.

A pesar de que la idea es mostrar la cara humana de los jefes de las empresas y ver por dentro cómo funciona el negocio, el resultado no ha sido el esperado en el caso de Domino's Pizza: muchos tuiteros anunciaron su boicot a la firma al conocerse las condiciones –y los sueldos míseros, de 200 y 300 euros al mes– en las que trabaja el personal. Incluso alguno que decía ser uno de los protagonistas del programa (@nasiopamatar1) se atrevió a tuitear durante la emisión:

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