Elecciones 24-M

Aznar carga contra “populistas” y “aprendices de brujo” e ignora a Rajoy

Aznar carga contra “populistas”, “aprendices de brujo” y “oportunistas” e ignora a Rajoy

Tras una campaña de las elecciones europeas del pasado año en la que no hubo hueco para él por falta de previsión de la dirección nacional del Partido Popular –o eso al menos cuentan desde su entorno–, José María Aznar arrancó este martes en Zaragoza su periplo mitinero de cara a los comicios del 24 de mayo. El expresidente del Gobierno se sabe guardián de las esencias de la formación que lideró antes de ceder el testigo a Mariano Rajoy. De "los principios y valores" que tan en boca están de los dirigentes y militantes más conservadores. También sabe que un partido, Ciudadanos, les pisa los talones y atrae a muchos de los que en su día apostaron por su formación. Y a ello, a tirar de orgullo PP y a invitar a los descontentos a que vuelvan, se aplicó a fondo en su discurso de apoyo a la candidatura de Luisa Fernanda RudiLuisa Fernanda Rudi. Menciones a Rajoy, ni rastro.

"Estoy aquí para pedir el voto para el Partido Popular, que es mi partido, y que es el proyecto político, con diferencia, mejor para Aragón, y con Aragón, el mejor proyecto para España. Con diferencia, el mejor", dijo casi al arrancar. El auditorio rompió en aplausos. Aznar acudía al acto en calidad de presidente de honor del PP pero en los últimos años han sido tantos los roces con Rajoy y su equipo que a los militantes les gustó escuchar de su boca que ese es su partido. Que es donde cree que debe estar. "Estoy en lo que creo". "Estoy aquí porque este es mi sitio".

Acto seguido, cuando no llevaba ni un minuto hablando, ya salieron de forma velada los escándalos de corrupción que en los últimos años han afectado al partido que presidió antes de decidir que Mariano Rajoy iba a ser su sucesor. "Permitidme también que os diga, desde el principio, que estoy aquí porque puedo estar, y hablaros a la cara, y miraros a los ojos y recibir la misma mirada honrada, la mirada intachable de la inmensa mayoría de los militantes de este partido que no tienen nada de qué avergonzarse y sí mucho que reivindicar", dijo. Nueva dosis de orgullo PP.

Cuando todos los partidos que disputan el poder al PP se presentan como el partido del cambio, Aznar les negó la mayor. "Este es el verdadero partido del cambio, porque el cambio consiste en dejar un país mejor que el que encontraste". Un cambio que contrapuso a la "mentira populista", en alusión a Podemos, "los aprendices de brujo", los "separatistas" o los "oportunistas".

Movilizar al descontento

"Es posible que algunos que hace no mucho tiempo se sentaban aquí cerca, en estas primeras filas, ahora se sientan más lejos, allá arriba porque no se sienten tan cómodos. Y es posible que otros que hace algún tiempo estarían aquí, ahora nos miran entrar desde la calle. Yo respeto los motivos de todos, sus preocupaciones y sus quejas, pero a los que se han ido más lejos, les pido que se acerquen. A los que nos miran desde la calle, les pido que entren. A los que sienten desafección, les pido confianza", señaló en una clara alusión a aquellso votantes que llevan dando la espalda al PP desde las elecciones europeas. 

Rajoy, recibido en Oviedo con gritos de “¡Mariano, no metas más la mano!”

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Aznar se mostró convencido de que para muchos de los que se han alejado de su formación, el PP sigue siendo su partido. "A ellos quisiera decirles que tal vez no están pero queremos que sigan con nosotros. Porque ellos son necesarios para cambiar aquello que debemos cambiar, para mejorar lo que debemos mejorar, para reconocer en lo que nos hemos equivocado sin renunciar a todo lo mucho que hemos hecho bien", sostuvo. No obstante, les lanzó una advertencia: "Porque pueden creer que votando a otros en realidad están votando al PP. Si creen que votando a otros votan al PP, simplemente que lo piensen". Esta frase resume uno de los principales temores del PP, que su electorado tradicional, enfadado por algunas de las políticas del Gobierno apueste por Ciudadanos pensando en acabará pactando con los conservadores.

"¿Qué garantías tienen de que ese voto no vaya a parar a otras manos? ¿Qué seguridad tienen de que ese voto no contribuye a esos arreglos que han sido catastróficos y que solo unen los deseo de aislar al PP? Puede parecer evidente pero lo voy a decir: si quieren que gobierne Luisa y no otra, tiene que votar a Luisa, y no a otra. Los ciudadanos deben saber que estas elecciones señalan un nuevo compromiso para nuevos desafíos y para nuevas ambiciones", 

Tras la capital aragonesa llegarán Logroño, Ávila, Madrid y Toledo

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