El futuro de la izquierda

Díaz y García ensayan el primer acercamiento de sus espacios tras la ruptura de Iglesias y Errejón

Yolanda Díaz y Mónica García, en imágenes de archivo.

Para Yolanda Díaz y Mónica García no ha sido sencillo el viaje hasta València. La presencia de ambas este sábado sobre las tablas del teatro Olympia tiene implicaciones políticas de peso. Se trata del primer acercamiento de sus respectivos espacios desde la traumática ruptura que protagonizaron en primera persona Pablo Iglesias e Íñigo Errejón, un movimiento que no todo el mundo en sus entornos ve con buenos ojos. Tanto la líder de Unidas Podemos como la de Más Madrid han hecho frente a críticas internas y a un intenso debate en el seno de los partidos que representan. La apertura a un proyecto político amplio es, además, la hoja de ruta marcada por Yolanda Díaz para ser candidata a la presidencia del Gobierno. Algo que encaja a la perfección con el espíritu del acto que va a reunir a cinco mujeres políticas en la capital valenciana.

Todo empezó con una llamada de Mónica Oltra, vicepresidenta de la Generalitat. La también líder de Compromís trasladó primero la idea del encuentro a Yolanda Díaz, con la que mantiene una buena relación personal y política que se ha ido estrechando aún más desde que esta última es vicepresidenta. Díaz dijo inmediatamente que sí. La respuesta de Mónica García no fue tan rápida. La líder de la oposición en la Asamblea de Madrid le agradeció a Oltra la invitación y recibió la propuesta como una buena idea, aunque pidió algo de tiempo antes de confirmar su asistencia para consultarlo con la dirección de su grupo y tratarlo personalmente con Íñigo Errejón, consciente de que el movimiento podía resultar delicado.

Recelos en Podemos y Más País

De hecho, los recelos no tardaron en aparecer a ambos lados. En Podemos sentó mal enterarse por los medios de comunicación de una cita a la que había sido invitada Yolanda Díaz pero no otras líderes moradas como Ione Belarra o Irene Montero. Aunque el malestar no surgió solo por las formas, también por el fondo. En la cúpula del partido sigue generando todo tipo de suspicacias cualquier movimiento que tenga que ver directa o indirectamente con Íñigo Errejón.

Porque lo teorizado tras la salida de Pablo Iglesias era que, entre otras cosas, el liderazgo de Yolanda Díaz sirviera para dar carpetazo definitivo al espacio político de Errejón. El acercamiento ahora entre la política gallega y la portavoz de Más Madrid, lejos de afianzar esa tesis, refuerza la senda marcada por la vicepresidenta segunda para organizar un proyecto “más amplio, que trascienda a las siglas”, y en el que, a priori, no está vetado nadie. Oficialmente, desde Unidas Podemos trasladan “preocupación cero” por esa estrategia política y defienden que “quien tiene el problema es Errejón”. En público, el propio Pablo Iglesias ha deseado que Yolanda Díaz sea capaz de llegar “a algún tipo de acuerdo” con su ex número 2 y ha llegado a asegurar que, si alguien puede conseguirlo, es ella. La realidad es que en el núcleo duro de Podemos ya hace tiempo que se recela del rumbo político fijado por Díaz.

En Más País y Más Madrid el debate también fue acalorado. Los buenos resultados electorales obtenidos en la Comunidad de Madrid terminaron de consolidar la figura política de Mónica García como referencia de un espacio creado por Íñigo Errejón tras su salida de Podemos. Consciente de las dificultades que le genera una competencia electoral con Yolanda Díaz y sin ninguna perspectiva de reconciliación con la mayoría de dirigentes morados, Errejón se mostró escéptico en un primer momento sobre la conveniencia de que participara en ese encuentro su compañera de filas. Fuentes al tanto de ese debate reconocen que la discusión se prolongó unos días y que, por momentos, fue adquiriendo distintos grados de tensión. “Para nosotros es muy importante romper con esa inercia patológica de enfrentamiento con Podemos. Yolanda es un valor político obvio, Mónica también lo es. Y hay un reconocimiento mutuo de ello”, apuntan esas mismas fuentes. Finalmente, tras mucha discusión, Mónica García sorteó las resistencias y confirmó también su asistencia. Desde Más País, la postura oficial es el respaldo "a un acto de mujeres en el que nos sentimos representados con la presencia de Mónica".

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Nueva etapa

En los entornos más próximos a Yolanda Díaz y a Mónica García coinciden en destacar la importancia de que sean figuras “que no vengan dañadas en primera persona de la etapa anterior de enfrentamientos” quienes pongan las bases de un nuevo ciclo que pretende ser de entendimiento. “Les ha tocado a ellas y es una gran oportunidad. Es inimaginable que Irene Montero e Íñigo Errejón se sienten y lleguen a ningún acuerdo porque esos lazos están rotos. Pero Yolanda y Mónica no tienen esa mochila”, argumenta una de las personas que ha trabajado para concretar el acto de este sábado.

De momento, Yolanda Díaz y Mónica García aún no han mantenido ninguna reunión de trabajo y desde sus gabinetes niegan la existencia de cualquier plan detallado que tenga que ver con el próximo ciclo electoral. Todos coinciden en que es pronto para entrar a concreciones. Los equipos de ambas, sin embargo, mantienen un contacto fluido y discreto. Las líneas de comunicación están abiertas y las intenciones de una y otra, claras. Y la primera parada es València.

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