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Caso Nevenka

Rubalcaba sobre Ponferrada: “Nos equivocamos, rectificamos y punto”

El tremendo lío en el que se ha embarcado el PSOE para lograr arrebatar el PP la alcaldía de Ponferrada (León), y que ha abierto otra nueva crisis interna, persiguió a Alfredo Pérez Rubalcaba hoy hasta Valencia. Allí el partido tenía programado el segundo diálogo temático para regenerar su proyecto político –esta vez, sobre economía–, pero la gravedad del caso, nada menos que una moción de censura pactada con un condenado por acoso sexual, obligó al secretario general a pronunciarse. 

"Ayer lo dije en un comunicado y hoy se lo digo a ustedes. Hemos cometido un error, y cuando se comete un error en política lo que hay que hacer es rectificar y es lo que vamos a hacer, rectificar", aseguró Rubalcaba ante los periodistas, informa Europa Press. El líder aludía así a la nota emitida por su partido ayer viernes poco antes de las ocho de la tarde. Esto es, apenas seis horas después de que el socialista Samuel Folgueral se convirtiese en nuevo regidor de la ciudad leonesa gracias al apoyo de Ismael Álvarez, condenado por acoso sexual a la edil Nevenka Fernández en 2002. Rubalcaba, a la vista de la enorme polémica, ordenó "rectificar", que dimitiera Folgueral hasta que Álvarez formalizara su abandono de la política y su baja como concejal. Pero anoche Folgueral ya sugirió que no iba a dimitir porque el PSOE gobernará hasta final de legislatura con el sustituto de Álvarez. 

Este sábado Rubalcaba insistió en que el nuevo regidor "renunciará", y si no, "tiempo al tiempo". El "orden" de las dimisiones tenía que haber sido otro, alegó. O sea, que primero se marchara Álvarez antes del pleno y después el alcalde. Lo que no especificó es qué pasará si Folgueral se sigue resistiendo. La contestación a esa pregunta la dio, desde Valladolid, el líder del PSOE de Castilla y León. Julio Villarrubia apuntó que Folgueral es un candidado "adecuado" para asumir el Gobierno de Ponferrada, pero avisó de que si se niega a irse, "se pondrá en marcha el correspondiente régimen disciplinario". 

La prensa inquirió a Rubalcaba en Valencia si en política todo vale a cambio de gobernar. "Al revés", respondió. "Es un ejemplo de que cuando uno se equivoca en política, lo que uno tiene que hacer es rectificar. Nos hemos equivocado, rectificamos y punto", zanjó. 

Y dado que anoche a última hora su número tres, Óscar López, sostuvo en la Ser y en Onda Cero que Rubalcaba y la ejecutiva federal del PSOE no sabían nada de cómo iba a desarrollarse la moción de censura en Ponferrada, se le inquirió al secretario general cómo era posible que no estuviera al tanto. "Cada uno en el partido tiene sus obligaciones –replicó–. Había una moción en Ponferrada y me dijeron que iba a entrar el alcalde socialista y que iba a haber una dimisión del alcalde actual y del concejal acusado. Eso sí lo sabía, pero no sabía nada más". Sin embargo, la alianza de Folgueral con el partido de Álvarez, Independientes Agrupados de Ponferrada (IAP) se anunció el 25 de febrero y desde entonces la noticia dio vueltas en los medios. 

Igualdad "por encima de cualquier interés orgánico"

Mientras, en la ciudad berciana, se oficializaba este sábado la salida de Álvarez del Consistorio. El edil presentó su dimisión en el registro del Ayuntamiento a las 10.30 horas –hora y media antes de lo previsto–, tras lo que advirtió de presuntas irregularidades "a dedo" y "sin guardar la normativa" hechas por el Gobierno saliente, el de Carlos López Riesco (PP). Álvarez, regidor de la localidad cuando estalló el caso Nevenka, señaló que su salida era "necesaria" para dar un "impulso" a Ponferrada. 

Este sábado también se han ido produciendo más reacciones. El más duro, José Antonio Griñán, presidente de la Junta de Andalucía y del PSOE. La igualdad, subrayó desde Sevilla, "ha de estar por encima de cualquier interés orgánico o partidario", ya que es un derecho "fundamental, no disponible ni negociable". Griñán, además, entregaba uno de los Premios Clara Campoamor 2013 por la Igualdad al expresidente José Luis Rodríguez Zapatero. Trinidad Jiménez, secretaria federal de Política Social y una de las mujeres de confianza de Rubalcaba, reconoció la equivocación pero añadió que su partido ha "rectificado" de forma "honesta". Y el exministro Ramón Jáuregui tachó de "injustificable" lo ocurrido, porque "personas así no pueden acompañar una moción de censura", informa EP. 

Esteban González Pons se encargó de encabezar la crítica desde el PP. Para el vicesecretario general de Estudios y Programas, lo acaecido en Ponferrada, "presentar una moción de censura con el apoyo de un maltratador en el Día de la Mujer", es un ejemplo "de no enterarse de lo que pasa en la calle". 

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