Sanidad

Los seguros privados de salud no notan la crisis

Consulta odontológica en una clínica de DKV Seguros.

A pesar de la crisis y las consecuencias que el paro y las subidas de impuestos tienen sobre la economía doméstica, las aseguradoras todavía ven crecer sus ingresos por las pólizas de salud. Los seguros sanitarios han experimentado un crecimiento en primas del 8% desde 2010, según datos de ICEA (Investigación Cooperativa entre Entidades Aseguradoras), la principal fuente del sector. Además en España hay ya 10.452.865 personas que cuentan con alguna de estas pólizas, 130.299 más que en el inicio de la crisis, en 2008.

No parece una mera coincidencia que el médico haya sido el único ramo del sector de los seguros que ha crecido durante todos los años de la crisis. Aunque, cierto es, no al nivel que lo hacía antes de la recesión. En esta tendencia, señalan distintas fuentes ligadas al sector consultadas por infoLibre, ha influido la situación de asfixia en la que se encuentra el sector público, con presupuestos cada vez más mermados y, en consecuencia, atascos en las listas de espera, cierre de plantas y quirófanos y recortes de personal. Y también el empuje de las pólizas de colectivas ante el aumento de las empresas que decidían ofrecer una cobertura privada a sus trabajadores, libres de cotización hasta el próximo 31 de mayo.

"Aunque estamos en tiempos de crisis, la sanidad es una de las cosas más valoradas por las personas, por lo que la realidad existente hace que muchas opten por tener un seguro privado que les resuelva los problemas sanitarios con mayor rapidez, por lo que indirectamente cualquier déficit del sistema  público, bien debido a problemas presupuestarios o de gestión favorece el aumento de primas de asegurados", señala el doctor Manuel Carmona Calderón, representante de la Sección de Medicina Privada por Cuenta Propia Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos. A su juicio, el seguro el seguro privado se ha extendido mucho entre la población y ha dejado de ser un producto para elites. "La competencia entre compañías aseguradoras ha bajado las primas de forma muy significativa, haciéndolo un producto asequible", añade. 

El doctor Manuel Martín, presidente de la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP) cree que en el mantenimiento del negocio de las pólizas privadas han tenido mucho que ver los recortes y los mensajes que, a su juicio, se mandan desde la Administración y el sector privado con la idea de que la sanidad pública está "de retirada". "El fantasma de los copagos en la asistencia, el descenso en las prestaciones y las listas de espera se unen a una campaña constante de apoyo a las aseguradoras, de donde proceden algunos de los cargos intermedios del actual Ministerio de Educación", asegura. 

Existen tres modalidades de seguros de salud: el de asistencia sanitaria, en el que la compañía aporta un cuadro médico entre los que el asegurado puede elegir; el de reembolso de gastos, por el que el cliente decide libremente el médico al que desea acudir y pasa después la factura a la compañía de seguros, que llega a cubrir entre el 80% y el 100% de los costes; y el de subsidios e indemnizaciones, que procura una asignación diaria en el caso de que una enfermedad obligue al asegurado a estar de baja laboral. En algunas autonomías estas pólizas tienen beneficios fiscales. Es el caso de Cantabria, Baleares y Aragón. 

"Alto nivel de reconocimiento"

En la órbita privada Manuel Vilches, director general de IDIS, organismo integrado por las principales empresas de la sanidad privada, cree que la buena salud de la que gozan los seguros médicos a pesar del tiempo de crisis está relacionada con el "alto nivel de reconocimiento" de sus usuarios. "Cuando una persona pasa apuros económicos tiende a quitarse lo más superfluo y la prueba es que las pólizas se han mantenido, aunque es cierto que no han crecido al mismo tiempo", señala. No obstante, Vilches admite que la realidad del sector público ha contribuido a que no se pierdan beneficiarios "por la situación de las listas de espera o la falta de renovación tecnológica". 

"En el sector existen opiniones encontradas en cuanto a la influencia que tiene el desgaste de la sanidad pública en el negocio de las aseguradoras. No es fácil analizarlo. Hay quien piensa que ayuda a mejorar los ingresos por primas porque, el que se la puede pagar mantiene su póliza como sea o intenta contratar una aprovechando además la renovación de la oferta comercial con precios cada vez más ajustados. Sin embargo, existe también otra visión. La de los que creen que el declive de la sanidad pública genera que hagan uso de la pública asegurados con doble cobertura, en muchos casos con pólizas colectivas, que antes no usaban nuestros servicios a pesar de que ellos o sus empresas estaban pagando por ellos. Eso reduce los márgenes de beneficio", señala un directivo de una de las aseguradoras líderes. 

Desde el lobby del sector privado, Manuel Vilches cree que todavía no hay datos suficientes como para constatar esta evidencia. "Nuestras encuestas nos siguen diciendo que el aumento en la frecuentación de la sanidad privada está ligado con la calidad. El 84% de los funcionarios, que además están obligados a elegir entre un sistema u otro, optan por la privada porque, por lo general, están muy satisfechos con el servicio". 

Desde Sanitas, que mantiene una posición de liderazgo por detrás de SegurCaixa Adeslas su directora ejecutiva de canales y producto, Ine Snater, señala que aunque el seguro de salud ha resistido bien a la crisis y sigue siendo uno de los pocos negocios del sector asegurador que "continúa creciendo", sí ha experimentado una desaceleración causada por la caída del consumo y crece a un ritmo inferior: los ingresos por primas de seguro de salud aumentaron un 1,63% en 2013 frente a 3,1% en 2012, según datos de ICEA. En los próximos años, dicen fuentes del sector, la previsión es de crecimiento. "Sin duda, hay que estar alerta a la evolución en los próximos meses, pero prevemos que la incipiente recuperación económica que vive el país afecte positivamente a este ramo", aseveran desde Sanitas. 

A esta tendencia, sin duda, contribuirá el ajuste de los productos al escenario de crisis y la renovación de la oferta comercial de las compañías. "La crisis afecta a todos por igual y las aseguradoras también se han apretado el cinturón. En muchos casos no han subido las pólizas en la proporción necesaria para mantener los márgenes. Cada vez se apuesta más por la especialización y por ofrecer sólo lo que realmente se necesita para bajar precios", señala el director general de IDIS. "Cada cliente, ya sean particulares o empresas, es diferente y sus demandas también y quieren pagar por aquellos servicios que realmente van a utilizar", amplían en Sanitas.

En este punto los médicos aseguran que ellos son los grandes perjudicados. "Para mantener el margen de beneficio las aseguradoras han bajado de forma importante los baremos que pagan a los médicos que asisten a sus pacientes, por lo que el verdadero pagador de la crisis es el profesional médico que ve como tras más de 10 años con los baremos congelados algunas compañías ahora les aplican una importante bajada que les lleva a veces trabajar por debajo de costes. Si la sanidad tiene un coste, no se puede asegurar la asistencia por debajo del mismo si se quiere dar al paciente una asistencia de calidad", señala José María Nieto Cortijo, representante de la Sección de Medicina Privada por Cuenta Ajena del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos. "Es muy probable que en estas compañías la calidad de la atención se resienta a corto-medio plazo, con las lógicas consecuencias", alerta. 

El doctor Martín, de la FADSP, cree estas ofertas han provocado también que muchas personas se hayan lanzado "de forma precipitada y poco informada a los seguros". "Son costosos para las coberturas tan limitadas que proporcionan, pues excluyen patologías graves como los tratamientos contra el cáncer, la diálisis o cirugías de mayor complejidad", añade. 

El tirón de la empresa

Médicos de la sanidad privada acceden a las historias clínicas de la red pública de más de 420.000 madrileños

Médicos de la sanidad privada acceden a las historias clínicas de la red pública de más de 420.000 madrileños

A pesar de que la mayoría de las pólizas siguen siendo individuales (67,1%), las empresas son las que han mantenido el dinamismo del sector gracias a los seguros colectivos, que copaban en septiembre de 2013 –últimos datos disponibles– el 28,6% de las primas imputadas, un 7% más que en el mismo mes de 2011, según datos de la consultora PriceWaterhouseCoopers (PwC). "La colectivización puede ayudar a que muchas personas que a nivel individual no tengan accesos a seguros, puedan acceder a ellos", señala desde Sanitas Ine Snater. 

Esta situación, sin embargo, podría revertirse tras la decisión del Gobierno de obligar a las empresas a cotizar por los pagos en especie, entre los que se encuentra el seguro médico siempre que se sobrepase los 500 euros por beneficiario. La cadena de tiendas Fnac ya ha anunciado, por ejemplo, que quiere eliminar el seguro médico del que hasta ahora disfrutan sus 2.000 empleados en España. Alega que esta retribución en especie le supone un coste laboral extra que no puede permitirse, según ha argumentado ante los sindicatos. 

"Es una medida recaudatoria. Estamos seguros de que lo que va a ingresar el Estado no va a compensar el gasto extra que va a tener la sanidad pública porque muchas empresas, al no tener ningún tipo de beneficio, van a dejar de incluir estos servicios que, por otro lado, son uno de los más apreciados por los trabajadores", señala Manuel Vilches. 

Más sobre este tema
stats