Plaza Pública
Para atender su problema de salud, ¿va a ser usted derivado a un centro de medicina privada?
1) Para la mayoría de los problemas de salud, usted, en primer lugar, debe acudir a un facultativo especialista en Medicina Familiar y Comunitaria. Estos especialistas tienen formación para solucionar el 80% de los problemas de salud de la población y, si no pueden resolverlo, saben a qué especialista debe usted ser derivado. Por lo tanto, el personal facultativo que le atienda inicialmente en el centro de medicina privada debe tener el título de especialista en Medicina Familiar y Comunitaria.
Los Centros de Salud de la Sanidad Pública están integrados exclusivamente por especialistas con título en Medicina Familiar y Comunitaria o Pediatría. Además de solucionar el 80% de nuestros problemas de salud y de derivarnos al especialista adecuado cuando es necesario, lo conocen a usted y su historia clínica y realizan funciones de promoción de la salud de la comunidad y, en algunos centros, hay además programas de formación continuada e investigación clínica. Y esto lo hacen a pesar de la sobresaturación de trabajo actual a la que está sometido este personal.
Nos consta que en los centros de medicina privada no se exige necesariamente esta titulación a los facultativos que lo atienden en primera línea ni conocen su historia previa. Otro hecho importante que debe saber es que los centros privados no tienen acceso a su historia clínica que existe en la Sanidad Pública.
2) Si usted conoce que su problema afecta a un sistema o aparato específico (por ejemplo, al aparato respiratorio, corazón, aparato digestivo, endocrino, etc.) o ha sido derivado a una especialidad concreta, debe ser atendido por el especialista adecuado, ya que es el que ha alcanzado un grado máximo de conocimientos en la especialidad de que se trate.
Por lo tanto el personal facultativo que le atienda en la empresa de medicina privada ha de poseer el título de especialista en la especialidad adecuada a su dolencia. En los Centros de la Sanidad Pública existen Servicios o Unidades de todas las especialidades. Nos consta que en los centros de medicina privada faltan con frecuencia especialistas de muchas de las especialidades, existiendo facultativos que asumen problemas de especialidades para las que no han seguido una formación adecuada. Algunas veces solo disponen de un especialista localizado que rota entre diversos centros.
3) Si usted va a ser derivada/o para ingresar en camas de centros de medicina privada, usted debe saber que, además del personal facultativo, su atención dependerá de forma importante de la enfermería y del personal auxiliar/TCE (Técnico en Cuidados de Enfermería) adecuado, que debe estar disponible en el número y tener una formación y condiciones de trabajo razonables, similares a las que hay en la Sanidad Pública.
Por lo tanto el ratio enfermería/paciente y auxiliar-TCE/paciente en las plantas de esos centros debe ser el mismo que en los Hospitales Públicos. Asimismo, el porcentaje del personal de enfermeras y auxiliar en prácticas debe ser pequeño y su labor debe ser supervisada por profesionales con mayor experiencia.
En los Hospitales Públicos los ratios de personal de enfermería y auxiliar-TCE por paciente están adaptados a las necesidades reales, y la labor del personal en formación está siempre supervisada por profesionales formadas. Nos consta que en los centros de medicina privada el número, la cualificación, las condiciones de trabajo y el salario del personal de enfermería y auxiliar-TCE no cumple estos estándares.
4) Si a usted le preocupa seriamente la calidad de la atención sanitaria que recibe, cosa que le recomendamos encarecidamente ya que de eso depende su salud, e incluso su vida, y la de sus seres queridos, usted debe solicitar que se cumplan criterios y estándares de calidad asistencial.
Por lo tanto, la empresa de medicina privada a la que le deriven debe disponer de sólidos sistemas de trabajo y de control de la calidad del mismo que vigilen, acrediten y garanticen su actividad asistencial con los mejores estándares.
Los centros de la Sanidad Pública cuentan con Servicios/Unidades integradas por plantillas con formación vía MIR (método más acreditado para la formación de especialistas clínicos) para cada especialidad, con la mayor parte de sus profesionales y de su dirección seleccionados en concursos de concurrencia pública y contraste de méritos, que mantienen su actividad siguiendo criterios de trabajo en equipo y gestión clínica de calidad, con sub-especializaciones contrastadas, que usan procedimientos protocolizados, con sesiones clínicas y/o científicas diarias, sesiones anatomo-patológicas e inter-consultas con otras especialidades, sistemas controlados de respuesta a hojas de reclamaciones, con actividad docente de sus miembros, tanto para alumnado de medicina como para facultativos en formación MIR y, con frecuencia, con actividades científicas evidenciadas mediante proyectos de investigación financiados y publicaciones en bases de datos internacionales de ciencia médica. Todas estas características se cumplen también para la plantilla de enfermería. Además, muchas de estas unidades y servicios han sido refrendados por sistemas de acreditación externos (ACSA, ISO, etc.). Todos estos datos son accesibles y públicos. Por último, toda la estructura de los Hospitales Públicos tiene sistemas intra-murales (en el mismo centro) de apoyo de laboratorios, radiología, farmacia, anatomía patológica, medicina preventiva y otros servicios cuyo personal ha sufrido los mismos criterios de selección y calidad permanente. A esto hay que añadir el resto de personal técnico y auxiliar perfectamente acreditado. Los centros públicos disponen de Comisiones de Mortalidad, Complicaciones, Farmacia e Infecciones que analizan los resultados clínicos para detectar posibles problemas en los procedimientos. Todas estas medidas hacen que la atención a todas las personas esté garantizada sin discriminaciones y con los mejores estándares.
Nos consta que los centros de medicina privada carecen de todos o de la inmensa mayoría de estos sistemas de soporte, garantía y control. No hay inspecciones adecuadas (legales) y públicas de los centros de medicina privada.
Si esta información le induce a pensar que su derivación a centros de medicina privada no ofrece las mejores garantías para su salud y la de los suyos, niéguese a aceptarlo. Está en su derecho. Usted debe ser atendida/o en centros de la Sanidad Pública, con las mayores garantías, como hace la inmensa mayoría de los andaluces. No olvide que los centros de medicina privada existen para generar beneficio a sus propietarios. Y estos beneficios provienen con frecuencia de disminuir la calidad asistencial y su seguridad.
Por último, usted dirá que la Sanidad Pública está saturada. Tiene usted razón. La Sanidad Pública está saturada porque se la ha sometido a largos años de recortes (más de 10,000 M de € en el último decenio) que no han sido repuestos. Deteriorando la Sanidad Pública, el actual gobierno andaluz encuentra la excusa perfecta para derivar cada vez más fondos a los conciertos con centros de medicina privada. Pero esto podría no ser así, si se empleara el dinero que se deriva al sector privado para mejorar la Sanidad Pública. O sea, no se trata de un problema de dinero, sino de una apuesta ideológica: la política del gobierno andaluz actual es mantener el deterioro del sistema público para que permanezca saturado, y obligar a que la ciudadanía sea derivada, enviando el dinero público al sector privado.
España racanea con su sanidad pública: es el tercer país de la UE que menos dinero le dedica en su Plan de Recuperación
Ver más
Marea Blanca rechaza de plano esta política y exige el reforzamiento inmediato de la Sanidad Pública andaluza detallado por nuestra Coordinadora mediante la contratación de 4000 nuevos profesionales de personal facultativo, de enfermería y auxiliar para Atención Primaria, y la apertura de 20 hospitales andaluces en turno de tarde con personal nuevo. Asimismo propone la realización de una auditoría social de la capacidad asistencial real de los centros de medicina privada concertados.
____________________
José A. Brieva Romero, Antonio Vergara de Campos, Lola Martínez Ruiz y Sebastián Martín Recio. En nombre de la Coordinadora andaluza de Mareas Blancas.