Toledo

Las peticiones de los padres de niños con cáncer que provocaron la fuga del PP

La espantada de la práctica totalidad de los concejales del PP en el Ayuntamiento de Toledo –sólo se quedó en su escaño Ana Isabel Bejarano– cuando iba a dirigirse al pleno Maria Luisa Gómez, madre de una joven que sufre cáncer y que ha denunciado en los últimos días en los medios la falta de medios en el Hospital Virgen de la Salud de Toledo, ha dirigido el foco hacia las peticiones que realiza este colectivo de padres para mejorar la atención que se brinda a sus hijos. 

"Tenemos la mejor oncología pediátrica, las mejores enfermeras, y lo que queremos es que dispongan de los medios necesarios para poder hacer su trabajo", señalaba la portavoz en su intervención. Pero, ¿cuáles son exactamente las reivindicaciones de este grupo de padres?

Las han resumido en un escrito que han distribuido entre los ediles que quedaban en el pleno: los doce del PSOE, los 2 de IU y Bejarano por parte del PP, si bien también han conseguido que algunos de los concejales que se han marchado cogiesen una copia. El documento reconoce, en primer lugar, "la magnífica labor de trabajo realizada por el equipo de oncología y hospital de día", si bien denuncia que sus "continuas quejas" no han sido contestadas. Estas quejas se condensan en tres: "espacio, fallos de tratamientos y falta de esterilidad en habitaciones, habiéndose detectado virus y bacterias en zonas de hospitalización".

En este sentido, los firmantes del documento exigen "mayor espacio de hospitalización exclusivo para niños oncológicos, con todo lo que ello genera en materia de más personal cualificado, tanto de facultativos como enfermeras/os", así como no mezclar a estos menores con otros enfermos, a causa del "consiguiente riesgo que conllevan las posibles infecciones y contagios, bajos [los niños] ya de por sí en defensas por su tratamiento". Y no son sus únicas peticiones, ya que también reclaman cambios en la alimentación de los niños y subsanar "errores cometidos por el personal sanitario en materia de aislamiento y tratamiento".

"Nos estamos temiendo que, en algún caso, esta serie de riesgos que se están produciendo lleven a algún desenlace no deseado", denuncian los padres, que piden un "incremento de personal oncológico cualificado y un espacio propio y específico tanto hospitalario como lúdico". En este sentido, se muestran cautos. "Queremos pensar que [los fallos] son por saturación laboral y no por falta de cualificación", señalan, antes de explicar que los problemas que exponen "se incrementan con la falta necesaria de limpieza e higiene en las habitaciones en las que se encuentran nuestros hijos".

Iniciativas concretas

Por ello, los padres realizan una serie de propuestas concretas. "Por necesidades propias de la enfermedad que padecen nuestros hijos, [el hospital de día] debe permanecer abierto en turno consecutivo de 08:00 a 22:00 de lunes a viernes, lo que conllevaría a la contratación de una enfermera y un auxiliar de enfermería", un centro que, explica María Luisa Gómez, fue diseñado en un principio para acoger pacientes oncológicos pero que en la actualidad se utiliza, además, para atender otras enfermedades. "Pedimos que en estas instalaciones le demos prioridad a la oncología infantil [...], y que nunca se use el hospital de día como sala de espera de cirugía", aseveran.

De igual forma, en cuanto al personal, exigen contratar a dos facultativos hematoncológicos pediátricos más, así como a seis enfermeros "y a las auxiliares de enfermería necesarias para cumplir el ratio de mañana, tarde y noche por cada cuatro niños con la debida cualificación y especialización en el trabajo de oncología infantil", ya que según cuenta Gómez el personal es escaso y a veces no hay oncólogos de guardia cuando una de las familias se ve obligada a acudir a urgencias. "Independientemente de todo lo expuesto, los padres queremos seguir el tratamiento en nuestro hospital de referencia con nuestros oncólogos", hace hincapié el escrito.

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La huida de los concejales conservadores ha provocado una agria polémica en Toledo. Mientras la portavoz del Grupo Popular en el Ayuntamiento, Claudia Alonso, aseguraba que el abandono de diez de sus once ediles se ha debido a que no querían "ser cómplices de la utilización del dolor tan terrible que están sufriendo los padres de niños con cáncer", la propia portavoz de los progenitores tachaba de "lamentable" su actuación. "No me lo esperaba. Son los representantes de todos los ciudadanos y quedarse a escuchar es lo mínimo", lamentaba Gómez.

El Gobierno municipal, por su parte, ha calificado de "bochornoso espectáculo" la espantada de los conservadores y ha pedido la dimisión de Arturo García-Tizón como concejal en el Consistorio, como presidente de la Diputación de Toledo y como diputado en el Congreso, cargos todos ellos que ocupa. Asimismo, Rafael Perezagua, portavoz del Ayuntamiento, ha afirmado que "muchos concejales se fueron obligados por disciplina de voto y por miedo a Tizón, jefe de PP en la provincia de Toledo".

IU, por su parte, se ha puesto a disposición del colectivo para llevar ante el Congreso de los Diputados sus reivindicaciones, "aunque el PP no quiera escuchar [...], como demostraron este jueves los concejales 'populares' abandonando el Pleno Municipal de Toledo", según ha declarado Juan Ramón Crespo, vicecoordinador de la federación castellanomanchega de IU. "Lo más alarmante es que el abandono del Pleno estuviera encabezado por Arturo García Tizón, presidente de la Diputación Provincial de Toledo y máximo responsable provincial del PP. ¿Como es posible que personas cómo éstas estén gobernando y dirigiendo la vida de cientos de miles de ciudadanos cuando ni tan siquiera son capaces de escuchar sus problemas?", ha remachado.

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