Iglesia católica

Todos salvo el PP critican a Rouco por evocar la Guerra Civil en el funeral de Suárez

Rouco Varela

Ibon Uría

El cardenal arzobispo de Madrid y expresidente de la Conferencia Episcopal Española, Antonio María Rouco Varela, volvió este lunes a dejar una de sus frases para la polémica durante el funeral de Estado del expresidente del Gobierno, Adolfo Suárez. Hay hechos y actitudes, advirtió, que "pueden causar" una guerra civil, dijo. Apenas 24 horas después, el rechazo ha sido prácticamente unánime.

Así, la portavoz del PSOE en el Congreso de los Diputados, Soraya Rodríguez, ha lamentado que Rouco no aprovechara la ocasión para hablar de cuestiones como la pobreza y que evocase en su lugar la Guerra Civil. Rodríguez ha tachado de "inadecuadas" e "indignantes" unas palabras que considera "fuera de lugar". Al tiempo, ha abierto el debate en torno al carácter confesional de estos actos: "Ha llegado el momento de que los actos de Estado sean laicos", ha proclamado.

En términos similares se ha expresado el portavoz de la Izquierda Plural en la Cámara baja, José Luis Centella. Lo de Rouco fue, ha calificado, un "flaco servicio" a la Iglesia católica. Además, Centella ha considerado que la jerarquía eclesiástica "no es la más apropiada" para hablar de la Guerra Civil y que "debería mirárselo mucho". Personas como Rouco, ha zanjado, "no representan a la inmensa mayoría de los católicos de nuestro país".

También la portavoz de UPyD, Rosa Díez, se ha sumado al rechazo a la homilía del arzobispo de la capital y se ha expresado en términos contundentes. De "absolutamente impresentable" ha calificado las palabras de Rouco, y de "inapropiada e impropia de un funeral de Estado que –ha apostillado– merecía un rigor, una seriedad y un respeto" todo su desempeño al frente de la misa del acto fúnebre. Además Díez se ha sumado a la opinión del PSOE al reclamar actos laicos.

El portavoz de Esquerra Republicana (ERC) en el Congreso, Alfred Bosch, ha considerado que fue "muy poco cristiano" que el cardenal aprovechara la homilía para invocar "el espectro" de la Guerra Civil y ha agregado: "Desde un punto de vista personal, como persona educada en la tradición cristiana, me pareció muy poco cristiano invocar la guerra, la herencia de la guerra o el espectro de una guerra".

El PP niega lo dicho por Rouco

Preguntados por esta misma cuestión, representantes del PP han negado que Rouco Varela dijera que España exista una situación de preguerra civil para evitar valorar sus declaraciones. El portavoz de los conservadores en el Congreso, Alfonso Alonso, ha dicho que ni España está en esa situación ni el arzobispo dijo eso. Fue, ha matizado, una "reflexión" sobre la libertad, algo que "nunca debe asumirse como una cosa hecha". A renglón seguido, ha rechazado valorar la homilía.

Por su parte, el vicepresidente primero del Senado, Juan José Lucas, también del PP, ha pedido respeto hacia las "inquietudes" expresadas por Rouco Varela durante la homilía. "Él hizo saber algunas inquietudes como responsable de la Iglesia madrileña. Creo que en el ejercicio de sus potestades religiosas hay que respetarlas", ha señalado, tras reconocer que dicha interpretación puede ser "para unos correcta y para otros menos correcta", ha sentenciado.

En esa misma línea, el fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce ha enmarcado en la "libertad de expresión" y en la normalidad la referencia del cardenal a la Guerra Civil. "No hago comentario sobre autoridades políticas o religiosas. Están ellos en el ejercicio de su libertad de expresión", se ha limitado a responder.

Cataluña y Euskadi, también en contra

El consejero de Presidencia y portavoz del Gobierno catalán, Francesc Homs (CiU), ha censurado las palabras de Rouco Varela sobre las actitudes que causaron y pueden causar Guerra Civil, y ha asegurado que se alejan del talante histórico de la iglesia catalana y del que explicita el papa. "No son afortunadas en absoluto y se identifican en un estilo que no compartimos", ha destacado.

Desde Euskadi, el lehendakari Iñigo Urkullu (PNV), ha afirmado que las polémicas palabras del arzobispo han sembrado "estupor e indignación". Además, ha considerado que Rouco Varela "desdeña la democracia basada en la voluntad de las personas y los pueblos". "En teoría, el acto iba a servir para recordar la capacidad para el acuerdo de Suárez, y Rouco Varela hizo justo lo contrario", ha añadido el portavoz del Ejecutivo vasco, Josu Erkoreka.

Un habitual de las polémicas

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No es la primera ocasión en la que Rouco Varela se desmarca con declaraciones polémicas en actos señalados. Hace menos de un mes, durante la misa funeral del décimo aniversario de los atentados del 11-M, aseguró que los "fines últimos" de los terroristas no se conocen. Ahondando en la cuestión, aseguró, sobre quienes atentaron en 2004, que "con una premeditación escalofriante, estaban dispuestos a matar inocentes, a fin de conseguir oscuros objetivos de poder".

Durante su presidencia de la Conferencia Episcopal Española, Rouco se pronunció además sobre cuestiones tan diversas como los jóvenes –"hay que animar a los jóvenes a que se casen, tengan hijos y formen familia, si no esto va mal"–, el divorcio –"una marcha atrás en los derechos humanos"– y el matrimonio entre personas del mismo sexo –"niega la misma razón humana"; "autorizar el matrimonio homosexual hará quebrar a la Seguridad Social"–.

Más recientemente, Rouco ha opinado sobre el aborto –"ni siquiera el don de la vida se entiende como definitivo e inviolable”, se lamentaba–, la Ley Wert –a la que acusó de "discriminar" a los alumnos de Religión–, la crisis –"no saldremos de la crisis si no nos convertimos"– y el movimiento 15-M –"sus problemas tienen que ver con el alma", dijo–.

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