Los 14 de Milei no son la excepción: las mujeres sólo ocupan el 23% de los puestos de alta dirección

Con las manos cruzadas y media sonrisa, el presidente argentino posa ante las cámaras. Está rodeado por otros dieciséis hombres enfundados en sus respectivos trajes, la mayoría empresarios españoles al frente de grandes empresas. Javier Milei aterrizó este fin de semana en suelo español para participar en la cumbre ultra organizada por los de Santiago Abascal, pero por el camino decidió compartir su tiempo con directivos de las compañías más importantes del país. Si la imagen destaca por algo, es por la total ausencia de rostros femeninos. El líder de los empresarios, Antonio Garamendi, inmortalizado bien cerca del presidente argentino, sugeriría después mirar más allá de la fotografía aplastantemente masculina e insistiría en que las empresas allí representadas eran, en realidad, ejemplo de igualdad. Lo cierto es que, más allá de la imagen concreta, la realidad ofrece otras lectura: las mujeres suponen sólo el 23,07% de los puestos en la alta dirección de las empresas cotizadas.

Pero empecemos por la fotografía. Las empresas allí representadas, ¿cumplen con criterios de paridad? ¿Cuentan con mujeres en sus cúpulas? Las catorce empresas que han encontrado hueco en la imagen no se caracterizan precisamente por proyectar una imagen paritaria, aunque existen algunas excepciones. El BBVA cuenta con siete mujeres entre los quince miembros de su consejo de administración; en Iberia (Grupo IAG) se encuentran cinco mujeres entre sus once miembros del consejo y el Banco Santander contabiliza a seis mujeres de un total de quince. Esta última es la única que, además, tiene una mujer al frente, Ana Patricia Botín.

A partir de ahí, la cosa decae considerablemente. En Telefónica sólo hay hueco para cinco mujeres en lo alto de su estructura, de un total de diecisiete; en UNIR sólo uno de sus once asientos lo ocupa una mujer y en Naturgy son tres, entre los doce miembros que conforman el consejo de administración. La paridad está tan ausente que en algunas de las empresas no es posible encontrarla ni en el lenguaje. En su página web, la compañía Ecoener menciona a las tres mujeres en la cúpula como "consejero", en masculino.

Ni en las fotos, ni en las altas direcciones

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Pero ir más allá de la fotografía concreta difundida el sábado, como sugería el jefe de los empresarios, tampoco deja un buen sabor de boca en términos de equidad de género. Según el último informe de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), emitido el pasado 16 de mayo, el porcentaje de mujeres en los consejos de las empresas cotizadas se quedó en el 34,5% en el año 2023. Y el declive es generalizado cuando se trata de la alta dirección de las empresas –alta dirección entendida como aquellos puestos que dependen directamente del consejo o del primer ejecutivo de la compañía–. Entonces, el porcentaje de mujeres en las altas esferas cae al 23,07%.

La legislación entiende como paritaria la proporción del 40-60% entre géneros. En base a ello, el Código de buen gobierno de las empresas cotizadas desliza el propósito de que las mujeres ocupen al menos el 40% del total de puestos de los consejos de administración, un objetivo que se convertirá en obligación una vez entre en vigor la ley de paridad. 

Conscientes de ello, las empresas comienzan a ponerse manos a la obra. Según el informe citado, 42 de las 117 sociedades cotizadas ya han alcanzado dicho objetivo. Las del Ibex 35 están a la cabeza: las mujeres suponen el 40,09% de las consejerías, aunque son sólo el 24,74% de las altas direcciones. Ninguna de esas mujeres estuvo presente en la fotografía tomada el sábado con el presidente argentino.