Torturas
Interior justifica su condecoración al jefe antiterrorista marroquí reclamado en Francia por torturas
El Ministerio del Interior justifica la concesión de la Cruz honorífica al Mérito Policial al jefe de la Policía antiterrorista marroquí Abdelatif Hamouchi y a dos de sus colaboradores basándose en el alto grado de cooperación entre Marruecos y España en la lucha contra el terrorismo yihadista, según una respuesta parlamentaria escrita a la que tuvo acceso Europa Press.
"La distinción impuesta a los altos mandos de la Policía marroquí se hizo en reconocimiento al alto grado de colaboración que la Policía del Reino de Marruecos viene ejerciendo con el Cuerpo Nacional de Policía en la lucha contra el terrorismo yihadista", argumentó el Departamento que dirige Jorge Fernández Díaz.
Interior apeló a que "la Policía de Marruecos y la Policía Nacional española desarrollan un ejemplar trabajo, coordinado y reforzado en los últimos años, contra la amenaza del terrorismo yihadista". "Ambos Cuerpos mantienen un excelente clima de confianza, reconocimiento y respeto mutuo, más aún en un ámbito tan sensible y complejo como es la lucha contra el terrorismo", zanjó la respuesta.
Son varios los diputados que se interesaron por esta cuestión, entre ellos Garpar Llamazares, de IU. A la hora de formular su pregunta recordó al colectivo que presentó la denuncia por torturas contra este mando policial, la Asociación de Cristianos por la Abolición de la Tortura (ACAT) de Francia. Fue por los casos de Naama Asfari, un saharaui casado con una francesa y que cumple una condena a treinta años en Salé (Marruecos), y de Adil Lamtalsi, un franco-marroquí que ahora reside en Francia.
Dos casos de torturas
"Ambos aseguran haber sido torturados en los locales de la Dirección de Supervisión del Territorio (DST), la policía antiterrorista marroquí, pero que hace a la vez de policía. Los abogados de ACAT se querellaron en nombre de Asfari y Lamtalsi contra Abdelatif Hamouchi, director general de la DST", dijo Llamazares.
Por este motivo, el 20 de febrero de 2014, cuando Hamouchi estaba de visita de trabajo en París, siete agentes de la policía judicial francesa se presentaron en la residencia del embajador de Marruecos, enviados por un juez instructor, para llevarle a declarar. Pero Hamouchi se negó alegando que se encontraba en un edificio con extraterritorialidad como la residencia diplomática.
Llamazares contrastó la actitud de las autoridades francesas con las españolas al denunciar que el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, impuso en Madrid la Cruz honorífica al Mérito Policial a Hamouchi. "El Ministerio del Interior español trató que la ceremonia fuese discreta, pero los medios marroquíes se hicieron abundantemente eco de ella. Mientras Francia persigue a Hamouchi por torturas, el Gobierno español le condecora", lamentó.
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Aprovechó el escrito para añadir que ya el presidente Zapatero impuso en enero de 2005 la Gran Cruz de Isabel la Católica al general Hosni Benslimane, comandante en jefe de la Gendarmería marroquí y reclamado por la Justicia francesa en el marco de la investigación sobre el secuestro y asesinato en París de Mehdi Ben Barka, opositor al rey Hassan II.
El Ministerio del Interior insistió en las operaciones llevadas a cabo de forma conjunta con Marruecos en las que han resultado detenidas decenas de personas, y que tenían como objetivo el desmantelamiento de redes terroristas cuyas actividades consistían en la financiación, captación, radicalización, adoctrinamiento y envío de combatientes a las zonas de conflicto de Siria e Irak.
"Estas operaciones han tenido una importancia trascendental para la seguridad de los dos países, y sitúan la relación de cooperación entre la Direction Générale de Surveillance de Territoire (DGST) y la Comisaría General de Información del Cuerpo Nacional de Policía como un referente en las relaciones bilaterales entre España y Marruecos", sentenció el Ministerio.