Reforma electoral
Ocho de cada diez alcaldes ya gobiernan con mayoría absoluta
El presidente del Gobierno y del PP, Mariano Rajoy, decidió poner en circulación su propuesta de reforma electoral en un Comité Ejecutivo Nacional de su partido a finales del pasado mes de junio. La cúpula de su formación había culminado por esas fechas una ronda de contactos con presidentes regionales y provinciales para analizar los malos resultados de las europeas y en gran parte de ellas el tema de la denominada "elección directa de alcaldes" había sido planteado como una exigencia si se querían mantener ayuntamientos clave tras las municipales de 2015. Avanzado el asunto por Rajoy, cargos de la formación y del Grupo Parlamentario Popular han empleado el verano para hacer de altavoces de este anuncio. Primero se dijo que no se darían pasos sin consenso de otras fuerzas políticas. Ahora, el escenario está totalmente abierto y, según cuentan en el PP, el presidente parece decidido a llegar hasta el final. Lo que no ha cambiado es el argumento para apoyar la urgencia del debate: evitar "pactos oscuros" o "antinatura" tras las citas con las urnas. De este argumento podría desprenderse que el mapa de poder municipal en España está plagado de ejemplos que sustentan ese miedo del partido de Gobierno. Pero la realidad tumba estas justificaciones.
En las últimas elecciones municipales, las de mayo de 2011, se eligieron 8.040 alcaldes. De estos, 6.535, es decir, el 80,8%, fueron respaldados por mayoría absoluta. Esto implica que en la actualidad, cuando el PP pretende plantear una reforma de la ley electoral para que gobierne la lista más votada, ocho de cada diez alcaldes españoles ya gobiernan con el respaldo de la mayoría de los votantes. Este dato sirve, además, para ilustrar que no solo en las grandes ciudades y en las capitales de provincia se da la circunstancia de que los regidores municipales provienen de la lista más votada. Al respecto, infoLibre informó de que en el 90% de las 78 grandes ciudades españolas –las que superan los 100.000 habitantes más las capitales de provincia– el alcalde es representante de la candidatura que cosechó mayor número de votos.
En otros municipios en los que no se cumplen estas observaciones, gobierna en minoría la lista más votada o el regidor municipal resulta del pacto de varias formaciones. El PP no es ajeno a estos pactos. Hay varios ejemplos de ayuntamientos emblemáticos en los que ha gobernado sin ser la lista más votada. Uno de ellos es el de Valencia tras las municipales de 1991. En su estreno en la política municipal en 1991, la lista que encabezaba Rita Barberá obtuvo 95.238 votos (25,5%) frente a los 139.272 de los socialistas. Para ser proclamada regidora de la ciudad contó con el apoyo de Unió Valenciana. Esta formación había obtenido el 21,56% de los votos con 80.500 sufragios.
El PP, el más beneficiado por el sistema
En el reparto de resultados el PP es el partido que mejor parado sale en lo que a mayorías absolutas se refiere. En 2011, según los datos oficiales del Ministerio del Interior, se hizo con la mitad más uno de los concejales en 3.317 ayuntamientos. Traducido a porcentaje, el PP ganó las elecciones municipales por mayoría absoluta en el 41% de los ayuntamientos españoles. Es decir, los conservadores resultaron los mayores beneficiados del actual sistema de reparto.
Este dato, que el PP obvia en sus discursos de los últimos días, no pasa inadvertido para el resto de formaciones políticas. Este mismo martes, el Congreso de los Diputados acogió una reunión de la Diputación Permanente. Uno de los temas del día fue el de la denominada elección directa de alcaldes. En su intervención, el diputado del Grupo Mixto Alfred Bosch lamentó que los conservadores estén haciendo una propuesta "a partir de un motivo partidista" –el miedo a perder elecciones–. "Nos da la impresión de que ustedes quieren un mapa más azul (en alusión al color con el que se identifica al partido). Todavía más azul", mantuvo el portavoz de ERC.
El PSOE, la segunda fuerza en captar mayorías absolutas
En el ránking de mayorías absolutas en las municipales de 2011, los socialistas siguen al PP. El PSOE gobierna con mayoría absoluta en el 23% de los consistorios españoles, 1.860 en total. Le sigue CiU, que lo hace en 384 ayuntamientos. A mucha distancia, el cuatro puesto es para Izquierda Unida. La formación que lidera Caya Lara obtuvo mayoría absoluta en 58 gobiernos municipales.
Los partidos coinciden en que los conservadores han hecho sus cálculos en base a este mapa de reparto. Y que, en un principio, contaron con que los socialistas iban a recoger el guante al ser la segunda fuerza más respaldada en las urnas. Se equivocaron. Por mucho que desde la dirección nacional del PP se sostenga que van a hacer una propuesta a la que los socialistas "no van a poder negarse", el principal partido de la oposición parece decidido a dar la espalda a los conservadores. Su portavoz en el Congreso, Soraya Rodríguez, volvió este martes a fijar la posición en la Diputación Permanente: sí al diálogo. Pero no ahora a las puertas de unas elecciones municipales. "Es una cuestión de ética democrática, si no, harán un pucherazo electoral", advirtió la socialista.
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Sobre la propuesta a la que, según los conservadores, no podrá negarse el PSOE, el portavoz del PP en la Diputación Permanente, Pedro Gómez de la Serna, dio a entender que la opción de la segunda vuelta iba a estar sobre la mesa. El partido de Rajoy pondrá todo el énfasis en las similitudes que su futura reforma guarda con las propuestas hechas desde 1998 por los socialistas. Es una forma, cuentan las fuentes consultadas, de poner en evidencia la postura del principal partido de la oposición. "No hemos cambiado nosotros, han cambiado ustedes. Quienes tienen que explicar por qué han cambiado son ustedes", retó De la Serna.
Menos lejano de nos postulados del PP se mostró CiU. Su diputado Josep Sánchez Llibre se mostró dispuesto a dialogar con el PP, aunque afeó a Rajoy que este tema se haya debatido en los medios de comunicación antes que el Parlamento. "Si finalmente se plantea [la reforma], no se olvide que para CiU es relevante que exista este debate con todas las fuerzas", señaló el diputado reclamando el papel de actor de su formación en este proceso.
El PP no tiene claro a día de hoy si Rajoy dejará que sea el partido el que lleve las riendas de la iniciativa o si la propuesta se llevará a la Comisión Constitucional del Congreso de los Diputados. Desde que el presidente del Gobierno hizo el anuncio en una reunión interna de partido, el área de política autonómica y local trabaja sobre varias opciones. La que concilia más consenso en el partido es la que otorga la mayoría absoluta a la fuerza que saque el 40% de los votos. Esta medida va aparejada de un condicionante: para dar la mitad más uno de los concejales a la lista que obtenga el 40% de los sufragios, la segunda ha de estar, al menos, a cinco o más puntos de distancia. De lo contrario, se baraja la opción de una segunda vuelta.