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Elecciones 24-M

El PP depende de Ciudadanos para mantener los Gobiernos en Madrid y Valencia

Cristina Cifuentes, Ángel Gabilondo e Ignacio Aguado, el pasado 2 de mayo de 2015 en los actos centrales del Día de la Comunidad de Madrid.

El PP pierde las mayorías absolutas de sus feudos históricos de Madrid y Valencia, pero podría mantener los Gobiernos tanto en ambas comunidades autónomas y en las dos capitales con el apoyo de Ciudadanos. Los socialistas quedan como segunda fuerza en los dos territorios, seguidos de cerca por Podemos y el partido de Albert Rivera, a excepción de la ciudad de Madrid, donde podrían convertirse en tercer partido, por detrás de la candidatura de unidad popular Ahora Madrid. El PP ganaría de hecho en nueve de las 13 comunidades –Madrid, Murcia, La Rioja, Comunitat Valenciana, Cantabria, Aragón, Baleares, Castilla-La Mancha y Castilla y León–, aunque sólo mantendría la mayoría absoluta en una, en Castilla y León, aparte de en la ciudad autónoma de Ceuta. El PSOE es primera fuerza en Asturias y Extremadura, en Castilla-La Mancha gana en votos aunque no en escaños a los conservadores y en Navarra los foralistas de UPN aventajan por muy poco a Podemos. 

Así lo manifiesta la macroencuesta preelectoral del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), realizada entre el 23 de marzo y el 19 de abril, y publicada este 7 de mayo, a escasas horas del arranque oficial de la campaña. Recoge los datos de las 13 comunidades autónomas que celebran comicios el 24 de mayo –todas, menos Andalucía, Cataluña, Euskadi y Galicia–, así como de Ceuta y de Melilla y de siete grandes ciudades: Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Zaragoza, Santiago de Compostela y Vitoria. El trabajo de campo se realizó, por tanto, en fechas muy similares al sondeo de hace cuatro años. Sí recoge, a diferencia del barómetro de abril, la detención del exvicepresidente del Gobierno Rodrigo Rato –que se produjo el 16 de abril– pero no, obviamente, la caída del número tres de la formación de Pablo Iglesias, Juan Carlos Monedero. También refleja el impacto de las elecciones andaluzas, donde irrumpieron con fuerza las dos formaciones emergentes, Podemos y Ciudadanos, y ganó con claridad el PSOE. Y recoge la grave crisis de UPyD, la enésima vuelta del conflicto en IU con la dirección madrileña, el cierre de la instrucción del caso de los papeles del extesorero del PP Luis Bárcenas o el paso ante el Supremo de los expresidendes andaluces Manuel Chaves y José Antonio Griñán, imputados por el caso de los ERE

En la Comunidad de Madrid [consulta aquí el PDF], donde la Asamblea se compone de 129 escaños y la mayoría absoluta está fijada en 65 actas, el PP, con Cristina Cifuentes al frente, pasaría de los 72 parlamentarios que tuvo Esperanza Aguirre en 2011 a entre 48 y 49 diputados y un 34,7% de los votos. El PSOE, que puso como cabeza de lista a Ángel Gabilondo tras fulminar a Tomás Gómez, se alzaría con 27-28 escaños y un 20% de los sufragios, por los 36 asientos de hace cuatro años. Podemos, liderado por José Manuel López Rodrigo, irrumpe con 24 actas (17,3% de las papeletas) y C's le sigue de cerca, con entre 22 y 23 (16,3% de los votos). IU acusa el empuje del partido de Pablo Iglesias y su desgaste interno, y cae de 13 a 7 diputados (5,4%), superando por los pelos la barrera electoral del 5%. Pero al menos la lista de Luis García Montero se mantiene dentro del hemiciclo, cosa que no estaba tan clara hace meses, cuando Tania Sánchez abandonó IU. UPyD, con Ramón Marcos, sale de la Cámara regional, al firmar un 2,5% de los votos. Incluso con la horquilla más baja para el PP, 48 actas, lograría mantener el Ejecutivo autonómico, en sus manos desde 1995, con el apoyo de C's. La suma daría 70 sillas, cinco por encima de las necesarias. 

En la capital de España, Esperanza Aguirre también podría preservar para su partido el Gobierno. Obtendría entre 22 y 23 escaños, por los 31 que recabó Alberto Ruiz-Gallardón de 2011. En votos, se traduce en un 34,5%, sólo dos décimas menos que Cifuentes. Con los 9-10 concejales que atribuye el CIS a C's (14,9% de las papeletas), lograría la mayoría absoluta (29 ediles de un Consistorio de 57). Ahora Madrid –suma de Ganemos y Podemos–, encabezada por la jueza Manuela Carmena, se disputa la segunda plaza (12-13 actas y un 20,8%) con el socialista Antonio Miguel Carmona (12, 18,8%). IU sale por primera vez del Ayuntamiento –le haría falta un 5% y obtendría, según el sondeo, un 4,2%) y UPyD también queda barrida. 

En la Comunitat Valenciana [aquí el PDF], los números están más justos para el PP. En una Cámara de 99 diputados, donde la mayoría absoluta está en 50, el PP lograría entre 33 y 35 actas (tuvo 55 en 2011), y un 30,4%, y Ciudadanos, 16 (15,3%). Con la horquilla más baja, los conservadores, con Alberto Fabra de número uno, se quedarían a un escaño de la mayoría. Los socialistas, cuyo candidato es su secretario general, Ximo Puig, pasan de 33 a 22-23 diputados (un 19,9%), Podemos entra con 19 asientos y Compromís avanza, al saltar de 6 a 7-8 parlamentarios. Esquerra Unida del País Valencià (EUPV), marca de IU en la Comunitat, pierde sus 5 escaños. 

En Valencia capitalValencia capital, Rita Barberá acusa el desgaste de su partido. Cae de los 20 a los 13 ediles (35,7% de los votos), pero con los 5 de Ciudadanos podría preservar el bastón de mando. Los socialistas se mantienen como segunda fuerza, aunque a la baja (6 concejales, dos menos). Le siguen la candidatura de unidad popular Valencia en Comú (5 actas), igualada a C's en asientos y Compromís gana un edil (de 3 a 4). EUPV se queda fuera, igual que UPyD.

Extremadura, más segura para el PSOE

En la capital catalana, la primera fuerza es Barcelona en Comú, la candidatura unitaria –integrada por ICV-EUiA, Podemos, Equo y Procés Constituent– que lidera la exportavoz antidesahucios Ada Colau. Entraría en el Ayuntamiento con 11 ediles y un 25,9% de los votos, por los 8 de CiU. El convergente Xavier Trias, alcalde desde 2011, acusa el desgaste, al perder seis escaños. La tercera plaza es para Ciudadanos (6 concejales), seguidos de PSC (5), ERC (4) y CUP (3). La enorme fragmentación del Consistorio hace difícil pronosticar futuros gobiernos, porque tanto Colau como Trias se quedan lejos de la mayoría absoluta y necesitarían varios socios. 

En Sevilla, el Ayuntamiento pierde dos concejales: de 33 a 31 ediles, así que la mayoría absoluta se queda en 16. El PP de Juan Ignacio Zoido sufre una fuerte erosión, al retener sólo 11-12 concejales de los 20 que obtuvo en 2011. Los socialistas, que repiten candidato (Juan Espadas), pierden un acta (de 11 a 10). Ganemos Sevilla logra entre 4 y 5 ediles; C's, 4, e Izquierda Unida, 1. Los conservadores, por tanto, podrían preservar la alcaldía muy por los pelos, en el mejor de los pronósticos y siempre ayudándose de los de Rivera. 

Zaragoza era la primera gran ciudad que los socialistas pudieron conservar tras la debacle de 2011. Según el CIS, aún podría quedar en sus manos, de nuevo con pactos a varias bandas. El alcalde desde 2003, Juan Alberto Belloch, no repite, y le sustituye como cabeza de lista Carlos Pérez Anadón. Caería de 10 a 7 concejales. Zaragoza en Común, coalición en la que se han incorporado varios partidos (IU y Podemos entre otros), firma entre 7 y 8 escaños, y Chunta Aragonesista, que sostenía a Belloch (como IU) en el pasado mandato, cede uno de sus tres ediles. El PP, con entre 9 y 10 sillones, y C's, con 5, no llegarían a las 16 actas que otorgan la mayoría absoluta. Extremadura y Castilla-La Mancha Castilla-La Manchafueron dos de los bastiones históricos socialistas que el PP logró arrebatar al PSOE en 2011. De las dos, los socialistas sólo tienen más segura la primera. Guillermo Fernández Vara recuperaría la condición de primera fuerza, con un 38,9% de los votos y entre 26 y 28 diputados (30 tuvo hace cuatro años). El presidente extremeño, José Antonio Monago, se haría con el 34,6% y entre 24 y 26 escaños. Podemos y Ciudadanos entran en la Asamblea con 8 y 4 parlamentarios, e IU, que con su abstención facilitó el Gobierno al PP, oscila entre 0 y 2 sillones. La mayoría absoluta, fijada en 33 escaños, la podría alcanzar el PSOE con el apoyo de Podemos. Al PP no le bastaría con el respaldo de C's ni en el mejor de los supuestos, ni aun sumándose a IU. 

María Dolores de Cospedal, secretaria general del PP, tendría a mano repetir Gobierno, pero sólo si lograra seducir a los de Rivera. La presidenta manchega obtendría entre 14 y 15 escaños, a dos o tres de la mayoría absoluta (17, de unas Cortes reducidas a 33 diputados). Se quedaría con un 34,9%, dos décimas por debajo de los socialistas de Emiliano García-Page, al que el CIS atribuye 13 parlamentarios. Podemos entra en la Cámara con dos representantes, por los 3-4 de Ciudadanos. La única opción que tendría el PSOE para quitar el Ejecutivo a Cospedal sería aliándose con las dos fuerzas emergentes. 

Asturias, Aragón y Canarias

En 2011, fue Foro Asturias quien ganó en el Principado, aunque las dificultades de gobernabilidad hicieron a Francisco Álvarez-Cascos convocar nuevas elecciones en marzo de 2012, que dieron la victoria de nuevo a los socialistas, de la mano de Javier Fernández. El presidente se mantiene como primera fuerza, con 13 escaños (tres menos) y un 25,5% de los votos. Con las 10 actas de Podemos, alcanzaría la mayoría absoluta (23, de una Junta General de 45 asientos). El PP crece de 10 a 11 diputados, Foro Asturias se derrumba (pasa de 13 a 5), C's irrumpe con 4 parlamentarios e IU, con Gaspar Llamazares como cabeza de lista, se desploma, al perder tres de sus cinco parlamentarios. 

En Aragón, Luisa Fernanda Rudi (PP) podría seguir siendo presidenta (de 30 escaños cae a 23-24), aunque sólo si se apoya en Ciudadanos (8-9) y el Partido Aragonés (2). La suma a la izquierda sería insuficiente: PSOE (17), Podemos (9), IU (3) y Chunta (2) dan 31 diputados, a cuatro de la absoluta. 

En Canarias, podría mantenerse el bipartito de Coalición Canaria-PSOE. Los nacionalistas bajan de 21 a 17 diputados, y los socialistas podrían subir (de 15 a entre 15 y 16 diputados). Podemos y Ciudadanos entran (con 10 actas el primero y entre 4 y 5 el segundo). El PP se desploma, al aguantar entre 12 y 14 parlamentarios, de los 21 actuales. 

Baleares podría cambiar de color. El PP pierde su mayoría absoluta (decrece de 35 a 19-20 escaños) y no le llegaría ni con C's (9). La izquierda sí podría hacerse con el Govern, si se suman PSOE (14-15) y sus socios de Gent per Formentera (1), Podemos (10) y MÉS per Mallorca (5). 

Incertidumbres en Cantabria y Navarra

En Murcia, el PP (21-22 escaños) roza la mayoría absoluta (23, en una Asamblea de 45 diputados). Los socialistas podrían mantenerse o ganar un acta (11-12) y entran Podemos y C's, con 6 escaños cada uno. IU, que hasta ahora preservaba un asiento en la Cámara y que en 2015 compite dentro de la candidatura Ganar la Región de Murcia, quedaría fuera. Una situación semejante se da en La Rioja. El PP de Pedro Sanz firmaría 15-16 actas (20 tuvo en 2011), por las 17 que requiere la mayoría absoluta. Pero le llegaría con C's (5). El PSOE se queda con entre 8 y 9 parlamentarios, por los 4 de Podemos. IU sigue fuera de la Cámara.

En Castilla y León, los conservadores sí retienen su mayoría (es la única plaza en la que la consigue), pese a la caída (de 53 a 43-44 diputados). El PSOE baja a 20-21 escaños, IU y Unión del Pueblo Leonés mantienen su único asiento y C's (9) podría adelantar a Podemos (8-10).

El PP vencería en las autonómicas en Cantabria (13-14 escaños), aunque sin mayoría aboluta, y se vería obligado a pactar con Ciudadanos (4) para poder mantener el Gobierno. El Partido Regionalista de Cantabria (PRC) de Miguel Ángel Revilla, con 8-9 actas, también podría sumar atrayéndose a PSOE (6), con quien ya cogobernó, y Podemos (3). La mayoría absoluta la dan 18 diputados en un Parlamento que ha pasado de 39 a 35 asientos. 

En Navarra, la gobernabilidad se vislumbra complicada, dada la presencia de hasta ocho fuerzas en una Cámara de 50 sillones. UPN es la primera fuerza, con entre 11 y 12 escaños, por los 19 de 2011. Pero muy cerca queda Podemos (11). Por detrás, EH Bildu (7), PSOE (6), Geroa Bai (5), Ciudadanos (4-5), PP (3) e IU (2). A los regionalistas no les bastaría con el PP y con C's. La izquierda le supera, pero el PSOE no está dispuesto a pactar con Bildu. La suma de socialistas, IU, Geroa Bai y Podemos da 24, a uno de la absoluta. 

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Santiago podría cambiar de manos

Dos últimos datos de dos últimas ciudades, Santiago y Vitoria. En la capital gallega, se pasa de tres a cinco partidos. El PP perdería su mayoría absoluta, al bajar de 13 a 9-10 actas, seguido del PSOE (6-7, 9 hace cuatro años) y Compostela Aberta (5), la lista de unidad popular de la que participan IU y Podemos y que encabeza Martiño Noriega. Ciudadanos y BNG obtendrían dos ediles cada uno. La izquierda sumaría.

En la capital vasca, el CIS estima que estarán sentadas seis fuerzas, encabezadas por el PP, que se haría con 8 de los 27 concejales en liza, uno menos de los que consiguió el actual alcalde, Javier Maroto, en 2011. PNV y EH Bildu pugnan por el segundo puesto (5), y el PSE se quedaría más abajo, con 4. Irabazi (3) –la candidatura impulsada por Ezker Anitza-IU, Equo y Alternativa Republicana– y Hemen-Gaude, la plataforma apoyada por Podemos (2), cierran el reparto en el Ayuntamiento. 

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