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Cataluña ante el 1-O

Sánchez avisa a Podemos de que su apoyo al 1-O puede servir para declarar la independencia

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez (i), junto al primer secretario del PSC, Miquel Iceta.

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El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha advertido este martes a Podemos y al grupo de los Comuns que lidera Ada Colau de que su llamamiento a la participación en el referéndum del 1 de octubre puede ser usado por el bloque soberanista para justificar una declaración unilateral de independencia.

En una intervención ante diputados y senadores socialistas reunidos en el Senado, Sánchez ha pedido a Podemos que tengan "mucho cuidado, no vaya a ser que la posición que están manteniendo con el 1 de octubre sirva de coartada perfecta al independentismo para imponer la declaración de independencia el próximo 4 de octubre en el Parlament", cuando hay convocado un pleno.

El PSOE está llamando a los catalanes a no participar en la consulta, "porque es ilegal y no cuenta con las mínimas garantías democráticas, además de que sólo está sirviendo para fracturar la sociedad catalana", ha afirmado, según recoge Europa Press.

Y aunque los socialistas siguen apoyando al Gobierno para que defienda la legalidad y el Estado de Derecho en Cataluña, Sánchez ha criticado al Ejecutivo por parapetarse detrás de los tribunales. "¿De qué sirve un Gobierno que delega sus funciones en los tribunales?", se ha preguntado el líder socialista.

Sánchez también ha exigido "prudencia" al fiscal general del Estado, José Manuel MazaJosé Manuel Maza, que este lunes abrió la posibilidad de pedir detener al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, si incurre en un delito de malversación de fondos públicos.

No es la primera vez que el PSOE ha cuestionado algunas de las medidas decididas por la Fiscalía para hacer frente a la crisis en Cataluña. Los socialistas también expresaron sus dudas cuando el Ministerio Público decidió citar como investigados a todos los alcaldes que se prestaran a colaborar con el referéndum.

Sánchez reclama "mesura" y "prudencia" a todos los responsables políticos e institucionales para propiciar un diálogo y negociación futura, única vía que permitirá encontrar una solución a la crisis.

A su juicio, en este tiempo en que el conflicto en Cataluña se ha ido enquistando "han sobrado muchas amenazas y muchos reproches y ha faltado diálogo". Y esa falta de diálogo "no se puede resolver con confrontación, sino con diálogo", ha insistido.

Y este diálogo ha de contar con todos los partidos. Porque el PSOE está convencido de que la dinámica de bloques de fuerzas políticas, unas enfrentadas a otras, tiene también su parte de responsabilidad en el deterioro de la crisis catalana.

Enfrentamiento con ciudadanos

Sánchez ha aprovechado para explicar a los diputados socialistas su sorpresivo cambio de posición en el voto de una iniciativa parlamentaria de Ciudadanos en el Congreso que buscaba mostrar el apoyo de la Cámara a las medidas del Gobierno en Cataluña. La proposición no de ley fue rechazada por el voto en contra del Grupo Socialista, decidido por Sánchez en el último momento y sin debate previo en el Grupo, lo que molestó a buena parte de los diputados.

Consciente de ese malestar, Sánchez ha explicado que la iniciativa de Ciudadanos era "oportunista" y ha criticado que la formación naranja se oponga a negociar con los independentistas porque, "al cegar toda vía de diálogo lo que está haciendo es no reivindicar el espíritu constitucional" que defiende el diálogo "como instrumento de reconciliación política entre distintos pueblos".

Pero si el PSOE no comulga con el llamado bloque constitucionalista, tampoco lo hace con el que propone Podemos y que consiste en juntarse todos "simplemente con un objetivo: aislar al actual Gobierno de España para intentar no sé qué".

Si alguna lección ha extraído Sánchez de estos últimos años es que "España no se construye desde el enfrentamiento ni desde los extremos, sino desde el diálogo". "Y cuando estamos hablando de la convivencia territorial, es importante que en el diálogo y en el acuerdo estemos todos, incluidos también los extremos políticos", ha subrayado.

De ahí que Sánchez haya puesto en valor la comisión parlamentaria que pondrá en marcha el Congreso, a iniciativa del PSOE, para evaluar y estudiar la modernización del Estado autonómico porque esta fórmula rompe esta dialéctica de frentes tan dañina.

Y aunque Sánchez no ha ahorrado en críticas al Gobierno, también ha reconocido que el 1 de octubre "no se justifica", por lo que ha pedido a la Generalitat que ponga fin a esta "huida hacia adelante" que sólo está consiguiendo fracturar la sociedad catalana.

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En su discurso, Sánchez también ha hecho referencia a la visita que este martes efectúa el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, al presidente de los EEUU, Donald Trump, en la Casa Blanca. Ha ironizado con que los dos dirigentes no necesitarán intérprete porque hablan el mismo lenguaje de la falta de solidaridad, como demuestra a su juicio el incumplimiento de España en la acogida de refugiados.

Sánchez ha reiterado el compromiso del PSOE de presentar en las próximas semanas unos presupuestos alternativos a los del PP para demostrar que otra política es posible. Los socialistas defienden subir los salarios a los trabajadores porque la recuperación económica también tiene que notarse en sus bolsillos.

Además de tener la lucha contra el paro y la precariedad laboral entre sus prioridades, esos presupuestos alternativos mostrarán el compromiso de los socialistas con unas pensiones públicas dignas y con un cambio del modelo económico que avance hacia una economía más sostenible con el medio ambiente, que deberá incorporar la llamada fiscalidad verde.

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