La portada de mañana
Ver
La red infinita del lobby de la vivienda: fondos, expolíticos, un alud de 'expertos' y hasta un pie en la universidad

La situación en el PP

Casado alaba el "consenso" de la ley sobre el aborto del 85... que AP votó en contra y llevó al Constitucional

Casado apuesta por liberalizar el sector el taxi y crear un fondo para comprar sus licencias

Yolanda González

El debate sobre la ley del aborto vuelve a agitar a un Partido Popular en el que este tema siempre genera división. La legislación sobre la interrupción voluntaria del embarazo sobrevoló la convención ideológica del pasado enero con la que Pablo Casado buscaba un "rearme ideológico" de su formación tras haber tomado el relevo de Mariano Rajoy. Pero no llegó a tocar suelo. Ninguno de los ponentes, representantes de la sociedad civil, lo puso sobre la mesa. Y Casado se limitó a hacer una cerrada defensa de la vida en su intervención de clausura. Pero sin entrar en materia. Que esta cuestión fuera esquivada no pasó inadvertido. Porque en los meses anteriores, destacados dirigentes conservadores habían emplazado a esta cita como foro el en el que el partido fijaría su posición.

Las fuentes consultadas apuntan precisamente a no querer generar división, a huir de la polémica, como motivo fundamental por el que en la convención no se habló específicamente del aborto. Ahora Casado, a dos días de que PP, Cs y Vox coincidan en la madrileña Plaza de Colón para pedir a Pedro Sánchez que convoque elecciones, ha decidido desempolvar el debate en una entrevista concedida a la agencia Efe.

El líder de los conservadores no ha variado ni un ápice su postura al respecto: él es partidario de acabar con la ley actual y que ésta sea sustituida por el texto de supuestos del año 1985. Lo dijo en la campaña interna que le llevó a la presidencia del PP y lo dijo en los meses posteriores. Lo que sorprende en círculos conservadores es que haya decidido que el tema vuelva a ocupar ahora un primer plano.

No pocos creen que la fuerza de Vox en las encuestas y el "consejo" de sus principales asesores, Javier Fernández-Lasquetty e Isabel Benjumea, ambos de perfil muy conservador, tienen mucho que ver en que Casado no haya esquivado el tema.

Partidario de derogar la actual ley del aborto de plazos, aprobada en 2010 durante el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, Casado asegura que su idea es volver a la de 1985 del Gobierno de Felipe González. Una ley que generaba "consenso social" y que "no había ninguna necesidad de cambiar", a ojos del jefe de los conservadores.

El "consenso" de 1985 que no fue

La ley de 1985 despenalizaba la interrupción del embarazo en tres supuestos: grave peligro para la vida o la salud física o psíquica de la embarazada, violación y en caso de que "se presuma que el feto habrá de nacer con graves taras físicas o psíquicas". La de 2010, vigente en la actualidad, dio el salto de los supuestos a los plazos. El Tribunal Constitucional lleva más de ocho años para resolver el recurso contra esta ley, presentado por el Partido Popular. Por ello, hay un sector del PP que cree que sería conveniente esperar la resolución antes de hacer propuestas en uno u otro sentido.

Cuando Casado habla de "consenso" olvida que no existió en los orígenes. Pese a que el Partido Popular no cambió el texto después, cuando José María Aznar llegó a la Moncloa, la ley del 85 no fue votada por Alianza Popular, la formación que después daría lugar al PP. Es más, llegó a presentar un recurso ante el Tribunal Constitucionalque derivó en algunos retoques en el texto.

Pero no es sólo el actual líder del PP el que habla de ese "consenso" de 1985. En 2014, cuando Mariano Rajoy encargó a Alberto Ruiz-Gallardón reformar la ley de Zapatero, Soraya Sáenz de Santamaría, vicepresidenta del Gobierno por entonces, intentaba vestir esta tarea en la que el exministro de Justicia fracasaría después como una forma de llegar a ese "consenso". 

"Fue respetado por los sucesivos Gobiernos. Ha estado en vigor desde su aplicación hasta 2009 por Gobiernos de distinto signo", llegó a decir la que fue rival de Casado en las primarias para la presidencia del partido. Lo que no supo explicar es por qué AP votó en contra y recurrió al TC.

No es este, el de el voto en contra de la formación que dio origen al PP, el único episodio que pone en cuarentena esa tesis de la ley del aborto y el consenso. Porque, esta materia en el PP ha habido de todo, menos consenso: dimisiones, divisiones en el voto en el Congreso y el Senado, fuertes presiones de las asociaciones antiabortistas...

El fin de la carrera política de Ruiz-Gallardón

El caso de Alberto Ruiz-Gallardón es una muestra perfecta de cómo el debate sobre el aborto divide al PP.

Rajoy le encomendó hacer una propuesta de reforma de la ley de plazos. El primer borrador fue muy polémico y el expresidente decidió dar marcha atrás. Entre otras cuestiones, en las primeros textos eliminaba el supuesto de malformación.

En un intento de cambiar el malestar interno, el PP anunció una reforma de la ley de plazos para establecer que las menores de 16 y 17 años precisasen del consentimiento paterno para abortar. Era 23 de septiembre de 2014. Horas después de este anuncio, Ruiz-Gallardón convocaba a la prensa en la sede del Ministerio de Justicia para anunciar que abandonaba la política. La reforma de esta ley ponía fin a la carrera de un hombre que era fijo en todas las quinielas para la sucesión de Mariano Rajoy y despertó todo tipo de especulaciones. Desde las que apuntaban a que los fieles al expresidente habían tendido una trampa a Ruiz-Gallardón para eliminarle como rival a las que apuntaban a que el también exalcalde de Madrid había ido "por libre" y Rajoy tuvo que dar un golpe en la mesa.

La división también se vio en las votaciones de la reforma en el Congreso y el Senado, donde algunos parlamentarios rompieron la disciplina de voto.

Reacciones de los partidos

A juicio de la portavoz de Igualdad del PSOE en el Congreso, Ángeles Álvarez, el PP pretende ahora "polarizar la opinión política" de los españoles reabriendo el debate del aborto y "jalear a las huestes de la extrema derecha".

"Parece que se mueven muy a gusto en la polarización y España necesita ahora reposo, tranquilidad, pedagogía y defensa de las leyes de las que nos hemos dotado y que han sido reclamadas por los españoles", declaró ante los periodistas, informa Europa Press.

La diputada criticó también los argumentos esgrimidos por Casado para justificar esa vuelta a la ley del 85, principalmente, en la necesidad de que crezca la natalidad en España. Son "peregrinas", dijo. A su juicio, una norma más restrictiva conducirá a las mujeres a practicar unos abortos "con menores garantías sanitarias", pero no a evitar esta práctica.

El PP asegura que no volverá a apoyar ningún decreto de Sánchez en el Parlamento porque "no es un interlocutor válido"

El PP asegura que no volverá a apoyar ningún decreto de Sánchez en el Parlamento porque "no es un interlocutor válido"

Para Unidos Podemos, el aborto "sí es un derecho de las mujeres". Según explicó la portavoz de Igualdad del grupo confederal, la diputada de En Marea Ángela Rodríguez, esta práctica está en "una tendencia a la baja" en España, tal y como se recoge en el informe sobre esta materia que se puede consultar en la web del Ministerio de Sanidad.

Mientras, el presidente de Ciudadanos (Cs), Albert Rivera, consideró que no es lógico "mezclar" la caja de las pensiones con la ley del aborto. Además, acusó al presidente del PP, tras haber hecho tal vinculación, de intentar "dividir a los españoles con debates puramente ideológicos" que, además, "están superados por una ley que el PP, cuando tuvo mayoría absoluta, no cambió ni derogó".

En el otro extremo, asociaciones antiabortistas dieron este jueves la "bienvenida" al compromiso de Casado aunque consideraron que la ley del 85 ya abrió una "grieta" y que la situación ideal sería que no hubiese "ninguna" ley de aborto. En su lugar piden ayudas a la maternidad.

Más sobre este tema
stats