CONGRESO
Cómo el núcleo duro de Feijóo ha convertido el insulto en la marca del PP en el Congreso
Las sesiones de control al Gobierno que se celebran cada miércoles en el Congreso nunca son fáciles. Los partidos de la oposición preguntan al Ejecutivo sobre asuntos de actualidad y, aunque teóricamente conocen de antemano las preguntas, a veces los portavoces las cambian sobre la marcha, lo que obliga tanto al presidente del Gobierno como a sus ministros a improvisar. La del pasado 18 de junio fue, quizá, una de las más difíciles —si no la que más— que ha vivido Pedro Sánchez en sus más de siete años de mandato tras hacerse público el informe de la UCO que se llevó por delante a su ex número tres, Santos Cerdán.
Durante su turno de preguntas, el portavoz de Esquerra Republicana, Gabriel Rufián, realizó uno de sus habituales chascarrillos contra el líder de Vox, Santiago Abascal, que acababa de abandonar el hemiciclo tras cuestionar a Sánchez. Un movimiento que dejó a los propios diputados de Vox perplejos ya que desconocían si ellos también debían irse. Rufián lo aprovechó y dijo: "Entiendo que el señor Abascal se ha ido a desayunar y les ha dejado aquí tirados y no saben qué hacer". Y a continuación se dirigió al socialista: "Señor Sánchez, ¿qué va a hacer frente a todo lo que está pasando?”, en referencia a Cerdán.
El ruido habitual del hemiciclo, intensificado en esa sesión de control, provocó que Sánchez no escuchara bien la referencia a Abascal y malinterpretara que esa pulla se dirigía a él. "No solamente he desayunado sino que, cuando como, no tengo sobremesas y no desconecto mi móvil como sí hizo el señor Mazón durante las horas tan aciagas de la dana", contestó el socialista. Unas horas más tarde, durante el encuentro que mantuvieron Sánchez y Rufián en La Moncloa ese mismo miércoles, el republicano le aclaró que la frase iba dirigida a Abascal, no a él, según explica a infoLibre el propio portavoz de ERC.
Esta anécdota sirve para ilustrar que el ruido se ha instalado también dentro del hemiciclo del Congreso, hasta el punto de generar malentendidos por los gritos o los constantes exabruptos de algunos diputados mientras está interviniendo el rival. “Es difícil oírte en las sesiones de control. Y el ruido siempre viene por el mismo lado, que es PP y Vox. En cambio, el periodismo siempre acaba diciendo que todos gritan, pero quienes empiezan siempre son los mismos”, asegura Rufián.
Los insultos sin micrófonos desde la bancada del PP: “Puteros”, “gentuza”...
“Dimisión, dimisión, dimisión”. Las bancadas de la derecha terminaron con estos gritos y aporreando sus escaños en el Pleno en el que compareció el presidente del Gobierno este miércoles para explicar los supuestos casos de corrupción de Santos Cerdán y José Luis Ábalos. Un ruido ensordecedor dentro del hemiciclo, pero que hacía retumbar hasta las paredes del pasillo del palacio de la Carrera de San Jerónimo.
En el Gobierno y en el PSOE llevan meses quejándose de que no pueden hablar más de dos frases en la tribuna de oradores sin que les interrumpan los gritos. Pero no se queda ahí, sino que son numerosos los insultos que salen desde el lado contrario sin que los puedan captar los altavoces ni los medios, como confiesan varios ministros y dirigentes socialistas.
Les lanzan insultos como “puteros, payasos y gentuza”. Sobre todo, los escuchan los miembros del Gobierno en el banco azul que hay bajo la bancada de la derecha. Algunas veces se vuelven para pedir respeto Diana Morant (Ciencia), Óscar López (Transformación Digital y Función Pública), Mónica García (Sanidad), Sira Rego (Infancia y Juventud) y Elma Sáiz (Inclusión y Seguridad Social). Y les dicen además desde las filas populares: “Callaos la boca”.
De hecho, en el PSOE y en Sumar comentan que son todavía más maleducados los parlamentarios del Partido Popular que los de Vox. Una de las cosas que más sorprende e indigna entre los socialistas es que los ataques furibundos sin micrófono llegan desde la propia dirección del PP en boca de Miguel Tellado y Ester Muñoz. Asimismo, revelan que reciben insultos por parte de Macarena Montesinos y de Jaime de Olano, dos personas muy cercanas al líder gallego, y también de forma constante por parte de Rafael Hernando: “Vive de eso”.
Pero, además, parlamentarios socialistas trasladan que en las filas posteriores del PP hay varias diputadas que se dedican a caldear el ambiente para que les sigan el resto de sus compañeros: Sandra Fernández y Patricia Rodríguez Calleja. También profieren insultos de “corruptos” todo el rato Antonio Román y Carlos Rojas, según explican los socialistas. Y en la parte de Vox quien siempre grita contra el Gobierno es José María Sánchez, además de ser constantes las voces de Carlos Flores —condenado por violencia machista— contra Francina Armengol, a la que llama “censora”.
La derecha apunta a Zaragoza, Mínguez y Guijarro
En la bancada de la derecha admiten que tienen “alborotadores” en el grupo y ellos mismos citan a algunos diputados como Rafael Hernando, Agustín Conde o Tomás Cabezón. También confiesan que su secretario general, Miguel Tellado, es “muy protestón”, al igual que Jaime de Olano y Álvaro Pérez, todos ellos diputados gallegos cercanos a Feijóo. Sin embargo, niegan que el ruido únicamente lo provoquen ellos.
“Del PSOE una de las que más bronca monta es curiosamente la que han elegido de portavoz, Montse Mínguez”, asegura una parlamentaria del PP que lleva muchos años en la Cámara, que señala a un segundo diputado también de los socialistas catalanes, José Zaragoza. Asimismo, destaca que “hay especialistas en hacer gestos para que los de enfrente monten bulla y la presidenta les corte”, en referencia a la presidenta socialista Francina Armengol. En ese papel, asegura esta fuente popular que el “especialista” es Txema Guijarro, secretario general del grupo parlamentario de Sumar.
En la bancada gubernamental, que se sienta en primera fila, en el PP destacan que hay “ministros que también se apuntan a la bulla” como el titular de Transportes, Óscar Puente. Pero no solo. Citan también a la ministra de Sanidad, Mónica García, y al de Derechos Sociales, Pablo Bustinduy, como dos de las personas que suelen enfrentarse más a la bancada del PP.
Asimismo, también atribuyen cierta responsabilidad a Vox y al anteriormente citado José María Sánchez, al que Armengol ha abroncado en más de una ocasión. Una bancada que, según explica la citada fuente, presentó un escrito hace poco a la Mesa de la Cámara Baja por la fotografía de Pilar Vallugera, diputada de ERC, en la que tenía los pies encima del escaño.