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Galicia

Iglesias reedita en las primarias de Podemos Galicia su choque con una Bescansa que busca volver a la primera línea

Carolina Bescansa, junto a Pablo Iglesias e Íñigo Errejón en una imagen de archivo.

Podemos tendrá nuevo secretario general en Galicia este jueves. Los dos candidatos, el diputado Antón Gómez-Reino y la cofundadora del partido Carolina Bescansa, aprovecharon hasta el último minuto para hacer campaña. Los afiliados de la formación morada en la comunidad podían votar al candidato que prefieran hasta este miércoles a las 23.59, y pese a que las primarias están circunscritas a Galicia, el resultado tendrá también una lectura en clave estatal: la victoria de Gómez-Reino supondría un espaldarazo para la dirección liderada por Pablo Iglesias, mientras que el triunfo de Bescansa traería de nuevo a la primera línea de Podemos a una dirigente crítica que está ante la que puede ser su última oportunidad de reengancharse a la cúpula del partido.

El relevo de la actual dirección de Podemos Galicia, liderada por Carmen Santos, parecía un mero trámite para Gómez-Reino hasta que Bescansa anunció a principios de octubre que tenía pensado competir por la Secretaría General. Después de una campaña exprés, la votación se abrió el pasado día 18 y se cerró este miércoles a medianoche. El jueves se conocerán los resultados. El congreso autonómico del partido, por otra parte, tuvo lugar el pasado domingo, y allí ambos candidatos tuvieron ocasión de contraponer sus propuestas.

Antes del anuncio de Bescansa, Gómez-Reino, apoyado por Iglesias y la dirección estatal de Podemos, llevaba meses conformando una candidatura con representación de buena parte de las familias del partido, y de hecho cuenta con el apoyo de una buena parte de los cargos públicos gallegos de Podemos, como Ángela Rodríguez, su compañera en el Congreso; el senador José García Buitrón y dos de los cinco parlamentarios autonómicos de En Marea que pertenecen al partido morado, Marcos Cal y Luca Chao. Todos ellos tienen algo en común: son críticos con la actual dirección del partido a nivel autonómico, liderada por Carmen Santos.

Y es precisamente Santos quien auspicia junto a su equipo la candidatura de Bescansa. Tanto es así que, de hecho la secretaria de Organización saliente, Natalia Prieto, es su número dos en una lista en la que los diez primeros puestos están ocupados por mujeres y que incluyen a otros miembros de la dirección de Santos, como son Marlene Pérez o Begoña Hermida. Bescansa también ha logrado el apoyo de cargos públicos como el diputado de En Comú Podem Raimundo Viejo, nacido en Galicia, o la diputada autonómica Julia Torregrosa.

No obstante, la competición entre Bescansa y Gómez-Reino por la Secretaría General de Podemos Galicia no se ajusta al habitual esquema de corrientes del partido morado: de hecho, Gómez-Reino es un dirigente próximo a Iglesias al igual que lo es Carmen Santos, que nunca ha ocultado sus simpatías por el sector pablista de Podemos. La decisión de Santos de impulsar la candidatura de Bescansa se explica por el choque que la secretaria general autonómica mantiene desde hace años con la corriente que integra en Galicia Gómez-Reino, una desavenencia que, entre otras cosas, tiene que ver con las discrepancias sobre la relación que debe tener Podemos con En Marea.

Gómez-Reino siempre ha sido mucho más proclive a promover una mayor integración del partido morado en En Marea y con las mareas municipalistas que gobiernan en ciudades como Ferrol o Santiago de Compostela, mientras Santos y su dirección –que apoyan a Bescansa– se ha mostrado reacia durante su mandato a diluir las siglas de Podemos en una formación unitaria junto a Anova e IU. Este asunto, sensible entre algunas de las bases de Podemos en la comunidad, apareció en los discursos que realizaron los candidatos el pasado domingo durante el congreso autonómico, aunque ninguno de los dos arriesgó: ante un auditorio lleno de militantes de Podemos, tanto Gómez-Reino como Bescansa apostaron por una organización morada "fuerte".

El resultado tendrá una lectura estatal

Y es que, aunque la integración en En Marea sea una de las principales discrepancias políticas de fondo, los choques que han tenido Bescansa y Gómez-Reino durante la campaña interna han tenido más que ver con el hecho de que Bescansa lleve años viviendo en Madrid y que no haya estado presente en la política gallega hasta ahora. El propio Iglesias –con quien su antaño colaboradora no mantiene ningún tipo de relación desde que se hizo público un documento en el que planeaba hacer un frente contra él con el objetivo de descabalgarlo del liderazgo de Podemos– dejó caer nada más conocerse la candidatura de la dirigente que le llamaba "la atención" que quisiera dirigir Podemos Galicia residiendo fuera de la comunidad. Y Gómez-Reino insistió el pasado domingo en que la suya es una candidatura "de país" y que incluye a gente que "lleva mucho tiempo trabajando en los movimientos sociales" y "conoce el país perfectamente".

No obstante, en declaraciones a infoLibre, Bescansa asegura que durante la campaña ha experimentado un "respaldo muy grande" hacia su equipo. "Creo que esta campaña no empezó bien y espero que acabe mejor", lamenta la candidata en referencia a las críticas de Iglesias y su entorno, unas críticas que achaca al "desconocimiento de la situación política de Galicia". Según Bescansa, la elección de una nueva dirección para Podemos Galicia supone "un punto de inflexión" para la organización del que dependerá al menos en parte el desempeño electoral de las mareas en los próximos comicios municipales de 2019.

Por su parte, Gómez Reino se muestra "satisfecho" de que, según relata, durante la campaña "se haya ido acercando gente que se había alejado de Podemos y que se ha reilusionado" con la formación. "En general, la pulsión que hemos tenido durante los actos es una voluntad de construir un Podemos más fuerte", explica el candidato, que asegura que está extendida una "sensación" entre la militancia de que es necesario "rearticular la organización" de cara a los comicios del año que viene.

Pero aunque los candidatos tratan de circunscribir el debate a su comunidad, es innegable que lo que ocurra en Galicia tendrá una lectura en clave estatal para Podemos. La victoria de Gómez-Reino sería una alegría para la dirección estatal del partido, que en los últimos tiempos ha visto como los candidatos oficialistas en procesos internos como el de Cataluña  perdían ante otras opciones. Y, en ese sentido, un triunfo de Bescansa supondría otro mal trago para Iglesias y la vuelta a la primera línea de una dirigente que no ocupa ningún cargo orgánico desde que se negó a concurrir en la lista de Iglesias en el congreso de Vistalegre II, y que quedó totalmente defenestrada cuando se conocieron sus planes para sustituir a Iglesias en la Secretaría General de Podemos tras el próximo congreso del partido.

En este sentido, ser una de las 17 secretarias generales autonómicas podría devolver a la dirigente un papel importante en Podemos, pese al peso limitado de la rama gallega –con escasa implantación territorial y diluida en En Marea– en la organización. De ser elegida, Bescansa accedería automáticamente al Consejo Ciudadano estatal de Podemos –su máximo órgano entre congresos–, pero sobre todo contaría con algo más importante: el altavoz mediático que le garantizaría ser, además de una de las dirigentes críticas con Iglesias, una de las 17 baronesas de Podemos.

Una participación escasa

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Habida cuenta de la trascendencia a nivel estatal del proceso en Galicia, la candidatura de Bescansa ha tenido sus más y sus menos con la dirección estatal durante las primarias y ha acusado a la cúpula controlada por Iglesias de no ser neutral. El equipo de la candidata ha denunciado que la dirección estatal haya fijado como requisito para participar y votar en las primarias gallegas que los inscritos en la web de Podemos hayan verificado su identidad presentando su DNI, una condición que solo se había exigido hasta el momento en algunos de los últimos procesos y únicamente a quienes votaban por primera vez.

Este nuevo requisito puede haber contribuido a la escasa participación que está teniendo el proceso de elección, según fuentes consultadas por infoLibre, ya que dificulta a los inscritos en la página web del partido que están menos implicados en la vida orgánica de Podemos su participación. Así lo denunció hace unos días Carmen Santos, que como secretaria general saliente criticó que la dirección estatal de Podemos hubiera incluido un nuevo requisito para votar. "Hace dos semanas en Cataluña se votó distinto y pedimos que, por favor, se cambie esta discriminación", denunció Santos el pasado 9 de octubre, mientras Bescansa asegura a infoLibre que, si esta medida reduce la participación, "habría que preguntarse hasta qué punto" es lícito hacer cambios en el reglamento con tan poco margen temporal.

No obstante, Gómez-Reino rechaza las críticas. "La dirección estatal ha sido escrupulosamente neutral en el proceso, y es raro que sea la dirección saliente quien diga esto", señala el candidato en referencia al apoyo explícito de Santos a Bescansa. Además, Gómez-Reino asegura no comprender "cómo se puede estar en contra de medidas para evitar el fraude" en las primarias, como es el polémico requisito del DNI, y se muestra confiado en que la participación "se mantenga en los márgenes habituales". En 2016 participaron un total de 3.223 personas en el proceso en el que Santos fue elegida secretaria general.

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