El PSOE busca convertir el giro de Feijóo sobre Puigdemont en el revulsivo que necesita para el 18F

El candidato del PSdeG a la presidencia de la Xunta de Galicia, José Ramón Gómez Besteiro, durante el mitin al que ha asistido este lunes en Camariñas (A Coruña).

Todo un terremoto político. La revelación de que el PP estaría dispuesto a indultar a Carles Puigdemont y que estudió durante 24 horas conceder la amnistía ha estallado en plena recta final de la campaña de las elecciones gallegas. Y el PSOE se ha agarrado a esta “gran mentira” de Alberto Núñez Feijóo para buscar la movilización necesaria para vencer a los populares el próximo domingo, pero además cree que este tema va más allá de esa cita y que supone toda una invalidación de la política de oposición que ha hecho Génova 13.

Los socialistas redoblaron su presión contra el PP este lunes exigiendo públicamente a Núñez Feijóo que informe sobre qué ofreció y negoció con el partido de Carles Puigdemont y criticando duramente el “cinismo” y la “hipocresía” del Partido Popular, al que acusan de haber mentido a todos los ciudadanos mientras alentaba manifestaciones en las sedes de los socialistas a lo largo y ancho de España.

La izquierda enfila la recta final de la campaña del 18F con la idea de que el cambio es posible, como indicó la encuesta del CIS que dibuja un mapa en el que el PP puede perder la mayoría absoluta, y con la principal obsesión de movilizar al electorado que va a las generales a apoyar opciones progresistas pero que se queda luego en el sofá cuando hay una cita autonómica. Por eso, esperan que esto pueda ayudar para superar ese anhelado 60% de participación en el que fijan como umbral para que haya partido real.

La semana crucial para movilizar

Aunque nadie sabe medir exactamente qué efecto puede tener en la cita esta revelación sobre los contactos del Partido Popular con Junts, en lo que sí coinciden en la izquierda es que esto ayuda a evidenciar la “mentira” del Partido Popular y sus contradicciones, además de que supone echar por tierra ese intento de Núñez Feijóo de que los temas a nivel nacional juegan en Galicia a su favor. Las elecciones gallegas son un enorme test para el propio expresidente de la Xunta, que necesita un gran triunfo también para mostrarlo como trofeo dentro del partido después del fiasco del 23J.

La izquierda está centrada ahora en buscar esa movilización. En el PSOE gallego, que puede bajar según las encuestas en favor del BNG, se apela a que uno de cada cuatro gallegos todavía está indeciso, como recoge el CIS, que refleja que entre el 10 y 15% del electorado escogerá la orientación de su papeleta el mismo domingo. Para el candidato del PSdG, José Ramón Gómez Besteiro, esta semana es “crucial”, por lo que busca que estas revelaciones del PP sirvan para “frenar la mentira” como pasó durante el 23 de julio.

En el BNG durante estas horas están también centrados en hacer ver que el cambio es posible, al calor de las encuestas que pronostican su fuerte ascenso. La candidata del Bloque, Ana Pontón, subrayó que esto refleja que el PP va de “bandazo en bandazo”, por lo que ha apretado el “botón del pánico”. Ve muy nervioso a los populares y considera que todo se jugará por un “puñado de votos”. Una alta fuente del BNG describe que puede que no tenga un efecto visible “muy directo” pero puede contribuir “a aumentar la falta de credibilidad del mensaje de Rueda" porque el PP ha “utilizado” mucho este tema.

Moncloa y Ferraz ven incapacitado a Feijóo para seguir con su oposición

En La Moncloa y en Ferraz sostienen que estas informaciones van más allá de la contienda gallega. Fuentes del núcleo duro del socialismo creen que esta situación incapacita a Feijóo a seguir en su línea actual de oposición y además es un torpedo contra su propio hilo argumental contra la hoja de ruta de normalización en Cataluña del Ejecutivo de coalición. 

Entre los miembros de la dirección del PSOE y del Gobierno se reitera, según las fuentes consultadas, que el líder del PP ha quedado como un “mentiroso” y que ha roto “de la noche a la mañana” su propio discurso. Por eso, vaticinan que este no es un tema que se quede en la campaña, sino que lo invalida para decir nada sobre el tema mientras esté al frente del Partido Popular.

También trasladan los socialistas que las informaciones sobre el PP, en las que se refleja que la dirección popular considera que no hay terrorismo en el caso del procés y que está abierta a un indulto condicionado, suponen reconocer el planteamiento del Gobierno para encarar el conflicto catalán. Esto lo que hace, como consideran en el PSOE, es reafirmar en su voluntad a los socialistas de seguir adelante con medidas como la ley de amnistía para terminar de normalizar la situación en Cataluña.

"Mentiras e hipocresía"

"Toda España pudo ver cómo quedaban al descubierto las mentiras y la hipocresía del Partido Popular en relación a Cataluña", indicó la vicepresidenta primera del Gobierno, María Jesús Montero en una declaración en la sede del PSOE este lunes, a la vez que reflejó: "Ahora le cuenta a los periodistas, presentes en una comida que él mismo había convocado, que en lo que se refiere a Cataluña él ve tres cosas importantes: que no tendría problemas en indultar a Puigdemont, que le estuvo dando vueltas a conceder la amnistía y que no ve terrorismo imputable a Puigdemont",.

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Para apostillar, la también vicesecretaria general del PSOE señaló:  "La oposición del Partido Popular ha sido tan grave que, estando ellos de acuerdo en el fondo con nuestra política, han optado por una estrategia irresponsable de crispación. Ahora descubrimos que cuando se apagan los focos, el Partido Popular reconoce que nuestra política de reencuentro y superación del drama que ellos provocaron en 2017 es acertada". 

En ese redoble de presión por parte de los socialistas también salió la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, quien sostuvo: "Llevamos meses sufriendo insultos y calumnias por parte del PP por la apuesta que lleva haciendo este Gobierno desde el primer momento por el reencuentro y la convivencia en Cataluña. Y ahora sabemos que el Partido Popular quiere aprobar los indultos. El problema que tiene el Partido Popular es que no puede, y no puede por el señor Puigdemont, sino por Vox".

El nuevo ministro de Economía, Carlos Cuerpo, se refirió también a la situación en sus declaraciones más políticas hasta el momento, en las que censuró la estrategia de “ruido y confrontación” de los populares. "Estaban incluso apostando, o estaban dispuestos a apostar, por una estrategia de avanzar en los indultos, avanzar en la amnistía. Es decir, en línea con las actuaciones que había llevado a cabo el Gobierno", apreció el sucesor de Nadia Calviño.

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