Elecciones primarias

La pugna entre Llamazares y el coordinador asturiano centra el foco de la segunda tanda de primarias de IU

Cayo Lara y Gaspar Llamazares durante la sesión de control al Gobierno del 24 de septiembre de 2014 en el Congreso.

Aunque Izquierda Unida sigue enredada (y atrapada) en el bucle del caso Bankia y de sus primarias en Madrid, sus federaciones intentan centrarse en sus propios procesos de primarias y en poner a punto la maquinaria electoral para una convocatoria clave: las municipales y autonómicas de mayo de 2015. En IU, a diferencia del PSOE, por ejemplo, no hay una fecha cerrada a la que se sumen los territorios. Cada uno de ellos tiene autonomía para marcar sus ritmos y tiempos. Pasado el nombramiento de los candidatos de Andalucía, Valencia, Madrid, Murcia y Canarias, queda una segunda tanda de elecciones internas. En Aragón, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Extremadura o Navarra. Pero el foco más jugoso está en Asturias, una de las federaciones de mayor peso en toda IU y donde se enfrentan el actual diputado en el Congreso por Asturias, Gaspar Llamazares, y el coordinador regional, Manuel González Orviz. Una pugna en la que ninguno parte como un claro vencedor.

Para Llamazares (Logroño, 1957), se podría decir que es su tercera vida política. Porque comenzó su trayectoria en su tierra de acogida, Asturias, a los 24 años, en el Partido Comunista (PCA) y siete años más tarde se convirtió en el coordinador regional de IU en esa comunidad, y en 1991 fue elegido ya diputado en la Junta General del Principado –la Cámara autonómica– y en 1995 y 1999 concurrió como candidato a la Presidencia de la comunidad. En 2000 comenzó su segunda etapa, ya en Madrid, al ser aupado al liderazgo federal de IU. En 2008, tras el batacazo en las generales, cedió las riendas de la coordinación a Cayo Lara. Pero preservó su acta de diputado. Esta es, de hecho, su cuarta legislatura en el Congreso (2000-2004, 2004-2008, 2008-2011 y 2011-2015). El parlamentario consideró agotado su ciclo en la capital y decidió, por sorpresa, competir en las primarias asturianas, que se celebrarán el 24 de enero. 

Intentó una candidatura "de consenso", pero no pudo ser. González Orviz, que nunca ha ocupado un escaño en la Junta General, se postuló. Él fue elegido coordinador de IU Asturias en julio de 2012, tras una tortuosa asamblea en la que se enfrentaron tres sectores: el crítico (el de Orviz) y las dos facciones que integraban la dirección anterior, la de la diputada autonómica Noemí Martín –a quien apoyó Llamazares– y la del exsecretario de Organización Ángel González. Este al final respaldó a Orviz como líder regional. 

Disposición al "acuerdo"

El coordinador tiene a su favor el aparato de IU Asturias, y el apoyo de varios líderes locales, de su antecesor en el cargo, el senador Jesús Iglesias, y de Ángel González, pese a que este ha perdido peso institucional y orgánico, al tener que dejar su acta tras ser condenado por el Tribunal Superior de Justicia a siete años de inhabilitación especial para empleo o cargo público por un delito de prevaricación administrativa cometido en su etapa como viceconsejero de Bienestar Social. Llamazares, a su vez, tiene el respaldo del grupo parlamentario en la Junta General al completo (empezando por su actual portavoz, el exconsejero Aurelio Martín), y de los dirigentes de las grandes ciudades, además de su conocimiento social. El excoordinador conserva aún un ejército fiel de militantes en su federación, que trasciende las fronteras del partido que él colidera en el seno de IU, Izquierda Abierta (IzAb). 

Llamazares hizo oficial este viernes la presentación de su candidatura a través de su cuenta de Twitter, presentó su postulación por escrito (tenía de plazo hasta el día 22) y mandó una carta al coordinador regional comunicándole su voluntad de concurrir en el proceso. "Unas primarias que, a tenor de la numerosa inscripción de simpatizantes, pueden ser un éxito de movilización y de encuentro de Izquierda Xunida [marca asturiana de IU] con su entorno de activistas sociales, a la par que un indicador electoral en un contexto complejo pero esperanzador para la izquierda real de Asturias". El diputado le insistió en que cuenta con su "lealtad" a la organización y a la dirección regional, y le reiteró su "disposición al acuerdo en todo el proceso de primarias, para garantizar la información, el debate, el fortalecimiento y la cohesión de IU, pero también el llamamiento a los trabajadores y a los ciudadanos asturianos". 

Orviz celebró el "reto" de competir contra Llamazares, un "valor" de IU. Las primarias, ha ido recalcando en los últimos días, deben servir para "movilizar" la organización. En el proceso están llamados a participar tanto los más de 2.500 militantes de IX como los simpatizantes inscritos. A partir del 7 de enero, los precandidatos dispondrán de diez días para recabar los avales necesarios –el 10% de los afiliados o el 15% de los registrados–. Después se abrirá la campaña y la jornada de votación, el 24 de enero. 

Candidatos ya muy asentados en varias federaciones

El fin de semana siguiente, tocarán las primarias de Aragón, también abiertas a simpatizantes. Los candidatos deberán recoger el aval de al menos el 15% del censo de militantes y nunca más del 25%, entre el 22 de diciembre y el 9 de enero. Lo previsible es que quien puje por la cabecera de cartel autonómica sea Patricia Luquin, portavoz de IU en las Cortes regionales. El coordinador desde 2002 y parlamentario desde 2003, Adolfo Barrena, le cedió el puesto institucional en septiembre de 2013, una señal del relevo. Luquin pertenece a la nueva hornada de dirigentes de IU, más jóvenes, bien conectada con el diputado por Málaga en el Congreso, Alberto Garzón, único candidato por ahora a las primarias federales. 

Para febrero serán los siguientes procesos previstos, en torno a la fecha de la elección, precisamente, del aspirante a la Moncloa, el día 15. Es el caso de Castilla y León, donde por ahora su coordinador y procurador en las Cortes autonómicas, José María González, emerge como el aspirante más claro. Lo esperable habría sido que encontrara como rival al secretario general del PCE regional y líder burgalés de IU, el joven Pedro María de Palacio, con quien ya se enfrentó por el liderazgo de la federación castellanoleonesa en la asamblea de 2013. Este obtuvo el 40,6% de apoyos. Pero De Palacio dejó todos sus cargos en IU y en el PCE hace unos días por "no tener una posición rupturista clara con el régimen de 1978 y por no apostar por una convergencia clara". El proceso se abre a afiliados (unos 1.200) y todos los ciudadanos que quieran inscribirse. Se podrá votar en las asambleas, por correo y a través de Internet. 

En Castilla-La Mancha, la elección del candidato a la Presidencia de la Junta de Comunidades será también a mediados de febrero. Será en primarias abiertas a los simpatizantes. El coordinador regional, Daniel Martínez, un hombre alineado totalmente con el líder federal, Cayo Lara, es el candidato natural. La dificultad, en cualquier caso, radicará en el cambio de la Ley Electoral aprobada en solitario por el PP de María Dolores de Cospedal, que reduce a la mitad el número de diputados, hasta los 33, lo que dificulta el acceso a la Cámara a las terceras fuerzas.

El caso singular de Extremadura

Para el 22 de febrero se conocerá el nombre del candidato de IU en Extremadura, la federación rebelde, la que en 2011 desafió a la dirección de Cayo Lara y, con su abstención, acabó con 28 años de Gobiernos socialistas y abrió la puerta de la Junta al PP de José Antonio Monago. Desde entonces, la cúpula regional ha funcionado como un verso suelto, un dolor de cabeza que recurrentemente volvía sobre Lara. Extremadura es, de nuevo, la federación que se desmarca del resto en la forma de designación de su número uno a las autonómicas. El Consejo Político del pasado 14 de diciembre, aprobó hacerlo por el sistema de primarias cerradas, sólo para militantes. Hasta el 13 de enero se pueden presentar las candidaturas, que deberán contar con "el aval de al menos un 25% de miembros del Consejo Político, un 10% de la afiliación" –hay 810 militantes– o a propuesta de la Presidencia de IU Extremadura. 

Los afiliados podrán votar sólo por correo, y se recogerán "todas las cartas que lleguen hasta el 22 de febrero", cuando un Consejo Político Regional ampliado abrirá las papeletas y contará los sufragios. 

En IU Extremadura, según fuentes de la dirección, se debatió si abrir o no las primarias a los simpatizantes. En las europeas, este fue el sistema pero, explican, "hubo que anular el voto telemático porque la misma persona podía votar diez veces". "Entonces se ha buscado un sistema más lento y restringido, pero que ofrece más garantías". Es decir, que se optó por un procedimiento cerrado "por falta de infraestructura para elaborar un censo y para evitar impugnaciones". 

El candidato seguro es el coordinador regional y portavoz en el Parlamento autonómico, Pedro Escobar. La corriente crítica autodenominada La Mayoría considera "muy improbable" su participación en las primarias, según su portavoz, Margarita González-Jubete. El sector reclamaba un procedimiento abierto a simpatizantes y que Escobar no se presentase a la reelección. Condiciones que no se dan. "Tenemos poca confianza en el carácter democrático de estas primarias. Y no tenemos interés en avalarlas con nuestra presencia". 

Conflicto aún abierto en Madrid

En Navarra, la situación es peculiar. Allí, IU y su socio en las últimas elecciones, la formación vasquista Batzarre, han impulsado un proceso de primarias abiertas de forma conjunta, para elegir al cabeza de lista y a los otros nueve miembros de la candidatura. Ambas fuerzas hicieron ya un llamamiento a Equo y Podemos, pero ninguna ha respondida hasta ahora. No hay aún reglamento ni tampoco candidatos, porque la fecha prevista de votación es "entre finales de febrero y principios de marzo", según el dirigente de Batzarre Txema Mauleón. Él y José Miguel Nuin, coordinador regional de IU, tienen asiento en la Cámara foral y son los dos principales referentes de la coalición. Para evitar que la lista sea monocolor, se introducirán elementos de corrección que garanticen la representación de los dos aliados. Se permitirá el voto telemático y presencial. 

En Asturias (5 diputados), Aragón (4), Navarra (3) y Castilla y León (1), IU tiene representación en esta legislatura que concluye en 2015. En las Cortes manchegas, la federación está fuera desde el cuatrienio 1995-1999.

Los aspirantes de Andalucía (12 diputados en 2012), Valencia (5 en 2011), Madrid (13), Murcia (1) y Canarias (ningún escaño) ya están elegidos. La federación andaluza fue la que antes hizo sus deberes, pese a que no tendrá comicios autonómicos, salvo si hay adelanto, hasta la primavera de 2016. Eligió, en primarias abiertas, a su coordinador, Antonio Maíllo. En Valencia, ganó el joven Ignacio Blanco frente a la líder autonómica, Marga Sanz, que cedió al vencedor el puesto de portavoz en Les Corts. En Murcia, se impuso el coordinador y único diputado, José Antonio Pujante, frente a Candi Marín y Víctor Egío. En Canarias, sólo se presentó el jefe de filas, Ramón Trujillo.

Llamazares ofrece al líder asturiano de IU un pacto en la campaña de primarias y en la dirección regional

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Y en Madrid, es donde el proceso ha sido más complejo y tormentoso, por el grado de enfrentamiento. Se hizo con la candidatura a la Comunidad la diputada Tania Sánchez Melero, y con la del Ayuntamiento, su compañero Mauricio Valiente. Ambos del sector crítico, opuesto al grupo que tradicionalmente ha gobernado la federación, cuya cabeza visible es el actual portavoz municipal, Ángel Pérez. Sánchez y Valiente ganaron tanto en la urna de militantes como en la de simpatizantes, de forma incontestable, pero ninguno ha sido aún ratificado. Sin alternativas contra GarzónIU-CM, de hecho, está paralizada

. La dirección no tiene jefe, porque el coordinador, Eddy Sánchez, dimitió a las pocas horas de conocerse el resultado. Pero las dos partes no han logrado pactar una comisión colegiada que le reemplace. Y el núcleo de Pérez, SomosIU, se ha encastillado y se niega a que este y el portavoz en la Asamblea, Gregorio Gordo, paguen con su cargo su responsabilidad política por la participación de IU en Caja Madrid y Bankia, como reclamó la Presidencia Federal. La guerra sigue abierta y el abismo, cada vez mayor. A día de hoy, la ruptura, fatal para toda IU, no es descartable. 

Mientras, las primarias federales, abiertas a simpatizantes, ya están en marcha. El 26 de diciembre acaba el plazo para que los posibles candidatos comuniquen a la dirección su voluntad de competir. Y, hasta el momento, sólo lo ha avanzado Garzón. Si nadie más da el paso, él será virtualmente ya el aspirante a la Moncloa. Si alguien decide rivalizar contra él, tendrán que lograr los avales: entre el 3% y el 15% del censo (compuesto por 30.000 militantes). Si los dos pasan la prueba, comenzaría la campaña y la votación, por correo postal, voto telemático o en urna, hasta el 15 de febrero. Todavía podría haber sorpresas en los siguientes días, pero cada vez la posibilidad de un competidor de Garzón se diluye. Izquierda Abierta sigue sin ver condiciones (quería que la votación fuera en marzo, y una campaña más larga) y es consciente de que la candidatura del parlamentario por Málaga, empujada por la mayoría de federaciones y por el líder del PCE, José Luis Centella, cuenta con muchas fortalezas. Con todas las de ganar. 

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