GRIPE AVIAR
La Xunta toma medidas contra la gripe aviar y confina gallinas hasta en 40 municipios
Desde este pasado lunes están en vigor las medidas de prevención adoptadas en 40 municipios de Galicia para proteger las explotaciones avícolas ante el incremento de la gripe aviar. Son actuaciones detalladas en la orden APA/2442/2006, tal y como explicó el Ministerio de Agricultura y Alimentación la pasada semana en un documento donde advierte de que en Europa se detectaron, desde el pasado mes de julio, 139 focos de esta enfermedad en aves de corral, 708 en aves silvestres y 33 en aves en cautividad, casi 90 de esos casos en España.
Uno de los últimos lo comunicó este martes la Consellería do Medio Rural. Se trata de un ejemplar de gaviota patiamarilla hallado en el municipio de A Coruña y que fue trasladado después al Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de Oleiros. Tras el análisis del cadáver del animal, se confirmó el que es el décimo caso de gripe aviar en aves silvestres en Galicia en este 2025, aunque no se ha registrado ninguno en aves de corral.
Ante la situación, la Xunta informó la pasada semana de las medidas a aplicar desde esta semana en las zonas de especial riesgo (ZER) y zonas de especial vigilancia (ZEV). Así, se prohíbe la cría de aves de corral al aire libre, aunque permitiendo excepciones en caso de existir medidas de bioseguridad que impidan el contacto directo —o indirecto a través de agua o alimento— de estas aves de corral con las silvestres. Por lo tanto, cientos de gallineros deberán permanecer cerrados y mantener a las gallinas dentro en los municipios incluidos en esas dos áreas.
Queda vetada también la cría de patos y gansos junto a otras especies de aves de corral y el uso de aves anseriformes (nadadoras) y caradriformes como reclamos en la caza.
La orden prohíbe también dar agua a las aves de corral procedente de depósitos a los que puedan acceder silvestres, salvo que esa agua sea tratada para evitar los virus, y ordena proteger, en el caso de determinadas aves de corral, los depósitos situados en el exterior frente a las aves silvestres.
También se prohíbe cualquier concentración de aves de corral u otro tipo de aves en cautividad y la presencia de estas en centros de concentración de animales como mercados o ferias ganaderas, aunque la Xunta podría autorizar estas concentraciones si antes hay una evaluación del riesgo con resultado favorable.
Las medidas son aplicables en los siguientes municipios: los incluidos en la zona ZER (A Illa de Arousa, Cambados, O Grove, Meaño, Ribadumia, Sanxenxo, Vilanova de Arousa, en la provincia de Pontevedra; Xove, en la de Lugo; y Cerceda, Ordes y Tordoia, en la de A Coruña). Y los de la zona ZEV, que son Cariño, Dumbría, Mazaricos, Ortigueira, Porto do Son, Rianxo, Ribeira, Vimianzo y Zas, en la provincia de A Coruña; Ribadeo y Trabada, en Lugo; Porqueira, Rairiz de Veiga, Sandiás, Vilar de Santos y Xinzo de Limia, en Ourense; y A Guarda, Marín, Meis, Moaña, Poio, Pontevedra, Redondela, O Rosal, Soutomaior, Tomiño, Tui, Vilaboa y Vilagarcía de Arousa, en Pontevedra.
La medida afecta a casi 1.200 municipios en el conjunto del Estado, siendo Castilla y León, con 250, y Cataluña, con 224, las comunidades con más zonas con restricciones, aunque Castilla-La Mancha extenderá el confinamiento a toda la región.
La Xunta explica que la previsible disminución de las temperaturas en estos próximos días, así como la existencia en estas fechas de las migraciones anuales de aves procedentes del centro y norte de Europa y de Asia, que pasan por la península en su ruta hacia África, son factores que contribuyen a que “la situación de riesgo sea muy elevada en Galicia y en el resto del Estado, motivo por el cual se adoptaron las medidas descritas”.
Desde la Consellería do Medio Rural se insiste, además, en la importancia de reforzar las medidas de bioseguridad de las explotaciones avícolas gallegas, tanto de las industriales como de las familiares, especialmente las destinadas a evitar el contacto con aves silvestres, así como intensificar la vigilancia de las aves domésticas y silvestres, comunicando de inmediato a los Servicios Veterinarios Oficiales cualquier sospecha de la enfermedad. En el caso de las aves silvestres esta comunicación puede llevarse a cabo a través del teléfono de atención a la ciudadanía 012.
No se transmite de humano a humano
“Cabe recordar que el serotipo vírico detectado (H5N1) ha demostrado un escaso carácter zoonótico, aunque por un principio básico de bioseguridad, se recomienda no manipular aves encontradas enfermas o muertas y comunicar el hecho a los servicios veterinarios oficiales de la Consellería do Medio Rural o a la Consellería de Medio Ambiente y Cambio Climático”, explica.
En caso de que un animal esté infectado, los síntomas en los casos leves son dificultades para respirar o disminución en los huevos que pone. En caso de aumentar la gravedad, puede sufrir hinchazón, pérdida de apetito o sangrado.
Aunque la gripe aviar puede transmitirse al ser humano por vía respiratoria, para que eso se produzca el contacto debe ser reiterado y directo con las aves infectadas o con sus excrementos. El contagio de humano a humano no es posible ni tampoco se transmite comiendo la carne de un animal infectado o los huevos.