Cataluña ante el 1-O

Un total de 38 heridos en las cargas policiales, tres de ellos graves, según la Generalitat

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Un total de 38 personas han resultado heridas, tres graves, durante las "cargas policiales" de agentes del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) desplegados para acceder a los puntos de votación electoral para requisar urnas y papeletas, ha informado la Conselleria de Salud de la Generalitat.

En un apunte en su cuenta de Twitter recogido por Europa Press, ha afirmado que el Sistema de Emergencias Médicas (SEM) ha atendido a las 38 personas, de las que nueve han requerido traslado a un centro sanitario.

Mayoritariamente se han atendido contusiones, mareos y crisis de ansiedad en diferentes puntos electorales de todo el territorio, ha explicado Salud, que a las 13 horas actualizará la información.

Manifestantes y personas que custodiaban las escuelas, centros cívicos y demás puntos de votación electoral han criticado cargas de la policía y uso de pelotas de goma para dispersar multitudes.

Al menos tres personas han resultado heridas en los enfrentamientos entre la Policía Nacional y los vecinos de Lleida que esperaban votar en la Escuela Oficia de Idiomas.

En los enfrentamientos, se han roto las vallas del edificio y los cristales de las puertas, y varios testigos aseguran que los agentes han disparado tiros al aire para dispersar multitudes.

El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha acusado este domingo al Estado de utilizar una "brutalidad policial absolutamente injustificada" para intentar impedir el referéndum sobre la independencia de Catalunya.

 

Varios heridos en el centro sanitario de Cappont (Lleida)

Así, los enfrentamientos entre la Policía Nacional y vecinos de Lleida concentrados para votar en el Centro de Atención Primaria de Cappont han ocasionado varios heridos y dos de ellos han sido atendidos en ambulancias, según testigos presenciales.

Los agentes se ha llevado las urnas pero cuando se han marchado los responsables de la mesa han vuelto a colocar otras.

La Policía Nacional se ha llevado también las urnas de los Servicios Territoriales de Trabajo, Bienestar Socios y Familia de Lleida y algunas personas aseguran que han recibido golpes y empujones.

Quienes hacían cola para votar se han trasladado a la puerta de la Diputación, en la Rambla Ferran.

En la Escuela Oficial de Idiomas también han producido enfrentamientos entre los concentrados y la Guardia Civil; mientras, unas cuatrocientas personas hacen cola para votar en la Diputación de Lleida.

Se llevan las urnas de la Escola Ramon Llull

Por otro lado, agentes de la Policía Nacional se han llevado las urnas de la escuela Ramon Llull de Barcelona, situada en el Eixample, arrancándolas de las manos de los miembros de las mesas electorales, que se han resistido a entregarlas, y entre gritos de "fascistas" de más de 300 concentrados en el exterior de las instalaciones.

 

Según ha constatado Europa Press, los agentes de los antidisturbios han roto a martillazos el cerrojo de una de las puertas de entrada y han accedido al interior, donde han tenido que apartar a la gente para poder llevarse el material del referéndum, viviendo momentos de tensión.

Los miembros han respondido cantando Els Segadors –el himno catalán– y los agentes, pocos minutos después y protegidos por un amplio dispositivo, se han llevado las urnas en furgonetas entre gritos, insultos y agarrones de muchos de los manifestantes.

Ha sucedido pasadas las 9.30 horas, pero desde una hora antes un numeroso grupo de los antidisturbios de la Policía Nacional ha mantenido cortada la calle Consell de Cent, entre Marina y Serdenya, para impedir que los concentrados pudieran acercarse.

Durante ese tiempo se han vivido momentos tensos, con algunos de los manifestantes intentando rebasar la línea policial y siendo arrastrados por los antidisturbios, mientras el resto respondían gritando consignas como "somos gente legal", "no tenemos miedo" y "las calles serán siempre nuestros" todo ello con las papeletas de votación en lo alto.

Poco antes de las 10 horas, todos los efectivos policiales se han retirado y, mientras muchos concentrados se han quedado en el recinto del centro educativo comentando lo que había sucedido, otros muchos han abandonado también el lugar.

La consejera de Enseñanza, agredida por la Policía Nacional

La consellera de Enseñanza de la Generalitat, Clara Ponsatí, ha confirmado que ha sido agredida por agentes del Cuerpo Nacional de Policía a su entrada en la sede del Departamento, y ha afirmado a Europa Press: "Mantendremos el referéndum tanto como podamos. Seguiremos votando".

Tras intentar dialogar con policías para impedir su entrada en el punto de votación del referéndum, ha explicado que ha sido agredida y que le han robado su ipad personal: "Me han estirado, arrastrado y me han dado algunos golpes".

La consellera, que ha estado rodeada de escenas de cargas policiales a la llegada de la Policía Nacional, ha destacado que intentaba hablar con los agentes y decirles que era la consellera, pero que no le han hecho caso y que "no atendían a ningún tipo de razón".

Ha aseverado que "el Estado español ha cruzado una línea roja", y ha tachado las actuaciones policiales de ser una agresión a los derechos humanos sin precedentes.

También ha alertado de que es muy grave que en un país de la UE se requisen urnas y que la policía impida votar y ha reivindicado que el referéndum se mantiene y que tienen urnas y papeletas: "A la gente no le podemos decir ahora que no puede votar".

Herida una anciana

Además, una anciana ha resultado herida durante la entrada de la Policía Nacional en el colegio Freire del barrio de Roquetes de Barcelona, punto de votación del referéndum de este domingo.

Vecinos han asegurado a Europa Press que diversos agentes han logrado entrar en el centro y se han llevado las urnas y las papeletas.

Los concentrados, diversos de los cuales habían dormido en el centro desde el viernes, se han desplazado a otros centros para mantenerlos abiertos y votar.

La Guardia Civil requisa la urnas de Sant Julià de Ramis

La Guardia Civil se ha marchado alrededor de las 10.30 horas de este domingo de Sant Julià de Ramis (Girona), el municipio de residencia del presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, que no ha podido votar en su colegio electoral –lo ha hecho en Cornellà de Terri– porque más de 50 agentes han requisado el material de votación.

Los agentes antidisturbios de la Guardia Civil han llegado al pabellón municipal de Sant Julià de Ramis alrededor de las 9 horas, cuando ya se habían constituido las dos mesas electorales y se habían colocado las urnas.

Después de varias cargas contra los vecinos que bloqueaban la entrada del pabellón desde la madrugada –junto a un tractor que estaba estacionado también en la entrada– y tras romper la puerta de cristal, los policías han conseguido acceder al interior de las instalaciones, y media hora más tarde han salido con las urnas requisadas.

Centenares de personas han seguido a los agentes de la Guardia Civil en su marcha hasta la salida del municipio, mientras coreaban lemas como "votaremos", "las calles serán siempre nuestras","vergüenza" y cantaban canciones como Els segadors, Passi-ho bé de La Trinca, y los han despedido al grito de "Nos vamos a votar".

Los agentes han realizado un cordón para facilitar la salida de los vehículos, una veintena, que tenían estacionados cerca del pabellón, y los vecinos los han seguido hasta que los últimos policías han subido a los coches.

Los sindicatos de policía y Guardía Civil respaldan el despliegue

Diferentes sindicatos de la Policía Nacional y asociaciones de la Guardia Civil han expresado en las redes sociales desde primera hora de la mañana su apoyo a la actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para cumplir con el mandato judicial y requisar las urnas destinadas a la celebración del referéndum suspendido por el Tribunal Constitucional.

"La inacción ante órdenes judiciales explícitas coloca a los mandos de Mossos fuera del concepto de Policía integral. Trapero, responsable", ha publicado en su cuenta de Twitter el sindicato CEP.

 

El mayoritario SUP ha recordado que los compañeros desplazados a Cataluña han actuado este domingo para "cumplir y hacer cumplir la ley".

"La Policía haciendo su trabajo, arreglando la falta de capacidad de los políticos, por un salario inferior a otras policías", ha defendido.

 

La asociación mayoritaria de la Guardia Civil, AUGC, también ha expresado su respaldo a la actuación policial: "Todo el apoyo para las Fuerzas y Cuerpos Seguridad del Estado que hoy más que nunca están haciendo valer el Estado de derecho #NoEstaisSolos".

La Unión de Oficiales ha mandado ánimos a sus compañeros tanto de la Guardia Civil como de la Policía Nacional. "Estamos con vosotros y con la legalidad vigente. VIVA #ESPAÑA Y VIVA #CATALUÑA".

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