EL FUTURO DE LA LEGISLATURA

La coalición de Gobierno mira a 2027 con un mayor grado de solidez que los gobiernos de derechas

Reunión del Consejo de Seguridad Nacional

Comienza la votación…” El panel del Congreso se iluminaba principalmente en rojo el pasado 22 de enero. El decreto ómnibus caía con 177 votos en contra (de PP, Vox y Junts) frente a 171 a favor y una abstención. El Ejecutivo quedaba en el precipicio al no poder sacar sus prometidas medidas sociales, corazón del programa de la coalición progresista. Pero diez días después se le ha dado la vuelta a la situación como a un calcetín. Y Pedro Sánchez logrará sacar adelante un nuevo decreto con una mayoría de hasta 316 diputados.

Durante la negociación in extremis con Junts en la villa y corte política volvió a rondar la hipótesis de un adelanto electoral. Pero lejos de eso, el Gobierno pone las luces largas hacia 2027 y desdeña que se rompa el bloque de la mayoría de investidura. De hecho, este decreto ha servido para rearmarlo y para que el partido de Carles Puigdemont, clave para aguantar, levante la congelación de las negociaciones sectoriales con los socialistas. 

En el Gobierno, repiten varias fuentes, defienden que su estabilidad es mucho mayor que las acusaciones que se vierten desde la derecha mediática y política. Ponen sobre la mesa datos: el Ejecutivo y el grupo parlamentario socialista han sacado adelante en el Parlamento ya durante esta legislatura hasta 26 iniciativas legislativas (once reales decretos, diez proyectos de ley y cinco proposiciones de ley). En el mes de febrero se unirá el nuevo decreto con el escudo social negociado por el Ejecutivo con Junts, al que se sumará, tras un volantazo, el Partido Popular.

La siguiente pantalla que tiene el Gobierno es la negociación de los presupuestos generales, aunque Junts ha priorizado sacar antes el traspaso en materia de migración (las conversaciones avanzan, aunque no se ha cerrado por escollos sobre el control de fronteras y la expedición de los NIE). En el Ejecutivo son ahora más optimistas sobre las cuentas, aunque apelan en todo momento a la prudencia. Y hay voces que admiten que se puede aguantar con los actuales prorrogados si no prospera la negociación. Miembros del Gobierno señalan con estas “cómodos” con la actuales cuentas porque son de carácter “expansivo” y sirven perfectamente para aplicar las políticas progresistas.

Qué está pasando en las comunidades

A pesar de las críticas que lanza Génova 13 contra la coalición, la prórroga de los Presupuestos se ha convertido en la tónica de los gobiernos autonómicos populares en los que dependen de sus exsocios de Vox. No han conseguido aprobar las cuentas para el año que viene los Ejecutivos de Aragón, Balears, Castilla y León, Extremadura, Murcia y la Comunitat Valenciana. Tampoco tiene proyecto para el año que viene Salvador Illa en Cataluña, donde se acaba de aprobar el decreto de prórroga.

El PP sí ha sacado las cuentas para el año que viene en las comunidades donde tiene mayoría absoluta: Andalucía, Madrid, La Rioja y Galicia. Y, además, ha pactado los presupuestos con el PRC en Cantabria y con CC en Canarias. Las pocas comunidades en manos del PSOE, a excepción de Cataluña, también han sacado adelante sus proyectos de presupuestos: Asturias (con un pacto con la izquierda), Euskadi (con el PNV), Castilla-La Mancha (mayoría absoluta) y Navarra (junto a Geroa-Bai y Contigo-Zurekin).

El ritmo parlamentario en las diecisiete comunidades autónomas tiene muchas y diferentes velocidades. En el estudio de productividad y eficacia legislativa de los parlamentos autonómicos elaborado la Escuela de Asuntos Públicos y de Gobierno de IMF, se recoge que Cataluña lidera la actividad legislativa en términos absolutos, seguida por Navarra y Andalucía, mientras que el País Vasco, Cantabria y La Rioja muestran los niveles más bajos de actividad. Al ajustar por el número de parlamentarios, Navarra destaca como la comunidad más productiva, seguida por Murcia y Castilla-La Mancha. En contraste, el País Vasco, Extremadura y la Comunidad Valenciana presentan la menor productividad parlamentaria. 

En virtud del análisis elaborado entre 2023 y 2024, Canarias lidera en número de pactos con 118 acuerdos (25,59% del total), seguida por Cataluña con 101 pactos (21,90%) y Navarra con 100 pactos (21,69%). Si se mira a la oposición, Andalucía es la comunidad que ejecuta más acciones de control al gobierno, con 22.612, lo que representa el 25,22% del total. Le siguen Madrid con 18.047 acciones y Baleares con 8.513 acciones. Las comunidades con menor actividad de control son Murcia (533 acciones), Castilla y León (1077) y Navarra (1201).

"La coalición va a aguantar, los gobiernos del PP y Vox han caído"

A raíz del debate sobre la estabilidad, en Ferraz hacen estas reflexiones: “La época de las mayorías absolutas es historia, y no solo en España. Solo los partidos con capacidad de dialogar y pactar pueden formar mayorías que, con todas las dificultades de los gobiernos en minoría, sigan produciendo legislación para el beneficio de las personas. Con un gobierno en minoría, el PSOE y sus alianzas parlamentarias y de gobierno llevan al frente del Ejecutivo prácticamente siete años”.

Fuentes de la dirección socialista recalcan al hilo: “La legislación sacada adelante en este tiempo es ingente, destacando una reforma laboral que está dando cifras récord de empleo a nuestro país. El PP y la ultraderecha, la coalición negacionista, también se opusieron a ella, como a todo. El concepto de estabilidad entendido como un partido con más de 175 diputados en la Cámara está obsoleto, y puede que para bien. Los acuerdos multipartitos son reflejo de la pluralidad de España, y las leyes fruto de esos acuerdos no serán derogadas con facilidad, ya que llevan detrás no solo una mayoría parlamentaria, sino una gran mayoría social”.

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“Claro, en este nuevo escenario nos encontramos a un Partido Popular y a un Feijóo arrinconados con la ultraderecha como único partido con el que son capaces de pactar, y de mala manera. Si los pactos del PP y Ciudadanos saltaron por los aires, los de PP y VOX en las comunidades han seguido el mismo camino. Si hablamos de estabilidad, el Gobierno de coalición progresista es un ejemplo a contraponer a los gobiernos de coalición del PP, que han terminado en crisis y falta de unos presupuestos en muchas comunidades”, añaden las fuentes”.

Para rematar con esta idea por parte de Ferraz: “Es irrefutable: el primer Gobierno de coalición agotó la legislatura, y el segundo va camino de hacer lo propio. A estas alturas, los gobiernos de PP y Vox ya han caído, mientras la coalición progresista sigue en vigor, fuerte y pactando para lograr avances”.

La búsqueda de pactos para gobernar y las continuas negociaciones son una constante también en Europa. De hecho, de los 27 miembros de la UE, hay 25 gobiernos de coalición, en tanto que solo hay ejecutivos monocolor en Grecia y en Malta. Y los partidos de las coaliciones en muchos casos tampoco aglutinan la mayoría en el Parlamento, como sucede en Alemania (que está a punto de celebrar elecciones), Austria, Chipre, Francia y Portugal. Además requieren de apoyos externos los partidos que están en los gobiernos en Bulgaria, Croacia, Dinamarca, Irlanda, Rumanía y Suecia. Otra tónica es la falta de presupuestos en algunos países grandes como pasa en Francia. Además, los socialistas españoles ponen también en valor frente a la imagen de inestabilidad que Pedro Sánchez es el cuarto líder más longevo actualmente dentro de la UE, sólo superado por el húngaro Viktor Orban (2010), el croata Andrej Plenković (2016) y el francés Emmanuel Macron (2017).

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