El Gobierno da por zanjado el choque diplomático con Israel y seguirá defendiendo los dos Estados

Niña víctima de un bombardeo en Gaza.

Israel inició un choque diplomático este lunes con el Gobierno español al que Exteriores respondió con máxima contundencia y que no ha movido ni un ápice la posición del Ejecutivo respecto a la resolución del conflicto palestino-israelí. En un comunicado, la embajada del país hebreo en España pidió al presidente en funciones, Pedro Sánchez, que condenara las declaraciones "absolutamente inmorales" y "vergonzosas" de "algunos miembros del Gobierno" sin especificar qué declaraciones ni qué miembros.

En esa nota también, Israel advertía del "peligro" que supone para las "comunidades judías" de España que "ciertos elementos" dentro de la coalición "hayan optado por alinearse" con Hamás —una organización islamista que controla la Franja de Gaza que, paradójicamente— a quien comparan con el "terrorismo tipo ISIS", después del "bárbaro ataque" sufrido en el país, "en el que más de 1.300 hombres, mujeres y niños fueron bárbaramente asesinados".

Un comunicado que no es insólito, ya que la diplomacia israelí suele lanzar mensajes reprobatorios hacia otros Gobiernos si se oponen a sus intereses, como ya sucedió en agosto con la ministra de Cooperación y Desarrollo belga, Caroline Gennez, después de que esta asegurara que "pueblos enteros" estaban siendo "borrados" por Israel y recientemente con las críticas declaraciones del presidente colombiano, Gustavo Petro, que han acabado con la expulsión de del embajador israelí de Bogotá y la suspensión de la cooperación bilateral en materia de defensa y seguridad.

La respuesta del Gobierno español, a través del Ministerio de Exteriores, solo tardó unas horas. En otro comunicado, rechazó "tajantemente las falsedades vertidas" por la embajada israelí sobre algunos de sus miembros, y advirtió de que el Ejecutivo español no iba a aceptar "insinuaciones infundadas sobre ellos": "Cualquier responsable político puede expresar libremente posiciones como representante de un partido político en una democracia plena como es España", subrayó Exteriores.

Este martes el ministro del ramo, José Manuel Albares, trató de zanjar la polémica desde el Consejo de Ministros, calificándola como un "incidente puntual", aunque sí admitió que se trataba de un "gesto inamistoso" por parte de la delegación israelí, lo que podría enfrías más aún las relaciones entre ambos países. Lo cierto es que ni Albares ni Sánchez han visitado nunca el país hebreo aunque sí se han desplazado a otros lugares de Oriente Medio. Quien sí lo hizo fue su antecesora en el cargo, Arantxa González Laya, en 2020, un viaje en el que también aprovechó para visitar Palestina.

Albares reveló que mantuvo una conversación telefónica el martes con la delegada diplomática israelí, Radica Radian-Gordon, tras la emisión del comunicado en la que le trasladó su "profundo disgusto" por el contenido de la nota y en la que le informó que su departamento respondería. Ella misma, en una entrevista con El Periódico de España, ha afirmado que "suministrar agua y luz a Gaza supone apoyar a Hamás", una posición que contrasta con la expresada por el Gobierno español, que ha pedido no solo que no se produzcan estos cortes, sino que la Unión Europea mantenga la ayudas a Palestina.

En una comparecencia de Sánchez en Moncloa a última hora de este martes, el presidente del Gobierno en funciones no ha hecho ninguna alusión al comunicado israelí. El socialista ha confirmado que el español Iván Illarramendi se encuentra secuestrado por Hamás, al que ha pedido su inmediata liberación, y ha vuelto a repetir cuál es la postura oficial de la UE, que da derecho a Israel a defenderse pero siempre respetando el "Derecho Internacional y Humanitario". Además ha anunciado que incrementará la ayuda humanitaria a Gaza contribuyendo con 4 millones de euros adicionales. Y ha ofrecido el foro que la Unión por el Mediterráneo celebra los días 27 y 28 de noviembre en Barcelona como lugar idóneo para retomar el diálogo entre palestinos e israelíes y buscar una solución duradera al conflicto.

La apuesta por los dos Estados

Aunque España no ha reconocido de manera formal a Palestina como un Estado soberano, el Congreso aprobó una resolución en el año 2014 en la que instaba al Gobierno a hacerlo. Una década después ese anuncio oficial no se ha llevado a cabo a la espera de establecer una postura común europea, que debido a los difíciles equilibrios entre países —algunos más cercanos a Israel que otros—se antoja complicada. Con todo, Albares remarcó que "la Autoridad Nacional Palestina es un socio conocido y buen socio con el que se trabaja desde hace tiempo y ni un solo céntimo termina en manos de Hamás".

El ministro de Exteriores defendió la fórmula de los dos Estados —uno judío representado por Israel y otro árabe por Palestina— como única salida al conflicto a medio plazo, la misma postura expresada por Sánchez en los pasados días. En cuanto a las soluciones más inmediatas, destacó la necesidad de mantener e incluso aumentar la cooperación con el pueblo palestino, por lo que prometió que a la donación extraordinaria de un millón de euros en ayuda de emergencia española ya anunciada seguirán más.

Una postura que comparte el socio minoritario del Ejecutivo, aunque con matices. La vicepresidenta segunda y líder de Sumar, Yolanda Díaz, aseguró que la respuesta de Exteriores al comunicado de la Embajada israelí refleja la posición del Gobierno "al completo" y que ha tenido "un trabajo permanente" con Albares sobre este asunto. Sin embargo, desde la coalición de Díaz piden abiertamente a Sánchez que siga el camino de otros países europeos como Suecia y reconozca a Palestina al margen de la UE.

Más crítica se mostró la ministra de Derechos Sociales en funciones y líder de Podemos, Ione Belarra, que insistió este martes en denunciar la "voluntad de exterminio" de Israel contra el pueblo palestino: "No cabe la equidistancia; en este momento hay que decir claramente que Israel es un Estado ocupante", afirmó. En respuesta al comunicado de la embajada israelí a través de redes sociales, Belarra precisó que "denunciar el genocidio" que comete el país contra los palestinos no es "alinearse con Hamás", sino que "es una obligación democrática".

La condena de Sumar a Hamás

Al igual que ocurrió con la invasión rusa sobre Ucrania, la posición de los partidos que forman parte de Sumar sobre el conflicto entre Palestina e Israel se utiliza como arma —política—, por sus adversarios para tacharlos de equidistantes, en el mejor de los casos, o de aliarse con terroristas, en el peor. Desde Sumar son conscientes de que el "relato" de la derecha está calando y han tratado de dejar clara su postura, pero el comunicado de la embajada israelí sigue la misma línea que los ataques recibidos por parte de los dirigentes de PP y Vox.

Después de que el sábado 7 de octubre Hamás lanzara uno de los mayores ataques que se recuerdan sobre Israel desde que asumió en 2006 el control de la Franja, las palabras de condena se sucedieron por todo el globo. Una condena que fue unánime —incluyendo a Díaz— en el arco parlamentario español. Sin embargo, hubo voces como la de la parlamentaria de Sumar, Tesh Sidi, que aprovecharon el contexto para manifestar su apoyo cerrado a Palestina, lo que se interpretó de inmediato como un apoyo implícito a Hamás, que nunca se produjo. Esto sirvió al PP para apoyar el argumento de que "los aliados de Sánchez" no "condenaban" a Hamás e incluso afirmar que tenían "vínculos" con su entorno, como manifestó su vicesecretario de Cultura y Sociedad Abierta, Borja Sémper.

Sumar pide a Sánchez que siga el camino de Suecia y reconozca a Palestina al margen de la UE

Sumar pide a Sánchez que siga el camino de Suecia y reconozca a Palestina al margen de la UE

Aunque la izquierda se ha mostrado históricamente favorable a la causa palestina —varios diputados del grupo parlamentario participaron en la marcha del pasado domingo en Madrid—, es decir, a que este país cuente con un Estado propio y que Israel cumpla las resoluciones de la ONU en cuanto a la ocupación ilegal de sus territorios para que su población no se vea sometida a un régimen de apartheid, la condena desde Sumar al ataque de Hamás ha sido unánime, también por parte de los ministros de Podemos e Izquierda Unida —a los que, posiblemente, iba dirigido el comunicado—. La posición de la coalición que defiende Díaz es la expresada por su portavoz, Ernest Urtasun, que ha calificado en más de una ocasión el ataque de Hamás como un crimen de guerra, es decir, como una “vulneración del derecho internacional”.

Lo que sí ha generado más controversia dentro del grupo parlamentario es la calificación de Hamás como una organización terrorista. Lidera por el líder religioso Ahmed Yassin y fundada en 1987 en plena escalada del conflicto palestino-israelí, su nacimiento se explica en contraposición a la Organización para Liberación de Palestina (OLP), hasta entonces la autoridad legítima de los palestinos inspirada en el socialismo y el nacionalismo, al entender que no estaba logrando defender los intereses del pueblo palestino.

Hamás no renuncia a la vía política para lograr sus objetivos —de hecho, se presenta a las elecciones y cuenta con un amplio respaldo popular— pero tampoco a la violencia. No todas las organizaciones internacionales la definen como organización terrorista al uso, pero la Unión Europea sí que la incluye en sus listados. Fuentes cercanas a Díaz explican que su criterio es el mismo que el de la UE a pese a que el líder del PCE y diputado de Sumar, Enrique Santiago, evitó deliberadamente calificarla como tal. 

Más sobre este tema
stats