Los recortes se cuelan en las pruebas de selectividad

La actual coyuntura social y política, la corrupción y la crisis económica también tienen hueco en los exámenes de selectividad. El discurso crítico con los recortes del Gobierno se coló, por ejemplo, en el comentario de texto que los estudiantes murcianos realizaron el pasado lunes a través de un texto titulado "La otra cara del escrache" en el que la escritora Julia Navarro criticaba los tijeretazos del Gobierno y se mostraba compresiva con los ciudadanos que expresan en la calle su indignación, si bien criticaba esta forma de protesta. El texto provocó una cadena de críticas de la Federación Regional de Estudiantes Murcianos Feremur, una organización que se autodefine como "liberal" y defensora de un modelo educativo basado en la "excelencia". 

"El artículo está tan sumamente predeterminado hacia un lago ideológico que perjudica a los estudiantes. No hay que mezclar las cuestiones políticas y las académicas", señaló a infoLibre Pilar Rodríguez Losantos, presidenta de la federación. El colectivo, que calificó de "aberrante" el contenido del examen, llegó incluso a pedir "una sanción ejemplar al coordinador de las pruebas por haber realizado semejante despropósito" y una "disculpa pública a todos los estudiantes que se han sentido ofendidos y utilizados por esta persona". 

Aunque las pruebas todavía no han concluido en todas las comunidades autónomas, los murcianos no son los únicos alumnos que han tenido que analizar textos que incluyen críticas a la clase política o la situación económica. Y es que es muy recurrente la utilización para estas pruebas, además de textos literarios, artículos publicados en diferentes soportes periodísticos, donde temas de actualidad como los citados son muy recurrentes.

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Ese es el caso, por ejemplo, de los estudiantes valencianos. En la prueba de Castellano de la convocatoria de junio de este año, los aspirantes a entrar en la Universidad se las vieron ante un texto titulado "Los antisistema son ellos", publicado en el blog que Pedro Simón tiene en elmundo.es. En esa columna, el autor hace referencia a los políticos que "llevan los colores de la bandera de España en una pulsera y luego se llevan el dinero a Suiza". "No es antisistema el que pide una democracia radical, sino el que trata de enjaularla y domesticarla con cacahuetes", añade Simón.

Sin embargo, la inclusión en estas pruebas de textos muy relacionados con la coyuntura del momento no es una novedad. Y es algo que puede constatarse al echar un vistazo a exámenes de años anteriores que, por ejemplo, recoge educaweb.com. La Universidad de Zaragoza incluyó en el examen de Lengua y Literatura de la convocatoria de junio de 2009 un texto en el que se defendía la idoneidad asignatura Educación para la Ciudadanía –muy criticada en aquel momento por la Iglesia católica y la derecha política y mediática–.

Ese mismo año, los alumnos castellano-manchegos también tuvieron que analizar un texto de Rosa Montero publicado en El PaísEl Paíssobre un tema polémico, el velo islámico. "La UE jamás debería permitir los burkas, que marginan y borran a la mujer. Pero el chal en torno a la cabeza, ¿por qué no?", se preguntaba la escritora. En esa misma Universidad, pero dos años después, los alumnos también se enfrentaron a un texto sobre un asunto espinoso difundido por Público. En este caso era la contaminación y la ley antitabaco. La autora criticaba la "persecución a los fumadores" mientras, bajo su punto de vista, nadie ponía coto a la contaminación provocada por los vehículos a motor.