Trabajar menos pero participar más en la gestion empresarial: Díaz pone su sello laboral a Sumar

Decidida a cambiar el paso tras las agónicas negociaciones entre los partidos para crear la candidatura de Sumar y consciente del clima de pesimismo que se ha instalado en buena parte de la izquierda, la vicepresidenta Yolanda Díaz va desgranando las propuestas de su nuevo proyecto. "Las elecciones de este año van sobre vuestras vidas y la respuesta os decimos que es Sumar”, ha asegurado este miércoles en el acto de presentación de los cabezas de lista al Congreso. Sobre los candidatos, ha dicho "no les unen los carnets ni las siglas" sino "un compromiso de largo aliento con su país y desde ahí vamos a mejorar la vida de España".

Una de las ideas que Díaz siempre repite y que este miércoles también ha sido el hilo conductor de su intervención es que las próximas elecciones generales van de "tener una vida mejor". "Estas elecciones van de ti, de que tengamos una vida mejor, de que podamos vivir mejor, de que puedas estar con los tuyos, del coste de la vida, de que podamos realizar la compra con dignidad, de que podamos pagar la hipoteca, de que podamos pagar el alquiler, del cambio ecológico".

Vivir mejor, vivir más tranquilos, vivir felices. En definitiva, que la política sirva para facilitar la vida de la ciudadanía. Es el mensaje que la vicepresidenta potencia y al que liga sus propuestas, muchas de las cuales están relacionadas con el mundo laboral, un filón que trata de aprovechar con el aval de gestión que le confiere liderar la cartera del ministerio de Trabajo. Aunque formalmente Sumar no ha presentado su programa, Díaz y su equipo han ido revelando las propuestas clave de la coalición para los comicios del 23J.

Reducir la jornada laboral y trabajar, como máximo, hasta las 18

Díaz planteó el martes establecer el fin de la jornada laboral a las 18 horas con el objetivo de que los trabajadores dispongan de más tiempo diario para poder conciliar con sus familias. Todo ello sin perder capacidad adquisitiva, incluso ganándola. "Queremos tiempo para nuestras vidas, queremos reducir la jornada laboral, trabajar menos y hacerlo con calidad de vida. Y sobre todo queremos que la jornada laboral se termine a las seis de la tarde de tal manera que a partir de ahí podamos disfrutar de la vida", señaló la vicepresidenta.

Una propuesta que va en la línea de la jornada laboral de 32 horas semanales —o de cuatro días— que ya han introducido en el debate público formaciones como Más Madrid y Compromís, ambas integradas en la coalición de Díaz. En las conclusiones de los grupos de trabajo de Sumar se abogaba por una reducción "en general" de la jornada laboral, justificada en la necesidad de adaptar el trabajo a las tareas de cuidado y favorecer la conciliación de la vida personal y familiar. Los sindicatos en España, con los que Díaz mantiene una buena relación, apoyan la tendencia. 

Participar en las decisiones empresariales

La vicepresidenta segunda también apuesta por una "profundización democrática del país". Eso significa "entrar en instituciones que son muy elitista" como es el ámbito de la empresa o de la justicia. En el caso de las empresas, Sumar lo define como la "gran asignatura pendiente" de España: la democratización del trabajo. Para Díaz eso significa que "los trabajadores formen parte de los procesos de toma de decisión sobre qué se produce, cómo se produce y quién lo produce". Un "socialismo participativo" en el que los trabajadores tengan derecho de voto en sus empresas, incluso en las pequeñas, para que el accionista no acumule todo el poder.

En España, hubo un intento de llevar la cogestión a través de la negociación colectiva, en las empresas del INI (las empresas públicas, el antecedente de la SEPI), que duró muy poco tiempo. En la actualidad, en el País Vasco es un debate bastante avanzado. En septiembre de 2018, el Parlamento vasco aprobó una proposición no de ley que instaba al Gobierno autonómico a promover un nuevo modelo de empresa “inclusivo-participativo".

Eliminar los "laberintos burocráticos"

Díaz también ha señalado en varias ocasiones que la administración está desfasada. Por ese motivo no es de extrañar que uno de sus grupos de trabajo vaya en la misma línea. "Es necesario apostar por una Administración de calidad, sin laberintos burocráticos, en la que la transparencia sea la principal vacuna anticorrupción", exponen. "No puede ser un búnker aislado del exterior, sino una herramienta de la ciudadanía para resolver sus problemas y hacerse escuchar, y para ello es necesario hablar el mismo idioma y evaluar las medidas que adopta y pone en marcha".

La candidata de Sumar considera que la gestión del Ingreso Mínimo Vital (IMV), es un buen ejemplo de esta falta de eficiencia administrativa. El Gobierno lo planteó como la vacuna más eficaz contra la pobreza, pero ha pasado a ser el virus de la desesperación y el sufrimiento de sus solicitantes.  La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) ha señalado deficiencias en la ejecución de un sistema que sigue sin llegar a toda la población que tendría objetivamente derecho a recibirlo: hasta el 58% que puede solicitarlo no lo hace y apenas alcanza a un 35% los beneficiados efectivos.

Crear un bono de emergencia para las hipotecas variables

El pasado domingo Díaz propuso crear un bono de emergencia para que las familias puedan costear la subida de las hipotecas a tipo variable y paliar así la pérdida de poder adquisitivo de los hogares. Un bono que, según sus cálculos, tendría un coste de 1.000 millones de euros y sería aplicable a hipotecas de hasta 250.000 euros y con una antigüedad de hasta 10 años. "Hemos planteado un bono de emergencia de 1000 € que pagará la banca a través del impuesto extraordinario", ha explicado este miércoles el referente económico de Sumar, Carlos Martín.

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Las personas hipotecadas a tipo variable, que sufren el ascenso del euríbor en cada renovación semestral o anual de la cuota, son los principales damnificados. La evolución del euríbor depende de las subidas de los tipos de interés. Esto depende a su vez de las altas tasas de inflación, que a su vez dependen de los precios energéticos y alimentarios, que siguen disparados por varias razones, fundamentalmente por la invasión rusa de Ucrania.

Energía a bajo coste o gratis para vulnerables

Otra de las banderas de Sumar es el ecologismo, una temática a la que se le quiere dar especial importancia en esta campaña. La propuesta en materia energética de Sumar pasa por aumentar la "ambición" de la ley de cambio climático ya en vigor, por reformar la ley del sector eléctrico "que incluya la recuperación de utilidad pública, el pago por uso, normas de estabilidad en el funcionamiento del mercado mayorista" y otros objetivos. Sumar también quiere abrir el debate sobre la necesidad de "establecer para cada tipo de unidad familiar un mínimo vital energético que tenga un coste reducido o, incluso, nulo si su estado es de vulnerabilidad".

El pasado año será recordado por el precio disparatado de la factura energética y el impacto que sufrieron millones de hogares vulnerables. Pero 2022 terminó con precios de la luz completamente irrisorios, con horas donde la electricidad es prácticamente gratuita.