La activista de Femen que arrojó la Constitución a Fernández Díaz acepta un año de prisión

La activista de Femen Rosa María M.E., que arrojó un ejemplar de la Constitución al entonces ministro de Interior Jorge Fernández Díaz, ha aceptado este martes la pena de un año de prisión. Ha explicado que lo hizo "en defensa de la libertad de expresión", y que "en ningún momento" era su intención usar la violencia, sino entregar en mano el ejemplar al ministro.

Así lo ha asegurado este martes ante el juez en la Sección 6ª de la Audiencia Provincial de Madrid. La Fiscalía ha retirado la petición de delito de desórdenes públicos, ha rebajado su acusación de delito a falta de lesiones, y ha disminuido su solicitud de pena de prisión hasta el año de cárcel por el delito de atentado contra la autoridad y una multa de seis euros al día durante seis meses, alrededor de unos 1.080 euros, así como posibles medidas sociales.

En este sentido, el abogado de la acusada ha explicado que su clienta no tiene actividad laboral, es estudiante, por lo que ha solicitado que se imponga una multa mínima: 2 euros al día durante seis meses. Además, ha destacado que su representada no ha tenido ningún problema judicial.

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Según se desprende del escrito de acusación, la activista acudió el 23 de abril de 2015 al Salón de Actos del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos donde se celebraba un acto presidido por Fernández Díaz. Allí, "actuando con desprecio del principio de autoridad", la acusada se levantó de su asiento y se quitó la ropa "mostrando su torso desnudo".

En la parte trasera y delantera de su cuerpo llevaba escrito con tinta negra "violador de libertades". A continuación, y dirigiéndose "a gran velocidad" hacia la mesa donde estaba el ministro, comenzó a gritar: "¿sabe usted lo que es la Constitución?".

Fue en ese momento, tal y como se desprende del escrito, cuando Rosa María lanzó "violentamente" un ejemplar de la Constitución que no llegó a impactar contra él gracias a la intervención de los policías. Ambos agentes consiguieron reducirla y desalojarla del Salón de Actos, si bien la acusada se resistió "lanzándoles patadas y codazos" que les provocaron diversas lesiones.