Juan Carlos I se reescribe en 'Le Figaro' con una entrevista llena de medias verdades

El Rey emérito Juan Carlos I

Juan Carlos I lanza libro. Y como todo autor, está de promoción. El que fuera jefe del Estado durante 39 años y que acabó, según él, “exiliado o, como defienden otros, fugado, ahora quiere mostrar su versión de la historia y recuperar el foco mediático, que nunca ha llegado a perder, para quizá tratar de reconciliarse con su familia y con su pueblo. 

En una entrevista con Le Figaro Magazine lo explica todo, desde su polémico viaje para cazar elefantes en Botsuana, su intervención (o no) en el golpe de Estado de Tejero, su relación con Franco, su abdicación en favor de Felipe VI… Y también reprocha bastantes cosas a la familia y al Gobierno, entre ellas, que no puede ver a su nieta, la princesa de Asturias, que no ve a su esposa, que le han acusado “falsamente" de tener cuentas en Suiza… 

Reconoce que dudó en escribir este libro, “pero me di cuenta de que los hijos y nietos de mis amigos no tenían la menor idea de Franco ni de la transición democrática que le siguió”, asegura un Juan Carlos que parece erigirse en el encargado de escribir la historia de la democracia.

Pero muchas de estas “verdades y vivencias” que relata el Borbón en la entrevista están, en realidad, plagadas de imprecisiones e incluso de falsedades. Mención aparte merecen las valoraciones subjetivas del firmante de la entrevista, como que el Gobierno utiliza al rey emérito para desacreditar la monarquía. Le Figaro se define discursivamente como independiente y abierto a “todas las corrientes de pensamiento", pero es un medio de derecha liberal–conservadora y su línea editorial se ha endurecido en los últimos años.

Lo que parece claro es que el emérito quiere volver al espacio público y con este libro, que se publicará primero en Francia, el 5 de noviembre, y tres semanas después en España, parece pretender hacer la vuelta más rápida. Réconciliation. Mémoires. Juan Carlos I d'Espagne (Reconciliación. Memorias. Juan Carlos I de España, en español) ha sido escrito por Laurence Debray y será publicado por Planeta en nuestro país. 

El anterior jefe del Estado califica su situación actual como la de un "rey caído" y, de hecho, así es como quería titular en un principio la obra. "Espero sobre todo, durante mi vida, tener una jubilación tranquila, renovar una relación armoniosa con mi hijo y, sobre todo, regresar a España, a mi hogar", cuenta en esas páginas, según varios extractos –entre ellos esta última frase– publicados en exclusiva por el semanario francés Le Point. Extractos a los que hay que sumar ahora sus declaraciones para Le Figaro Magazine. Ambos medios viajaron hasta Abu Dabi para reunirse con él, en la pequeña isla en la que vive, después de que se la cediera el jeque de los Emiratos Árabes Unidos, Mohammed Ben Zayed. 

Sobre Franco

"Tras cuarenta años de dictadura, le di a los españoles una democracia que sigue viva; es mi herencia", dice con orgullo, tras explicar en la entrevista a Le Figaro cómo estuvo años tratando de llevar la libertad al Estado español. Aunque no parece que Franco se diera cuenta. Según dice el propio Juan Carlos, el dictador le trataba de una forma “paternal”, que queda patente en un hecho histórico completamente objetivo: el sucesor del franquismo era el entonces príncipe Juan Carlos de Borbón.

"¡La democracia española no cayó del cielo! La quise desde el principio, y mi libro cuenta esta historia", asegura Juan Carlos I. Recuerda que, cuando llegó al poder tras la muerte de Franco, "tenía la brújula, pero no el plan". 

“Franco quería un régimen más abierto”, afirma, aunque la Historia ha demostrado que, cuando el dictador le nombró sucesor, lo que siempre quiso fue asegurar la continuidad del régimen bajo su control, no abrir la democracia. Tanto es así, que la Transición solo fue posible tras su muerte.

Precisamente se ha aplazado la publicación del libro en España para evitar que coincida con la efeméride del cincuentenario de su muerte, el 20 de noviembre de 1975. 

En la entrevista y a lo largo de las páginas del libro se lamenta de que nunca ha sido dueño de su destino: "Mi vida estuvo dictada por las exigencias de España y el trono. Di libertad a los españoles al establecer la democracia, pero nunca pude disfrutarla para mí".

Sobre su hijo y la familia

En la entrevista se dice que el rey de España, Felipe VI, quiso persuadir a su padre de escribir sus memorias. Precisamente, el jefe del Estado siempre ha temido la actitud “sin filtros” en la que puede caer su padre, explican en Le Figaro

Pero, para Juan Carlos, su hijo es lo primero. Por ello, dice, decidió “marcharse” de España: para no dañar la imagen de Felipe y "no obstaculizar el buen funcionamiento de la Corona ni a mi hijo en el ejercicio de sus funciones soberanas". Es aquí cuando asegura que tanto su hijo como el Gobierno fueron los que le impusieron este aislamiento que “acepta con fatalismo”.

El emérito también habla de la familia, a la que apenas ve, salvo a Froilán, que vive con él. Dice sentirse “resignado y herido por una sensación de abandono” y asegura emocionarse “al pensar en ciertos miembros de mi familia para quienes ya no importo”.

Juan Carlos también se atreve con un consejo para su nieta Leonor, heredera al trono de España, a la que recomienda “seguridad en sí misma, que cumpla con su deber con simpatía y amabilidad, que sea la garante del respeto a la Constitución Española". "La obra de mi vida", concluye, preocupado por un mundo donde el autoritarismo y el populismo vuelven a afianzarse: "Es más fácil destruir una democracia que construirla".

Sobre el 23F

En estas memorias, Juan Carlos traza la traición de uno de sus amigos más cercanos, el general Armada. "No hubo un golpe, sino tres. El golpe de Tejero, el golpe de Armada y el golpe de los cargos electos cercanos al franquismo. Alfonso Armada estuvo a mi lado durante diecisiete años. Lo quería mucho, y él me traicionó. Convenció a los generales de que hablaba en mi nombre", señala.

En la entrevista para el medio francés, confiesa la sensación de vértigo que sintió al encontrarse, a los 37 años, como monarca absoluto. "Durante dos años, tuve todos los poderes. El poder de indultar o refrendar la pena de muerte. No tuve que hacerlo, gracias a Dios, porque en ese momento, si hubiera dicho que no, los generales me habrían derrocado".

Y relata una cena con Javier Cercas, a propósito de su libro Anatomía de un instante, en la que reprocha al escritor que sugiriera su empatía con la intentona golpista: "Le dije: '¿Cómo puedes creer que yo estuve involucrado?'".

Más falsedades

Admite como un error su cacería en Botsuana, por la que ya ha pidió disculpas en aquel vídeo en el hospital asegurando que “no se volverá a repetir”. Y reconoce también que fue "un grave error" haber aceptado el regalo de cien millones de dólares que le hizo el rey Abdulá de Arabia Saudí en agosto de 2008, pero afirma que esa cantidad era "para la corona española”.

Cinco años de la huida de Juan Carlos I: de vivir en Abu Dabi a las regatas de Sanxenxo

Cinco años de la huida de Juan Carlos I: de vivir en Abu Dabi a las regatas de Sanxenxo

Sin embargo, no existe documentación que vincule tal dádiva con la institución. Las fiscalías suiza y la española investigaron su origen y destino, y no pudieron acreditar su devolución a la corona ni un uso institucional de ese dinero. Los cien millones fueron, por tanto, una transferencia personal al entonces rey.

También apunta Juan Carlos que "todos los procesos judiciales [contra él] han sido desestimados" y que no se le ha imputado "nada". La realidad es que el rey emérito nunca fue juzgado por blanqueo de capitales, delitos fiscales o cohecho. La Fiscalía archivó las investigaciones en 2022 al considerar prescritos los posibles delitos o por la inviolabilidad constitucional, pero, por tanto, ningún tribunal le absolvió.

Minucias todas ellas si se comparan, según se desprende de su testimonio, con sus aportes a la democracia: saca pecho de haberse relacionado con líderes de todo signo e ideología política asegurando que ha sido “el reconciliador de mi pueblo. Espero que mi libro exorcice nuestros demonios, que están volviendo”.

Más sobre este tema
stats