Susana Díaz fuerza a Pedro Sánchez a pronunciarse sobre el cupo vasco y complica el discurso del PSE

El líder del PSOE, Pedro Sánchez, y los socialistas vascos, con su secretaria general Idoia Mendia a la cabeza, intentaron este jueves zanjar el debate en torno al sistema de financiación de Euskadi reabierto a raíz de las declaraciones de la presidenta de Andalucía, Susana Díaz, quien el lunes se mostró "contraria a los privilegios" y reclamó "modular" el cupo vasco. Sánchez declaró que los socialistas se sienten "cómodos" y "a gusto" con el sistema. El PSE, por su parte, presentó una iniciativa en el Parlamento Vasco en defensa del mecanismo vigente.

La controversia, defienden los socialistas de Euskadi, viene dada en buena medida por la complejidad del sistema. A diferencia de lo que ocurre en el resto de comunidades autónomas, Euskadi (y Navarra) recaudan sus impuestos y después pagan al Estado una cantidad por las competencias que no ejerce la administración autonómica. El importe se negocia entre País Vasco y el Estado, y se fija por ley cada cinco años. Si no hay acuerdo, se prorroga la anterior. Esa es la situación actual –pervive la norma de 2007-2011–, pues el Ejecutivo vasco y el central se reclaman mutuamente cantidades de ejercicios anteriores y no han sido capaces de cerrar un nuevo pacto.

La posición oficial del partido a nivel federal la fijó ya este jueves su secretario general, Pedro Sánchez. Aseguró que el verdadero debate es el de "actualizar la financiación autonómica" y que no "están en cuestión" ni el concierto vasco ni el cupo. "La gran ventaja del PSOE es que lo tiene escrito", reiteró Sánchez, quien se remitió a la Declaración de Granada aprobada por el partido en julio de 2013. Ese documento señala, literalmente, que "la institución del concierto y el convenio del País Vasco y Navarra deben seguir manteniendo reconocimiento constitucional, sin perjuicio de perfeccionar algunas de sus deficiencias en su aplicación práctica".

Andalucía y Valencia, contra el cupo

Las palabras del candidato a la Moncloa de los socialistas vienen a reconvenir a federaciones como la valenciana y especialmente la andaluza, que en los últimos días se desmarcaron de esa línea y reabrieron el debate sobre la financiación vasca a poco más de dos meses de las elecciones generales. Apenas 24 horas después de las primeras declaraciones de Díaz, la secretaria general del PSE Idoia Mendia le respondió: Euskadi, dijo, no tiene "un régimen privilegiado" ni recibe dinero del Estado, sino que lo aporta al conjunto. "Susana ha dicho que hay un desequilibrio y que es un privilegio. Por ese lado, creo que cada uno tiene que encargarse de lo suyo", zanjó Mendia.

Pero la líder andaluza insistió en sus planteamientos y su respuesta no se hizo esperar. Llegó el miércoles: “Los que están pidiendo solidaridad en Cataluña ahora resulta que la niegan en Euskadi”, ironizó. A su llegada a un desayuno informativo, apuntó que "cuando se defiende la igualdad, se defiende que un ciudadano en cualquier rincón de España tenga la misma sanidad, la misma educación y los mismos servicios públicos" y que, a su juicio, es "una realidad" que en la actualidad no todas las comunidades autónomas están "bien financiadas". Hay que "modular" el cupo en defensa de "la igualdad de todos los ciudadanos", reiteró.

A la polémica se sumó este jueves el presidente de la Comunitat Valenciana, Ximo Puig, uno de los barones socialistas próximos a Díaz. Puig consideró que el concierto vasco "hay que respetarlo", pero que "el resultado del cupo no puede llevar a asimetrías como las que se producen en estos momentos". Si en los últimos años la Comunidad Valenciana hubiera recibido la financiación media que tienen Euskadi y Navarra, ahondó, eso le habría supuesto 9.000 millones de euros más al año. Finalmente, y sin "quitarle nada a nadie", pidió que los valencianos sean "tratados con igualdad".

El PSE, entre la espada y la pared

En el PSE no ocultan su malestar con esas posiciones. La propia Idoia Mendia declaró también este jueves que "los temas vascos a veces pueden resultar complejos" pero que Euskadi "aporta" al conjunto del Estado, y llamó a respetar la consabida Declaración de Granada. "No es ningún Gobierno autonómico quien propone modificaciones sobre el cálculo del cupo", sostuvo en clara referencia a las palabras de los líderes de otras federaciones socialistas, de quienes dijo que "algunos acaban de llegar" a la Presidencia autonómica y tienen "problemas gravísimos" para hacer los presupuestos.

"Y eso lo entiendo –continuó–, pero se trata de arreglar lo que no funciona y no de fastidiar lo que funciona. Los vascos siempre hemos sido solidarios". Fuentes del PSE consultadas por infoLibre apuntan que el debate sobre el concierto es "extemporáneo", que "ahora no toca". "¿Un privilegio? Eso hay que verlo con números, y no hacer un debate en el aire", añaden. Los socialistas vascos sostienen que el sistema "puede llegar a ser favorable en su resultado final" pero que implica "asumir un riesgo", porque deja a la comunidad fuera del reparto de ayudas extraordinarias que dependan del Estado, como el fondo de liquidez extraordinaria o el de pago a proveedores.

Especialmente críticos se muestran con la presidenta Susana Díaz. "Susana nos complica la vida". "Nos obliga a hacer mucha pedagogía para explicar que no se trata de cambiar el sistema, sino que se propone, si acaso, actualizar la cuantía del cupo como dice la ley". "Cosas como las que ella dice con las que se dicen cuando se habla desde el desconocimiento". Son algunas de las frases con las que se opina en el PSE sobre la actuación de la líder andaluza, que con sus posiciones introduce un elemento en el debate político vasco que hasta ahora no está presente y donde la posición de los socialistas no es fácil. Añaden que, además, el PNV estaba "fuera de juego" de cara a la campaña de las generales y que ahora "sobreactúa" porque ha encontrado un caballo de caballa: la defensa del sistema foral.

Las reticencias hacia Susana Díaz se comparten en el PSC. Los socialistas catalanes comparten la idea de actualizar la cantidad que Euskadi entrega al Estado cada año, pero consideran que el gesto de la presidenta andaluza, habida cuenta del calendario electoral, "es poco conveniente". "Es un tema que no toca en este momento", comenta un dirigente de la formación, pero "todo el mundo quiere poner su granito de arena" y "[el PSOE de] Andalucía intenta llevar un poco la voz cantante". "En el PSC –reitera este miembro de la dirección de los socialistas catalanes– estaremos con el PSE, aunque creamos que el cupo puede generar desigualdades".

Debate en Euskadi

En el País Vasco las reacciones al debate interno en las filas socialistas no se hizo esperar. El PNV llevó la voz cantante como defensor del particular sistema de financiación. El lehendakari Urkullu advirtió de que no permitirá una "modificación unilateral" del concierto. "Es una línea roja que no vamos a admitir que se traspase", pues "es un sistema histórico, legal, solidario y eficaz, pactado en la ley y que sólo redunda en beneficio de la ciudadanía", dijo. Se da la circunstancia de que, tras las últimas elecciones municipales y forales, nacionalistas y socialistas pactaron gobernar juntos diputaciones forales y numerosos ayuntamientos.

Para tratar de frenar esa ofensiva del PNV y calmar los ánimos, el PSE presentó este jueves dos iniciativas en la Cámara vasca. La primera, una proposición no de ley, insta al Parlamento a "reiterar su compromiso con el Concierto Económico", a solicitar la "actualización del Cupo" en los términos que establece la ley y a que las administraciones estatal y autonómica "defiendan y expliquen" todas las "peculiaridades" del sistema "a fin de que no se cuestione esta figura y se aleje cualquier duda sobre la misma". En la segunda, se pregunta al lehendakari Urkullu por los pasos que dará para lograr ese acuerdo con el Gobierno de Madrid.

El resto de fuerzas no han dejado pasar la ocasión e incluso el PP cargó contra las críticas de miembros del PSOE al concierto económico vasco. "Defendemos contundentemente su existencia", dijo el vicesecretario del PP Javier Maroto, quien este jueves proclamó la "férrea defensa" del cupo por parte de los conservadores y calificó de "sorprendentes" los "ataques" de PSOE y Ciudadanos al mecanismo. "Que haya partidos que estén cuestionando el concierto económico es para mirárselo", juzgó.